Los liberales alemanes s¨®lo aceptan una coalici¨®n con Merkel
El FDP exige el Ministerio de Exteriores
El congreso del Partido Liberal (FDP) dej¨® claro ayer en Berl¨ªn que s¨®lo entrar¨¢n en un Gobierno con la democracia cristiana (CDU/CSU) y reclaman para el jefe de su grupo parlamentario, Wolfgang Gerhardt, de 61 a?os, la cartera de Exteriores. El presidente del FDP, Guido Westerwelle, de 43 a?os, asegur¨® que bajo ning¨²n concepto formar¨¢n un tripartito, la llamada coalici¨®n sem¨¢foro, rojo, verde y amarillo, con socialdem¨®cratas (SPD) y verdes.
Los ¨²ltimos sondeos pronostican al FDP entre un 6% y un 7%, que, sumado al 42% de la democracia cristiana (CDU/CSU), no bastar¨ªa para una mayor¨ªa parlamentaria. Para el FDP, que gobern¨® en la Rep¨²blica Federal de Alemania durante d¨¦cadas, gracias a su condici¨®n de partido bisagra, los siete a?os en la oposici¨®n han sido un suplicio. Hasta hace una semana, el FDP se las promet¨ªa felices. Los sondeos daban una mayor¨ªa negro-amarilla (CDU/CSU-FDP) que les permitir¨ªa volver al poder. Ahora, los vientos demosc¨®picos soplan de cara. La coalici¨®n de centro-derecha con los democristianos pende de un hilo.
Pero el FDP intent¨® ayer dejar claro que es un partido con principios y dio calabazas a la posibilidad aritm¨¦tica de formar la llamada coalici¨®n sem¨¢foro. Al mismo tiempo, qued¨® claro que los liberales exigen tres carteras en ese posible Gabinete de Angela Merkel. Una de ellas, la de Exteriores, que por tradici¨®n casi siempre se llev¨® el FDP en sus coaliciones sea con los democristianos (CDU/CSU) o con el SPD. El legendario dirigente liberal Hans-Dietrich Genscher fue ministro con el socialdem¨®crata Helmut Schmidt y con el democristiano Helmut Kohl.
Ahora, el FDP quiere el puesto para su jefe del grupo parlamentario, Gerhardt. "?l ser¨¢ el futuro ministro de Exteriores de la Rep¨²blica Federal de Alemania", grit¨® el presidente, Westerwelle. Y Gerhard asumi¨® el papel y se dirigi¨® al congreso con un discurso sobre pol¨ªtica exterior. Se refiri¨® Gerhardt a la necesidad de restaurar las relaciones transatl¨¢nticas con EE UU y asumi¨® las tesis democristianas de que Turqu¨ªa no entre en la UE y tenga que conformarse con la condici¨®n de socio privilegiado.
Las intervenciones en el congreso estuvieron plagadas de ataques al actual Gobierno. Westerwelle afirm¨®: "Queremos echar con los votos a los buitres carro?eros rojiverdes para un nuevo comienzo con una coalici¨®n negro-amarilla. Est¨¢ en juego el futuro de los alemanes". Gerhardt se refiri¨® al estado de la econom¨ªa y apel¨®: "Tenemos que bajar del coche cama y subir de nuevo a la locomotora".
En el programa electoral del FDP aparecen puntos que anticipan un conflicto con el eventual socio de coalici¨®n. Los liberales se oponen a la subida del IVA que preconiza la democracia cristiana. Adem¨¢s, el FDP quiere eliminar la Oficina Federal del Empleo y reducir la influencia de los sindicatos en las empresas. Para aumentar sus votos, el FDP se lanzar¨¢ esta semana a una campa?a para conseguir el segundo voto. En Alemania, cada elector dispone de dos votos: el primero, para la elecci¨®n directa del diputado, y el segundo, para la lista de un partido.
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