Michael Moore, contra las compa?¨ªas m¨¦dicas
Tras sonrojar a los pol¨ªticos y asimilar la victoria de George Bush, Michael Moore (Flint, Michigan, 1954) prosigue su cruzada personal contra el sistema estadounidense. Los agraciados en esta ocasi¨®n son las compa?¨ªas m¨¦dicas de prepago, tambi¨¦n conocidas como HMOs (Health Maintenance Organization). Las empresas han "aconsejado" a sus empleados que huyan de la c¨¢mara y las preguntas del oscarizado director de Bowling for Colombine, aunque ¨¦ste anda ahora en la preproducci¨®n de la cinta. "Est¨¢n hist¨¦ricos", dice con iron¨ªa. El documental se titular¨¢ Sicko, que a¨²na sick (enfermo) y psycho (psic¨®pata). Fahrenheit 9/11 cost¨® seis millones de d¨®lares y recaud¨® m¨¢s de cien en Estados Unidos, por lo que Moore no ha tenido en esta ocasi¨®n problemas de financiaci¨®n. Independientemente de la taquilla, Moore asegura que hubiera rodado Sicko. "Creo que los estadounidenses est¨¢n clamando por ver castigadas a las organizaciones del mantenimiento de la salud", argumenta. El argumento de Sicko nace de unas escenas que el cineasta mont¨® para The awful truth (La horrible verdad), su programa de televisi¨®n. En ¨¦l se mostraba un funeral de un paciente al que se hab¨ªa negado el transplante de un ¨®rgano. En cintas anteriores, se las dese¨® para conseguir declaraciones -vendedores o due?os de armas, militares, pol¨ªticos y directivos de grandes compa?¨ªas como General Motors o Nike eran su presa-, y Moore asegura que ahora son los propios ciudadanos quienes acuden a ¨¦l para contarle sus experiencias con las HMOs, que proporcionan a sus clientes atenci¨®n m¨¦dica a cambio de una cuota peri¨®dica.
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