Mafias rusas con oficina en Espa?a

Tres vori b zakone (ladrones de la ley), t¨¦rmino con el que se designa a importantes jefes mafiosos en Rusia, duermen en c¨¢rceles espa?olas desde mediados de junio, como resultado del mayor golpe en Europa a las denominadas mafias rusas. Es una cifra muy elevada si se tiene en cuenta que apenas se conocen dos detenciones de este tipo en la Uni¨®n Europea. Los arrestados mov¨ªan un gran patrimonio en Espa?a, todav¨ªa sin evaluar en toda su dimensi¨®n, y hab¨ªan penetrado en el tejido social, econ¨®mico y pol¨ªtico a determinados niveles. Ten¨ªan grandes proyectos en marcha, tanto en Espa?a como en Portugal, relacionados con la hosteler¨ªa y la construcci¨®n. Su objetivo m¨¢s importante era preparar la introducci¨®n en Espa?a de una importante petrolera rusa con una red de gasolineras.

Los detenidos hab¨ªan penetrado en el tejido econ¨®mico y social

Fue un golpe dirigido por la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n en dos tiempos. Primero, el 1 de junio, la Guardia Civil (Operaci¨®n M¨¢rmol Rojo) desarticul¨® una red de blanqueo de dinero formada por ciudadanos ucranianos. Posteriormente, el 17 del mismo mes, el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa (Operaci¨®n Avispa) dio en el centro neur¨¢lgico de una potente organizaci¨®n georgiana con ramificaciones en Rusia. En ambos casos quedaba patente que las mafias rusas tienen sede social en Espa?a.

Las notas policiales dieron cuenta del aspecto superficial de ambas operaciones: lujosas residencias, algunas de ellas con tendencia a una ostentaci¨®n de dudoso gusto, inmuebles listos para ser vendidos, coches de alta cilindrada, joyas en grandes cantidades y un n¨²mero indeterminado de cuentas corrientes capaces de sumar cifras millonarias. En ese sentido, nada nuevo que diferenciase ambas operaciones de otras que tocan el asunto del blanqueo de capitales o el narcotr¨¢fico, a excepci¨®n de la incautaci¨®n en Almer¨ªa de un hotel de cuatro estrellas con 400 habitaciones, que pod¨ªa entenderse como una novedad. La nota de prensa no explicaba que entre el patrimonio de esta organizaci¨®n figuraban otros tres hoteles m¨¢s cuya propiedad no ha podido ser suficientemente acreditada.

En cualquier caso, las notas no dejaban m¨¢s informaci¨®n: una serie de extranjeros detenidos, considerados peligrosos, y sus correspondientes colaboradores espa?oles, entre ellos un empresario conocido por ser presidente de un club de f¨²tbol, el Reus Deportivo. Todos ellos estaban acusados de blanquear dinero y asociaci¨®n il¨ªcita: utilizaban la construcci¨®n como coartada y dispon¨ªan de una red de empresas, algunas de ellas procedentes de para¨ªsos fiscales como Andorra, Belice, Panam¨¢ y las Antillas holandesas, adem¨¢s de ramificaciones en Letonia, Hungr¨ªa y Holanda. El secreto del sumario tampoco permiti¨® saber mucho m¨¢s sobre el verdadero calado de ambas operaciones.

Especialmente austera fue la informaci¨®n que se divulg¨® tras la Operaci¨®n Avispa. Se cit¨® el n¨²mero de 28 detenidos, la mayor¨ªa de origen georgiano, y su importancia, pero nada m¨¢s. La mayor¨ªa qued¨® en libertad en poco tiempo. No trascendi¨® a la opini¨®n p¨²blica el nombre de dos de los que quedaron en prisi¨®n. Tampoco trascendi¨® lo que hab¨ªa sucedido con Tariel Oniani, uno de los objetivos de aquella operaci¨®n, un hombre muy conocido por todas las polic¨ªas de Europa, residente en Barcelona desde hace unos a?os. Oniani hab¨ªa logrado escaparse a un cerco formado por un despliegue de casi 400 polic¨ªas espa?oles. Alguien le avis¨®, sospechan los investigadores.

Cuando los geos entraron en el domicilio de Oniani y su esposa, ambos huidos, adem¨¢s de al ch¨®fer y dos personas del servicio, s¨®lo encontraron a la hija de ambos, menor de edad. Lo mismo sucedi¨® en el chal¨¦ de otro ladr¨®n de la ley, ¨¦ste s¨ª preso junto a su mujer. Ambas fueron llevadas a un centro de menores de Barcelona, en el que ingresaron por hallarse en situaci¨®n de desamparo. Desde ese momento, hasta su definitiva salida, el centro en cuesti¨®n y la Generalitat sufrieron todo tipo de presiones, desde las llamadas de "te¨®ricos" familiares de las menores, hasta un conato de tumulto de ciudadanos del Este a las puertas del centro pidiendo su liberaci¨®n. Ambas tuvieron que ser discretamente trasladadas a otro lugar. La polic¨ªa supo semanas despu¨¦s que se hab¨ªa puesto precio a la libertad de las ni?as, que se pagaban hasta 100.000 euros a quien lograra sacarlas del centro cuanto antes. En esas mismas horas, diputados del Parlamento de Georgia solicitaban que el Gobierno elevase una protesta al m¨¢s alto nivel por el trato que la polic¨ªa espa?ola hab¨ªa propinado a honrados ciudadanos georgianos y el "secuestro" de dos menores. An¨¦cdotas como ¨¦sas no eran m¨¢s que meros detalles de la importancia que ten¨ªan los detenidos y de su capacidad para mover algunos cimientos.

