Segundas ocasiones
?Se merecen algunas personas una segunda oportunidad, sobre todo si tienen sobre su conciencia la mancha de alg¨²n desliz, de alg¨²n da?o ocasionado, aunque no sean conscientes de haberlo provocado? ?Qui¨¦n es capaz de juzgar a qui¨¦n? Estas premisas, un tanto abstractas pero en el fondo perfectamente efectivas, son las que articula Eduard Cort¨¦s en este su segundo largometraje tras la sorpresa que causara con La vida de nadie. De nuevo regresa a terrenos moralmente resbaladizos, a ambientes asfixiantes; y tambi¨¦n a una estructura narrativa que privilegia siempre el punto de vista del espectador, que sabe siempre m¨¢s que cada uno de los personajes, con el agregado de un malestar considerable... y perfectamente buscado y, lo que es mejor, logrado.
OTROS D?AS VENDR?N
Direcci¨®n: Eduard Cort¨¦s. Int¨¦rpretes: Cecilia Roth, Antonio Resines, Nacho Aldeguer, Fernando Guill¨¦n, ?lex Angulo, Nadia de Santiago. G¨¦nero: drama. Espa?a, 2005. Duraci¨®n: 104 minutos.
Historia de una mujer (Roth, espl¨¦ndida) a la que las nuevas tecnolog¨ªas de la comunicaci¨®n juegan una mala pasada, y de un hombre que sufre una p¨¦rdida doble, inmensa (Resines, en ese registro de perdedor consciente que constituye lo mejor de su personaje cinematogr¨¢fico), Otros d¨ªas vendr¨¢n juega hasta el l¨ªmite con algo que el p¨²blico sabe y cuyas consecuencias mantienen su atenci¨®n. Es tan poderoso ese recurso que se demuestra capaz de pasar por encima de debilidades de un gui¨®n que hubiera necesitado una vuelta m¨¢s (hay personajes que act¨²an en el l¨ªmite de lo cre¨ªble y otros necesitar¨ªan de una redefinici¨®n urgente, como por ejemplo el de Guill¨¦n).
Pero por encima de todo, importa destacar un par de confirmaciones. Una, que el talento como narrador y, sobre todo, como creador de atm¨®sferas turbias que mostrara Cort¨¦s en su deb¨² no era ninguna casualidad, sino talento, y del bueno. Y dos, que la pel¨ªcula demuestra un respeto, una admiraci¨®n por sus personajes que la ponen a buen resguardo de cr¨ªticas de mayor calado. Mejorable, s¨ª, pero, no obstante, tierna cuando toca, ir¨®nica sin hacer sangre, conmovedora a ratos y con un final que sencillamente no puede ser piadosamente m¨¢s perfecto.
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