Copas con sentido com¨²n

Un par de amigos entra en un bar. Piden dos cervezas, de las grandes. El camarero advierte que tienen ganas de beber e intenta atajar la situaci¨®n. Demora el servicio: "Lo siento, tengo las jarras en el lavavajillas, as¨ª que os pongo unos tercios", dice. Los clientes se quejan e insisten. El barman, con tacto y seguridad, les dice que no puede servir m¨¢s de una consumici¨®n a quienes molestan a otros clientes, que son las normas de la casa. Los amigos se marchan. ?sta es una de las muchas situaciones que los camareros aprenden a resolver gracias al programa de dispensaci¨®n responsable de bebidas alcoh¨®licas (DRA), una iniciativa de la Agencia de la Salud P¨²blica de Barcelona, que a partir del pr¨®ximo a?o se ampliar¨¢ a toda Espa?a con una oferta de cursos de formaci¨®n para formadores. Estos talleres se basan en la simulaci¨®n y a trav¨¦s de debates.

Unos 100 camareros de Barcelona han recibido estas ense?anzas, promovidas por la Agencia de Salud P¨²blica municipal

"Los cursos est¨¢n inspirados en un proyecto que se realiz¨® en Irlanda y que despu¨¦s han sido adaptados a la realidad sociocultural espa?ola", cuenta Alicia Rodr¨ªguez-Martos, que ha dise?ado estos talleres. La formaci¨®n que reciben los camareros tiene como objetivo impedir el acceso a las bebidas alcoh¨®licas a los menores de edad, decir que no a los clientes que ya est¨¢n pasaditos de copas, y evitar que ¨¦stos cojan el coche al salir del local. Los cursos se imparten en la Escuela de Hosteler¨ªa y Turismo CETT, adscrita a la Universidad de Barcelona.

Desde que en 2002 empez¨® la colaboraci¨®n entre la Agencia y la escuela, m¨¢s de 250 alumnos han seguido estos cursos. El programa, que cuenta con la colaboraci¨®n de la Asociaci¨®n de Promoci¨®n y Desarrollo Social (PDS) y la financiaci¨®n del Plan Nacional de Drogas, destaca el papel de los empresarios del sector de la restauraci¨®n "para minimizar las consecuencias negativas del consumo del alcohol, y convertir su negocio en un lugar m¨¢s agradable". Por eso, los talleres tambi¨¦n se ofrecen a los locales de copas de Barcelona, sin calendario fijo, sino bajo demanda.

Quique es uno de los 100 camareros que han recibido estas ense?anzas. Este joven de 26 a?os trabaja en La Oveja Negra, uno de los locales de la zona de ocio del barrio barcelon¨¦s de Pueblo Nuevo. Quique reconoce que "a la hora de enfrentarse a situaciones conflictivas lo mejor es utilizar el sentido com¨²n". El taller le da herramientas: "No humillar al cliente, no tocarle, hacer que uno est¨¢ muy ocupado, sugerir que vaya en taxi si va a conducir, pedir siempre el DNI si se tienen dudas sobre la edad", a?ade. Dice que no se ha encontrado nunca con situaciones extremas, pero s¨ª recuerda que en una ocasi¨®n "convenc¨ª a un grupo de j¨®venes, que a¨²n no hab¨ªan empezado a beber, de ir a una discoteca cercana, en lugar de ir a otra situada a 30 kil¨®metros de Barcelona y a la que obviamente iban a trasladarse en coche".