El regreso de Sabina

La cita es en el Palacio de Congresos y la partida parece ganada de antemano: en solo unas horas se vendieron todas las entradas para asistir a estos conciertos. Igual ha ocurrido en Barcelona, Gij¨®n o Madrid. De Alivio de luto, adem¨¢s, lleva despachadas m¨¢s de doscientas mil copias desde su publicaci¨®n a mediados de septiembre. Cifra nada desde?able que, en estos d¨ªas de pirater¨ªa y crisis discogr¨¢fica, le ha reportado al cantautor un doble disco de platino.

La espera -tres a?os hace desde que edit¨® D¨ªmelo en la calle y algo m¨¢s desde que decidi¨® apearse de los escenarios- ha merecido la pena: Alivio de luto presenta a un Sabina en estado de gracia, reflexivo e inspirado, con la pluma bien afilada, y apoyado en el talento de unos m¨²sicos que son ya casi de la familia: Olga Rom¨¢n, Pancho Varona o Antonio Garc¨ªa de Diego. Artistas que valen tanto para un roto como para un descosido -los dos ¨²ltimos firman con Tino di Geraldo la producci¨®n del ¨¢lbum, as¨ª como las m¨²sicas de la mayor¨ªa de los temas- y que, por supuesto, tambi¨¦n le acompa?an sobre las tablas durante esta breve, pero intensa, gira Ultramarina. Ni que decir tiene que, para estos conciertos, el cantautor ha echado mano de las piezas m¨¢s representativas de su cancionero, junto a otras m¨¢s recientes que, como es el caso de P¨¢jaros de Portugal o N¨²meros rojos, est¨¢n llamadas a convertirse en cl¨¢sicos de su repertorio. Un regreso de puro ¨®rdago.