"Ahora deber¨ªa evitarse que acudan coches de varias polic¨ªas a una misma actuaci¨®n"
Joan Miquel Capell (Barcelona, 1960) fue taxista y camarero antes que mosso d'esquadra. En 1983 ingres¨® en el cuerpo en la primera promoci¨®n. "La culpa la tuvo mi madre, que me despert¨® para que pudiera acudir al ¨²ltimo examen", asegura. Desde entonces ha pasado por todos los grupos y brigadas, excepto la m¨®vil, que es as¨ª como denomina la polic¨ªa auton¨®mica a los polic¨ªas antidisturbios. Estuvo cuatro a?os en Girona como responsable del cuerpo, luego se doctor¨® en derecho con una tesis sobre la polic¨ªa judicial y desde hoy es el m¨¢ximo responsable de los Mossos d'Esquadra en la ciudad de Barcelona. Intendente jefe de la Regi¨®n Policial Metropolitana Barcelona, seg¨²n la denominaci¨®n oficial.
"El relevo se notar¨¢ en que los 'mossos' se implicar¨¢n en el tejido social y escuchar¨¢n"
Pregunta. El presidente de la Generalitat dijo hace unos d¨ªas que cuanta m¨¢s legitimitad tiene un cuerpo, m¨¢s eficaz es. ?Tienen legitimidad los Mossos d'Esquadra?
Respuesta. Si hasta ahora hubi¨¦ramos hecho mal las cosas no tendr¨ªamos la legitimitad que tenemos. Nuestros precedentes son buenos. ?Alguien duda de que la multa de tr¨¢fico de un mosso d'esquadra se puede tirar a la basura y no ocurre nada?
P. ?Bastan esos precedentes para asegurar que prestar¨¢n un buen servicio en la ciudad de Barcelona?
R. La seguridad ciudadana en Barcelona es muy parecida a la de Girona o la de L'Hospitalet, ciudades en las que ya estamos desplegados. Los barceloneses no nos van a exigir nada que nos hayan reclamado ya otros ciudadanos, que no es otra cosa que estemos a su disposici¨®n y que les resolvamos los conflictos en los que pueden encontrarse. El hecho diferencial de Barcelona es que es la capital de Catalu?a y en ocasiones acoge actos que pueden congregar centenares de miles de personas.
P. Y entre los delincuentes, ?tiene credibilidad el cuerpo?
R. Las c¨¢rceles catalanas est¨¢n repletas de delincuentes detenidos en acciones de los Mossos d'Esquadra. Creo que no se puede dudar de nuestra credibilidad y lo hemos demostrado en todo tipo de actuaciones contra la droga, la prostituci¨®n, el crimen organizado, delitos contra el medio ambiente, etc¨¦tera.
P. ?En qu¨¦ se notar¨¢, aparte del uniforme, los coches y el idioma, que hay una nueva polic¨ªa en Barcelona?
R. Nosotros estructuramos el servicio en tres redes: proximidad, reacci¨®n y apoyo. Creo que en la primera es en la que se notar¨¢ m¨¢s la diferencia, porque los polic¨ªas entrar¨¢n en las tiendas, hablar¨¢n con el dependiente y se implicar¨¢n m¨¢s en el tejido social de la ciudad. Hemos dividido Barcelona en 37 sectores policiales y algunas de las unidades que hemos creado de multirreincidencia o criminalidad ya las ten¨ªan otros cuerpos.
P. ?Se evitar¨¢ la descoordinaci¨®n policial y la duplicidad de cuerpos que se produc¨ªa en algunas ocasiones?
R. A partir de ahora no deber¨ªa haber duplicidad de efectivos policiales y deber¨ªamos evitar que acudan coches de tres cuerpos distintos a una misma actuaci¨®n. Por eso se ha creado una sala conjunta de mando con la Guardia Urbana de Barcelona, que ser¨¢ la que decida el n¨²mero de coches que acuden. Hasta ahora se decid¨ªa por el tel¨¦fono que marcaba el ciudadano o por el n¨²mero de llamadas que se hac¨ªan.
P. ?Es cierto que el a?o de predespliegue conjunto que ha habido en Barcelona con el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa no ha sido del todo satisfactorio?
R. Es injusto que se haga esta afirmaci¨®n. Nosotros hemos trabajado y trabajaremos con lealtad. Hemos compartido el caf¨¦ y el cigarro a la hora de comer con nuestros compa?eros de otros cuerpos, hemos realizado 46.000 actuaciones conjuntas en este tiempo y hemos logrado una base de datos de 14.000 personas.
P. ?Tambi¨¦n se ha producido esta colaboraci¨®n entre los mandos?
R. Tampoco en ese aspecto ha habido problemas. Si acaso, diferencias de criterio en alguna ocasi¨®n.
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