La bilis de Paquillo
El granadino critica duramente a la federaci¨®n por "su total falta de apoyo"
Dos veces sinti¨® ayer Paquillo Fern¨¢ndez el sabor amargo de la bilis en su boca.
Una vez, la primera, fue el sabor real, f¨ªsico. Fue nada m¨¢s terminar la carrera, cuando extenuado por el esfuerzo se inclin¨® ligera y discretamente hacia el borde de la pista y vomit¨®. Vomit¨® todo el l¨ªquido que hab¨ªa bebido durante la carrera, el agua, las sales, que hab¨ªa intentado infructuosamente que abandonara su est¨®mago saltar¨ªn, oprimido por un diafragma incansable, y que entrara en su sangre, que se metabolizara, que frenara la deshidrataci¨®n que siempre le asalta al granadino cuando marcha en un ambiente h¨²medo. De ese amargor le sacaron dulcemente las palmadas en la espalda, cari?osas, que le prodigaron al un¨ªsono Jefferson P¨¦rez y Juanma Molina, sus compa?eros de podio, contentos, deseosos de compartir su felicidad con su amigo Paquillo.
Para Korzeniowski, el atleta espa?ol sufre algo as¨ª como un "complejo Jefferson"
"La federaci¨®n no se ha portado conmigo como deb¨ªa. Dije que lo iba a decir y lo he dicho"
La segunda vez fue la bilis metaf¨®rica, la hiel de la que habla el Arcipreste de Hita en sus versos esos que dicen "pues amarga la verdad quiero echarla de la boca..."
Mientras Robert Korzeniowski segu¨ªa vistiendo el ch¨¢ndal del equipo espa?ol, la chaqueta y el pantal¨®n rojos que le permitieron, pese a su acreditaci¨®n como miembro de la televisi¨®n polaca, entregar los avituallamientos a su pupilo en carrera, Paquillo Fern¨¢ndez hablaba por la boca del deportista que tras una brava carrera ha tenido que doblar el espinazo. Hablaba Paquillo de sus problemas con la humedad, de que al final "s¨®lo hab¨ªa podido rendir al 80%", de que "a¨²n y as¨ª" hab¨ªa terminado segundo, de que hab¨ªa ganado "una plata que sabe a poco", de que, de todas maneras "era una plata". Y as¨ª segu¨ªa Paquillo mientras Robert Korzeniowski, polaco, el mejor marchador de la historia, retirado despu¨¦s de los Juegos de Atenas, entrenador de Paquillo desde octubre pasado, segu¨ªa a¨²n con su ch¨¢ndal rojo con la palabra Espa?a en amarillo y analizaba r¨¢pidamente la carrera. Y haciendo coro a Paquillo, Korzeniowski alababa la t¨¦cnica perfecta del zagal de Guadix, y repet¨ªa lo de sus problemas para hidratarse en ambientes h¨²medos, y tambi¨¦n criticaba la t¨¢ctica de su pupilo, y dec¨ªa que hab¨ªa que saber dejar que los dem¨¢s marcaran el ritmo, que marchar inteligentemente no es marchar siempre en cabeza, y a?ad¨ªa que quiz¨¢s Paquillo sufr¨ªa "un complejo Jefferson".
Pero Korzeniowski desapareci¨® andando tan r¨¢pido como cuando marchaba y regres¨® al minuto vestido de civil, chaqueta de piel clara, corte vaquero, transformado en el ciudadano de Cracovia, hombre de negocios varios, que es Korzeniowski para la federaci¨®n espa?ola. Y Korzeniowski reapareci¨®, pero mudo. Para entonces ya Juanma Molina hab¨ªa empezado a hablar, a repetir su t¨¦cnica de la "cabeza fr¨ªa" a explicar c¨®mo en marcha hay que ir poco a poco, "dosificando la ambici¨®n", "sin fuegos artificiales", "sin farfullas varias", y ya estaba explicando a la perfecci¨®n su conquista del bronce, con una imagen perfecta: "Ha sido un pulso conmigo mismo para seguir fr¨ªo".. Y fue entonces cuando el triple hombre de plata empez¨® a soltar la verdad.
"La federaci¨®n no se ha portado conmigo como deb¨ªa", dijo Paquillo. "No han respetado mi elecci¨®n, no han respetado a mi entrenador, no me han respetado a m¨ª, no han respetado a nadie. Tendr¨ªan que haberme apoyado al 100% porque soy una garant¨ªa de una medalla que he ganado para la federaci¨®n y no lo han hecho". Y dichas estas cosas y alguna m¨¢s, Paquillo ya se sinti¨® tranquilo con su conciencia. "Dije que lo iba a decir despu¨¦s de la carrera y lo he hecho".
Y todo ten¨ªa que ver con su entrenador, con el Korzeniowski en quien tanto conf¨ªa, a quien tanto ama. Despu¨¦s de los Juegos de Atenas, que disput¨® sin entrenador porque hab¨ªa fallecido Manolo Alcalde, el suyo de toda la vida, unos d¨ªas antes, Paquillo Fern¨¢ndez rechaz¨® todos los t¨¦cnicos que le ofrec¨ªa la federaci¨®n y eligi¨® a Korzeniowski. Y pidi¨® a la federaci¨®n que el plan ADO asumiera su sueldo como hab¨ªa hecho con Alcalde. El problema fue que, seg¨²n la federaci¨®n, el plan ADO proh¨ªbe retribuir a t¨¦cnicos extranjeros. Y la soluci¨®n ofrecida por la federaci¨®n fue que Paquillo asumiera la cantidad destinada al t¨¦cnico por el ADO y que justificara todo lo entregado como gastos de preparaci¨®n, viajes, concentraciones, material... Sin embargo, para Paquillo esta soluci¨®n se queda corta, pues aparte del sueldo de su t¨¦cnico, ha tenido que asumir la multiplicaci¨®n de los gastos de viaje y dem¨¢s que le ha supuesto tener un entrenador radicado en Polonia. Y de esos gastos Paquillo tiene recibos por valor de 7.500 euros, una factura que, dice, la federaci¨®n no quiere asumir.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.