La Unesco declara la Patum, de Berga, patrimonio inmaterial de la humanidad

Un jurado internacional nombrado por la Unesco y presidido por la princesa Basma Bint Talal de Jordania acord¨® ayer en Par¨ªs conceder la categor¨ªa de patrimonio inmaterial de la humanidad la fiesta popular de la Patum, que cada a?o se celebra en la localidad catalana de Berga entre el d¨ªa del Corpus y el domingo siguiente. Otras 42 fiestas, procesiones o tradiciones se hicieron acreedoras de esa denominaci¨®n, entre ellas el teatro japon¨¦s kabuki, los relatos populares palestinos llamados hikaye y las representaciones con m¨¢scaras de los makishi en Zambia. Una gran mayor¨ªa -las dos terceras partes- del patrimonio que la Unesco quiere proteger con ese gesto sobrevive en pa¨ªses pobres, la mayor parte de ellos africanos.

Ni la tradici¨®n oral galaico-portuguesa ni el flamenco y la m¨²sica andalus¨ª, dos candidaturas multilaterales en las que participaba Espa?a, fueron seleccionadas por el jurado.

La Patum es una celebraci¨®n que ha conocido diversas formas de representaci¨®n, la ¨²ltima de las cuales es de 1888, mientras que la primera conocida corresponde a la segunda mitad del siglo XIV. Algunos de los episodios representados retoman la lucha entre moros y cristianos, entre ¨¢ngeles y demonios, y hacen bailar a un personaje fundamental, el ¨¢guila, antes de que la Patum propiamente dicha rinda culto al fuego en medio de un diluvio de petardos. La m¨²sica que acompa?a el espect¨¢culo, muy primitiva y dominada por la percusi¨®n, es de gran inter¨¦s hist¨®rico.