Muerte en las favelas de R¨ªo

A lo largo de 40 interminables minutos en la madrugada del s¨¢bado d¨ªa 28, un tiroteo feroz entre traficantes y polic¨ªas sacudi¨® a la Rocinha, la mayor favela brasile?a y una de las m¨¢s grandes de Am¨¦rica Latina. De los centenares de disparos, cuatro dieron en el blanco: Erismar Rodrigues Moreira, Bem-te-vi, jefe del tr¨¢fico de drogas, que en la Rocinha llega a mover unos 14 millones de euros al mes.

El enfrentamiento con Bem-te-vi fue r¨¢pido. En menos de cinco minutos ¨¦l ya estaba en el suelo, alcanzado por cuatro tiros. Atrincherados en portales y sobre el techo de las construcciones, sus escoltas parec¨ªan decididos a no permitir que se llevaran el cuerpo de su jefe. No sab¨ªan que todav¨ªa respiraba. Cuando la polic¨ªa logr¨® sacarlo de all¨ª, Bem-te-vi segu¨ªa vivo. Muri¨® al llegar al hospital. Ten¨ªa 29 a?os, 16 de ellos dedicados al tr¨¢fico de drogas en R¨ªo de Janeiro.

Tras la muerte de Bem-te-vi asumi¨® el mando su cu?ado el Soul, asesinado 48 horas despu¨¦s

Empez¨® como avi¨®n, como son llamados los ni?os encargados de llevar marihuana y coca¨ªna a los consumidores; pas¨® a sargento, que son los adolescentes autorizados a llevar un arma; lleg¨® a gerente, y desde abril de 2004 asumi¨® el mando del narcotr¨¢fico en la Rocinha. Le gustaba lucir esclavas y cadenas de oro. Realizaba grandes fiestas, con la presencia de cantantes populares, y organizaba partidos de f¨²tbol a los que comparec¨ªan jugadores de la talla de Romario o del portero Julio C¨¦sar. No se sabe con certeza cu¨¢ntas mujeres ten¨ªa al morir. Al menos tres. Y cuatro hijas.

La muerte de Bem-te-vi ha sido el resultado de una de las operaciones mejor estructuradas llevadas a cabo por la polic¨ªa de R¨ªo, la Operaci¨®n Troya. Un grupo de 10 agentes lo sigui¨® en la favela durante meses. Sus llamadas telef¨®nicas fueron grabadas, cada paso fue estudiado. Era un hombre inteligente y cauto. Jam¨¢s andaba sin su escolta personal, y uno de ellos, Par¨¢, de 24 a?os, muri¨® intentando proteger con el propio cuerpo a su jefe. Durante a?o y medio ha sido el se?or de la ley y del orden sobre los casi 80.000 habitantes de la Rocinha. Logr¨® pacificar la favela, es decir, impedir que bandos rivales la invadiesen para asumir el negocio. La parte baja era controlada personalmente por ¨¦l. La parte alta, por su cu?ado Orlando Rodrigues, Soul, de 24 a?os.

Para atraparlo los agentes de la polic¨ªa alquilaron un peque?o apartamento frente al bar que era el principal punto de ventas de Bem-te-vi. En los d¨ªas anteriores a la operaci¨®n llevaron al apartamento agua, medicamentos para emergencia, bocadillos y 4.000 cartuchos. El viernes, m¨¢s de 200 agentes tomaron posiciones en las calles de la parte baja del cerro. Al atardecer se retiraron todos menos los 10 que lograron abrigarse en el apartamento alquilado. Estaba armada la trampa. Bem-te-vi se puso a tiro tres veces. En las dos primeras estaba acompa?ado. A las 2.30 no hab¨ªa nadie m¨¢s que ¨¦l y sus guardaespaldas. Y empez¨® la balacera.

En la tarde del s¨¢bado, d¨ªa del entierro de Bem-te-vi, ning¨²n comercio abri¨® las puertas en la Rocinha. Es la ley del narcotr¨¢fico: duelo absoluto cuando matan a alg¨²n miembro del bando. En aquel mismo instante Soul asum¨ªa el comando de la Rocinha. Es otra de las leyes del narcotr¨¢fico: la favela no puede quedarse sin jefe. Soul, m¨¢s discreto que Bem-te-vi, era el encargado de la contabilidad del bando. Decid¨ªa, por ejemplo, sobre los sobornos a la polic¨ªa. Ten¨ªa buena planta, lleg¨® a estudiar contabilidad y frecuentaba discotecas elegantes.

Dur¨® menos de 48 horas en el puesto: en la madrugada de ayer fue rodeado y asesinado junto a otros cuatro miembros de su banda. Uno de ellos fue ahorcado y su cad¨¢ver fue descuartizado. Era peque?o, el hombre que alquil¨® el apartamento a la polic¨ªa.

El nuevo jefe ahora es Antonio Bonfim, Nem. Era fiel a Bem-te-vi, de quien recibi¨® una orden clara: si le pasase algo, ¨¦l deber¨ªa matar a Soul y asumir el control. Porque Soul pertenec¨ªa al Comando Rojo, una facci¨®n criminal especialmente violenta, enemigos feroces del bando de Bem-te-vi, el Amigo de los amigos. Ayer, una vez m¨¢s, la paz retorn¨® a la Rocinha. Todo permanecer¨¢ as¨ª hasta que un nuevo jefe asuma el puesto de Nem.