Juan Mars¨¦ dimite del jurado del Premio Planeta

?sta es la cr¨®nica de una dimisi¨®n anunciada. Juan Mars¨¦ explica en un comunicado emitido ayer que ya en 2004, despu¨¦s de la concesi¨®n del 53? Premio Planeta, plante¨® una serie de cambios en el sistema de elecci¨®n y evaluaci¨®n de las novelas finalistas. No ha sido atendida y ha dimitido. Dos d¨ªas despu¨¦s del fallo de la 54? edici¨®n ha presentado su dimisi¨®n. "Mi derecho a buscar y decir la verdad, mi verdad, est¨¢ por encima del relumbr¨®n y el festejo del mejor premio del mundo", declar¨® ayer.

"S¨¦, adem¨¢s, que mintiendo no le hago ning¨²n bien ni a los premiados ni a mis compa?eros del jurado. Y tampoco me parece ¨¦tico, en las ruedas de prensa o de cara al p¨²blico, cuando se me pregunta, dar la callada por respuesta. De todo eso le habl¨¦ al editor Jos¨¦ Manuel Lara Bosch en las dos reuniones previas al fallo de este a?o, pero no han sido atendidas".

Fue precisamente una pregunta en la conferencia de prensa del pasado viernes, el d¨ªa antes de la concesi¨®n del premio, la que desat¨® la pol¨¦mica. Un periodista requiri¨® su opini¨®n sobre el nivel de calidad de las novelas presentadas. Mars¨¦ respondi¨® contundente: "Mi opini¨®n personal es que el nivel es bajo y en algunos tramos subterr¨¢neo. Alguna novela promete, apunta alto en sus planteamientos, pero se acaba frustrando. El premio no puede quedar desierto, as¨ª que nos vemos obligados a votar la menos mala".

Gan¨® el Planeta la escritora mallorquina Maria de la Pau Janer, con Pasiones romanas, y qued¨® finalista el peruano Jaime Bayly, con Y de repente un ¨¢ngel.

"Ocurre, simplemente, que estoy un poco harto de novelas insustanciales con premio o sin premio que ocupan tanto espacio medi¨¢tico en perjuicio de otras con empe?os m¨¢s honestos y ambiciosos, pero que apenas les dejan espacio para respirar", declar¨® ayer Mars¨¦. "S¨¦ que esto tiene dif¨ªcil arreglo, que as¨ª est¨¢ el mercado, que el cotarro cultural y medi¨¢tico es el que tenemos y que responde a intereses y bolsillos que tienen muy poco que ver con la literatura seg¨²n yo la entiendo, pero en cualquier caso yo me niego a dar gato por liebre, ya sea como miembro del jurado en un concurso literario o como simple ciudadano al que le piden una opini¨®n sobre un libro".

"Poco despu¨¦s de la concesi¨®n del Premio Planeta 2004 y de mi primera experiencia en el mismo como miembro del jurado, solicit¨¦ una reuni¨®n con el editor Jos¨¦ Manuel Lara Bosch, promotor del premio, y con Manuel Lombardero, secretario del jurado. En esa reuni¨®n expuse algunas sugerencias sobre posibles cambios en el proceso de selecci¨®n y evaluaci¨®n de las obras destinadas a pasar a la final, adem¨¢s de otras cuestiones relativas al jurado y a sus atribuciones ante los medios de comunicaci¨®n, que no considero necesario detallar aqu¨ª", afirma Mars¨¦ en el comunicado. "Dej¨¦ claro al editor de Planeta que si tales sugerencias no eran atendidas con vistas al siguiente concurso, presentar¨ªa mi dimisi¨®n como miembro del jurado".

"Considero que tales sugerencias han sido atendidas s¨®lo parcialmente y no me satisfacen, por lo que renuncio desde hoy [por ayer] a mi puesto, a mis competencias como jurado del Premio Planeta, y as¨ª lo he comunicado al editor Jos¨¦ Manuel Lara y al secretario del jurado, Manuel Lombardero", concluye.

"Aunque s¨®lo fuera por respeto a los dem¨¢s autores que se han presentado al concurso y no han llegado a la final, yo no pod¨ªa celebrar las novelas ganadoras, que considero fallidas. Los autores, que esta vez no han llegado, tambi¨¦n merecen la verdad. Lamento ser el malo de la peli, y reitero mi respeto a los compa?eros del jurado, a su secretario y a su portavoz, pero creo que lo mejor es que me retire", declar¨® a este diario.

"En cuanto a la novela ganadora y a la finalista, no dudo de las buenas intenciones de la autora y el autor respectivos y les deseo lo mejor en pr¨®ximas aventuras, pero las buenas intenciones no tienen nada que ver con la buena literatura".

"Me gustar¨ªa a?adir lo que ya dije una vez en relaci¨®n con la literatura de ficci¨®n, tal como hoy se nos vende, en tanto premios: que es una literatura que se asemeja cada vez m¨¢s al mundo del pr¨ºt-¨¢-porter, y que el verdadero reto para un escritor actual no es entrar en ese mundo, sino ser capaz de rechazarlo".