Rajoy exige recuperar las ense?anzas comunes para pactar la Ley de Educaci¨®n

Mariano Rajoy, l¨ªder del PP, remitir¨¢ hoy al presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, un documento con los requisitos que considera imprescindibles para pactar la reforma educativa con el Ejecutivo y evitar la enmienda a la totalidad a la nueva ley. Con esta propuesta, Rajoy se adelanta a la reuni¨®n que la vicepresidenta, Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez de la Vega, anunci¨® que convocar¨ªa esta semana para discutir la reforma educativa con el PP. La primera reclamaci¨®n de Rajoy es que la nueva Ley de Educaci¨®n recupere el m¨ªnimo de ense?anzas comunes para todas las autonom¨ªas que ten¨ªa la norma anterior. Ahora, seg¨²n Rajoy, "esas ense?anzas comunes ser¨¢n igual a cero".

La Junta Directiva Nacional del PP analizar¨¢ esta ma?ana el documento que Rajoy remitir¨¢ a Zapatero para negociar la reforma educativa y que tiene como primer caballo de batalla el mantenimiento de un m¨ªnimo com¨²n para educaci¨®n b¨¢sica en todas las autonom¨ªas para "no poner en peligro la vertebraci¨®n de Espa?a". El PP opina que la nueva norma enviada al Parlamento "no garantiza un m¨ªnimo de ense?anzas comunes", por lo que "el riesgo de 17 modelos educativos diferentes es real", debido a la redacci¨®n del art¨ªculo 6 de la nueva LOE, que deber¨¢ debatirse este oto?o en el Congreso de los Diputados. El PP presenta el documento para negociar antes de presentar una enmienda a la totalidad

Ese art¨ªculo dice textualmente: "Los aspectos b¨¢sicos del curr¨ªculo no requerir¨¢n m¨¢s del 55% de los horarios escolares para las comunidades aut¨®nomas que tengan lengua cooficial, ni del 65% para aquellas que no la tengan". Seg¨²n Rajoy, como la ley fija un m¨¢ximo pero no un m¨ªnimo, ese m¨ªnimo tender¨¢, en la pr¨¢ctica, a cero.

M¨ªnimos y m¨¢ximos

El PP defiende volver a la redacci¨®n sobre ense?anzas comunes que ten¨ªa el art¨ªculo 8 de la Ley de Calidad de la Ense?anza (LOCE) que va a cambiar el Gobierno. All¨ª se dec¨ªa que "a los contenidos de las ense?anzas comunes les corresponde en todo caso el 55% de los horarios escolares en las comunidades aut¨®nomas que tengan, junto con la castellana, otra lengua cooficial, y el 65% en aquellas que no la tengan". Es decir, la LOCE fijaba esos porcentajes como un m¨ªnimo.

El argumento del PP es que esos contenidos comunes m¨ªnimos son imprescindibles para evitar, por ejemplo, que los ni?os estudien el monte m¨¢s alto de su comunidad pero ignoren d¨®nde caen el Mulhac¨¦n o el Teide. Las ense?anzas comunes afectan principalmente a Geograf¨ªa, Historia y Literatura.

El segundo caballo de batalla del PP para negociar la reforma educativa pasa por dar m¨¢s relevancia a que "el estudio es el primer deber de los alumnos". Seg¨²n el PP, la nueva ley ha eliminado la menci¨®n de esta obligaci¨®n de los alumnos, que en la LOCE quedaban despu¨¦s detallados en cuatro apartados: la obligaci¨®n de participar en las actividades formativas, de seguir las directrices del profesorado, de asistir a clase con puntualidad y de participar y colaborar en la mejora de la convivencia escolar.

Rajoy subraya que la falta de disciplina y de respeto al profesorado es un problema creciente en las aulas, y que la nueva ley lo agravar¨¢. Apoya su acusaci¨®n en un p¨¢rrafo del art¨ªculo 8 de la nueva ley que, seg¨²n el PP, da a los ni?os derecho a no ir a clase si as¨ª lo deciden en alguna suerte de asamblea infantil.

En concreto, el p¨¢rrafo que el PP quiere que se elimine de la LOE dice: "Las decisiones colectivas que adopten los alumnos con respecto a la asistencia a clase no tendr¨¢n consideraci¨®n de faltas de conducta ni ser¨¢n objeto de sanci¨®n cuando ¨¦stas hayan sido resultado del ejercicio del derecho de reuni¨®n y sean comunicadas previamente a la direcci¨®n del centro".

Esta regulaci¨®n de la huelga escolar es, para el PP, "demoledora para la calidad de la ense?anza y va a propiciar el deterioro de la vida en las aulas". En lugar del "derecho a inasistencia a clase", el PP reclama que se refuerce la autoridad del profesorado y las sanciones a los alumnos d¨ªscolos, tal como se est¨¢ haciendo en otros pa¨ªses europeos.

Los populares destacan la baja calificaci¨®n que la educaci¨®n en Espa?a tiene en las clasificaciones internacionales y la necesidad de superar ese lastre. Para el PP, la soluci¨®n al problema, as¨ª como al fracaso escolar, no puede pasar por un "falso concepto de equidad" que iguale por abajo sin defender la calidad de la ense?anza. A cambio, defiende que "se prime el esfuerzo individual y el af¨¢n de superaci¨®n como principios educativos b¨¢sicos".

El tercer elemento de debate es la libertad de elecci¨®n de centro y el respeto a los conciertos educativos. De forma paralela, el PP reclama que se recupere el car¨¢cter evaluable de la asignatura de Religi¨®n.