"La ayuda humanitaria no puede ser s¨®lo dinero"
Rafael Vila-Sanju¨¢n (Barcelona, 1961), que fue secretario general de M¨¦dicos Sin Fronteras (MSF) y hoy dirige la secci¨®n espa?ola, cree que se est¨¢ en un "momento cr¨ªtico" tanto para la ayuda humanitaria como para la propia ONU. Naciones Unidas celebr¨® al semana pasada en Nueva York una cumbre fundamental para su propia reforma y para evaluar el grado de cumplimiento de los Objetivos del Milenio (ODM), una propuesta a la que se comprometieron los mandatarios mundiales en 2000 para que en 2015 se hayan reducido significativamente el hambre, la pobreza, las enfermedades infecciosas y la desigualdad entre sexos.
Pregunta. ?Se conseguir¨¢n los Objetivos?
Respuesta. El problema no es marcarse los ODM, sino que nadie ha hecho nada para definir planes concretos a corto plazo que los hagan posibles.
P. Pero por primera vez parece que no falta dinero. Hasta EE UU parece que no se opone a hablar de lograr un 0,7% de ayuda. Y varios pa¨ªses, entre ellos Espa?a, se unen para financiar vacunaciones masivas.
R. Financiaci¨®n, en efecto, no falta, aunque siempre sea preciso m¨¢s dinero. Pero, como se emplea mal, sin planes eficaces, se genera una falta de confianza general. Ante la cumbre de la ONU, se debate el reparto del poder en la organizaci¨®n, pero no qu¨¦ pasos concretos y con plazos claros debe dar la ONU contra, por ejemplo, las crisis alimentarias, el sida y las enfermedades olvidadas, o la indefensi¨®n de la poblaci¨®n ante los conflictos.
P. Espa?a ha hablado de Alianza de Civilizaciones, y doblar¨¢ su ayuda al fin de esta legislatura. ?Va por buen camino?
R. El Gobierno tiene voluntad, y hace hincapi¨¦ en el multilateralismo, que desde luego sobre el papel es progresista. Y ha prometido crear una Oficina de Ayuda Humanitaria. Pero creo que a¨²n le falta conocimiento de los problemas que afronta esa ayuda. La Alianza de Civilizaciones puede ser un buen punto de partida para enfocar planes reales a corto plazo. Tambi¨¦n es positiva la voluntad de trabajar en ?frica, que es el continente que peor lo tiene. Pero, en Espa?a y en otros pa¨ªses donantes, la clave est¨¢ en que la ayuda forme parte de la agenda parlamentaria, que sea aut¨¦nticamente una l¨ªnea m¨¢s de la pol¨ªtica. Es necesario no quedarse s¨®lo en lo financiero. Y desde luego que la ayuda humanitaria no puede ser s¨®lo una presencia publicitaria, poner "dinero y que se nos vea". Debe ser acciones concretas que sirvan para debatir ese modelo occidental, que es el que provoca emergencias en el mundo.
P. ?Se refiere a Irak, Afganist¨¢n, Hait¨ª: confusi¨®n de guerras y ayuda humanitaria?
R. Por supuesto, pero no s¨®lo. Espa?a debe contribuir a un nuevo debate: ?qu¨¦ ONU queremos? ?La ONU que apoya el embargo en Irak? ?O la que defend¨ªa S¨¦rgio Vieira de Melo, la que busca proteger a las v¨ªctimas? En Irak, Afganist¨¢n o Hait¨ª la gente, de momento, ve a la ONU como parte del problema, como algo hostil. Pero no s¨®lo se trata de guerras. N¨ªger es un ejemplo: el hambre se ve¨ªa llegar. Hubo plaga de langosta, hubo sequ¨ªa, y hubo incapacidad de distribuir alimentos gratuitos a la poblaci¨®n. ?Por qu¨¦? Porque la comunidad internacional est¨¢ empe?ada en que pa¨ªses as¨ª pongan ante todo en pie un mercado alimentario. Cuando hay una crisis, eso es teor¨ªa. Lo que necesitan en una crisis es comer. Y no hay planes concretos para esas emergencias anunciadas. Ni los hay para el sida como emergencia. Hay financiaci¨®n, pero no es eso.
P. En suma, en ayuda humanitaria, ?usted pide m¨¢s papel del Estado o de las ONG?
R. Las ONG podemos ayudar, pero s¨®lo somos piezas. La aut¨¦ntica responsabilidad es p¨²blica.
P. Expl¨ªquemelo en relaci¨®n con el hurac¨¢n Katrina.
R. Por mucho que las ONG hagan, ser¨¢ infinitesimal en comparaci¨®n con la capacidad del Estado. La respuesta verdadera, la respuesta eficaz, o es p¨²blica o no es. La falta de reacci¨®n del Gobierno estadounidense ante el Katrina nos llen¨® de estupor. Pero, una vez que empieza a moverse, la capacidad de respuesta de ese sistema de poderes no s¨®lo tiene que ser eficaz, sino descomunal.
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