Dos d¨ªas despu¨¦s, la Guardia Civil pudo detener en el aeropuerto de Barcelona a Vitali Izguilov, otro importante ciudadano ruso que ten¨ªa residencia en la localidad alicantina de Campello. La Guardia Civil ten¨ªa mucha informaci¨®n acumulada sobre Izguilov, hab¨ªa vigilado los restaurantes de su organizaci¨®n en el centro de Alicante, tan caros como escasos de clientela, pero aquello fue un golpe de suerte: s¨®lo alguien que se sintiera realmente impune ser¨ªa capaz de regresar a Espa?a sabiendo que unos d¨ªas antes la polic¨ªa hab¨ªa detenido a gente importante relacionada con su organizaci¨®n. Izguilov era un "ladr¨®n de la ley". Como el fugado Oniani. Como otros dos cuyos nombres no se han divulgado, pero que est¨¢n en prisi¨®n en Espa?a junto a 13 inculpados.

Las detenciones no pasaron desapercibidas en Europa, donde los expertos saben lo complejo que es detener a uno de estos personajes. Una de las caracter¨ªsticas de los "ladrones de la ley" es la dificultad de vincularlos con pruebas en acciones delictivas. "Se sienten seguros porque saben que no firman un papel, que su mano no est¨¢ en ning¨²n documento, incluso se abstienen de hablar por tel¨¦fono", dice uno de los investigadores. "Viven y act¨²an como grandes empresarios, dan las ¨®rdenes, manejan poderosos intereses, tienen influencia pol¨ªtica, deciden sobre la vida de las personas, pero no suele haber pruebas de ello".

Oniani no era el m¨¢ximo jefe de la organizaci¨®n, una red muy dif¨ªcil de desentra?ar porque no deja de ser una suma de organizaciones, pero s¨ª uno de los importantes. Oniani es muy conocido en Georgia, donde se le relaciona con diversos intereses empresariales, entre ellos un canal de televisi¨®n. "Oniani ha llegado a poner candidatos a la presidencia de Georgia", dice una fuente de la investigaci¨®n. Oniani dirig¨ªa sus actividades desde Barcelona hacia Madrid y otros pa¨ªses de la UE. Contaba con guardaespaldas y dirig¨ªa una compleja mara?a de asesores, testaferros y empresas. Incluso dispon¨ªa de soldados, dado que sus hombres hab¨ªan introducido en Espa?a a centenares de ciudadanos georgianos dispuestos a actuar a sus ¨®rdenes porque le deb¨ªan gratitud por haberles conseguido trabajo.

Oniani, que hab¨ªa residido en Francia, donde lleg¨® a estar cuatro a?os en la c¨¢rcel, durante mucho tiempo, era un personaje conocido en c¨ªrculos empresariales de Barcelona, sobre todo en los relacionados con la construcci¨®n de grandes obras e infraestructuras. "La realidad de los contactos en Espa?a a nivel pol¨ªtico -local, provincial e incluso nacional- y econ¨®mico dan la medida de hasta d¨®nde se puede llegar", dice una fuente de la investigaci¨®n. "Y han llegado muy lejos en Espa?a, despu¨¦s de un largo tr¨¢nsito por B¨¦lgica, Austria, Francia y Alemania". El secreto del sumario impide conocer qu¨¦ tipo de contactos y de influencias eran ya sensibles a Oniani.

No se tiene una idea exacta del patrimonio que hab¨ªan alcanzado los intereses en Espa?a de estas organizaciones, aparte de la socorrida lista de inmuebles y de negocios laterales como restaurantes y clubes de alterne. Se sabe de un proyecto ya muy avanzado para un gran complejo de esqu¨ª en Andorra, de otro complejo tur¨ªstico de envergadura en Portugal y de sus gestiones para introducir a una importante petrolera rusa en Espa?a, con idea de extender una red de gasolineras por el territorio nacional.

El golpe es fruto del trabajo de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n en una investigaci¨®n que arranca del a?o 2003. "Hemos puesto en marcha t¨¦cnicas de an¨¢lisis financiero criminal", reconoce uno de los investigadores, "y hemos comprobado la eficacia de coordinar a polic¨ªa y Guardia Civil y sentarlos con expertos de la Agencia Tributaria. ?sa es la ¨²nica forma de poder luchar contra esta gente".