El brasile?o estaba inmovilizado cuando la polic¨ªa de Londres le mat¨® en el metro

El electricista brasile?o al que la polic¨ªa brit¨¢nica mat¨® en el metro de Londres el 22 de julio de siete balazos en la cabeza, Jean Charles de Menezes, de 27 a?os, no llevaba ning¨²n abrigo donde esconder bombas ni corri¨® cuando le dieron el alto, tal y como la polic¨ªa hab¨ªa informado. Ni siquiera est¨¢ claro que le dieran el alto en alg¨²n momento. De Menezes vest¨ªa una chaqueta vaquera. Aquella ma?ana camin¨® tranquilamente hacia la estaci¨®n de Stockwell, accedi¨® con su billete, y tuvo tiempo de coger un peri¨®dico gratuito antes de dirigirse al and¨¦n.

La informaci¨®n que echa por tierra la versi¨®n de la polic¨ªa procede de unos documentos y fotograf¨ªas confidenciales de la Comisi¨®n Independiente de Investigaci¨®n de Quejas a la Polic¨ªa (CIIQ, en ingl¨¦s), a los que tuvo acceso el martes el canal de televisi¨®n ITV. De Menezes, seg¨²n estos documentos, s¨®lo corri¨® cuando vio llegar su metro. Entr¨® en el vag¨®n y se sent¨®. Entonces se produjo algo inaudito: cuando la polic¨ªa irrumpi¨® en el vag¨®n apunt¨¢ndole a la cabeza, De Menezes se levant¨® y uno de los agentes encargado de vigilarle lo agarr¨® del torso, despu¨¦s del brazo y lo inmoviliz¨®. El primer tiro se lo dispararon a 30 cent¨ªmetros de distancia. Los agentes de la unidad especial SO19 ten¨ªan licencia para matar. Y la usaron contra un hombre inmovilizado. De Menezes apenas tuvo tiempo de ver a sus asesinos.

En los documentos se especifica que, adem¨¢s de las siete balas en la cabeza, De Menezes recibi¨® una en el hombro y que se recogieron tres casquillos de tiros fallidos. En teor¨ªa, los disparos iban dirigidos a la cabeza para evitar que estallara el artefacto que pod¨ªa llevar De Menezes pegado al cuerpo. Los peri¨®dicos brit¨¢nicos preguntan ahora: si tanto riesgo hab¨ªa de que explotara la bomba, ?por qu¨¦ un agente lo agarr¨® del torso? Y una vez agarrado y tras quedar claro que no llevaba bomba, ?por qu¨¦ dispararon?

El inmigrante brasile?o hab¨ªa sido confundido con Hamdi Adus Isaac, alias Osman Hussain, el terrorista detenido en Italia en relaci¨®n con los atentados del 21 de julio. La polic¨ªa recibi¨® informaci¨®n de que uno de los terroristas se encontraba en un bloque de pisos de la calle de Scotia Road, al sur de Londres. ?se era el edificio del que sali¨® De Menezes a las 9.30. Un polic¨ªa estaba encargado de filmarlo con una c¨¢mara de v¨ªdeo para comprobar que la cara del sospechoso se correspond¨ªa con la del terrorista a quien buscaban. Pero al salir De Menezes, el polic¨ªa estaba orinando. Y declar¨® despu¨¦s: "Cuando pas¨® ante m¨ª mir¨¦ las fotograf¨ªas que ten¨ªa y transmit¨ª que merecer¨ªa la pena que alguien m¨¢s le echara un vistazo. Debo se?alar que cuando este hombre sal¨ªa del bloque yo me estaba 'aliviando'. En ese momento no me era posible transmitir mis observaciones y encender la c¨¢mara al mismo tiempo".

Fallos en cadena

El equipo encargado de vigilarlo no iba armado, con lo cual, no pudo impedir que De Menezes entrara en el autob¨²s. A las 9.50 el autob¨²s lleg¨® a las inmediaciones de la estaci¨®n de Stockwell y De Menezes camin¨® tranquilamente hacia ella. Los agentes especiales de la unidad S019 de Scotland Yard, que hab¨ªan tomado ya el mando de la operaci¨®n, deber¨ªan haber impedido la entrada del sospechoso en el metro. Pero no lo hicieron.

A partir de ah¨ª, todos sus pasos fueron grabados por algunas de las m¨¢s de cuatro millones de c¨¢maras de circuito cerrado que hay en la ciudad de Londres. A las 9.55 De Menezes se encontraba al pie de un ascensor. Su tren llegaba y ech¨® a correr hacia el vag¨®n. Mir¨® a la izquierda, despu¨¦s a la derecha y se sent¨® frente a un pasajero que presenci¨® c¨®mo lo mataron. "En unos segundos vi entrar a un hombre por las puertas situada a mi izquierda", declar¨® el testigo refiri¨¦ndose a un polic¨ªa. "Apuntaba con una pistola negra peque?a hacia la persona que estaba sentada frente a m¨ª. Apunt¨® hacia el lado derecho de la cabeza del hombre. La pistola se encontraba a 12 pulgadas (30,48 cent¨ªmetros) de la cabeza del hombre cuando dispararon el primer tiro".

Antes de que se oyera ning¨²n disparo, un polic¨ªa inmoviliz¨® a De Menezes. Y as¨ª lo relat¨® a la comisi¨®n que investiga el caso: "Escuch¨¦ gritos que inclu¨ªan la palabra polic¨ªa y entonces me volv¨ª hacia el hombre de la cazadora vaquera. Inmediatamente se levant¨® (del asiento) y avanz¨® hacia m¨ª y hacia los oficiales. Yo agarr¨¦ al hombre de la cazadora vaquera sujet¨¢ndolo con mis dos brazos por su torso, sujetando sus brazos en la espalda. Entonces lo empuj¨¦ de nuevo en el asiento donde hab¨ªa estado sentado. Entonces escuch¨¦ un disparo muy cerca de mi o¨ªdo izquierdo y fui empujado hacia el suelo".

La polic¨ªa a¨²n no ha dicho nada sobre los documentos filtrados. La familia del electricista brasile?a hab¨ªa declarado desde el primer d¨ªa despu¨¦s de su muerte que Jean Charles no llevaba ning¨²n abrigo. Y dudaba de que saltase el torno para entrar en el metro. Harriet Wistrich, abogada de la familia, indic¨® que el Gobierno deber¨ªa plantearse la pol¨ªtica de "licencia para matar" implantada tras los atentados terroristas. "S¨®lo llevaba una chaqueta vaquera. ?Era necesario dispararle en vez de tratar de enfrentarse a ¨¦l? No hab¨ªa se?al de que estuviera a punto de suicidarse", agreg¨®.