Patrick Doyle y Stephen Warbeck desvelan sus secretos para encajar m¨²sica e im¨¢genes en las pel¨ªculas

A los compositores no les suele gustar explicar c¨®mo crean la m¨²sica de las pel¨ªculas, pero los brit¨¢nicos Patrick Doyle, autor de la de Harry Potter y el c¨¢liz de fuego, y Stephen Warbeck, ganador de un oscar por Shakespeare in love, no dudaron en clausurar ayer con una clase magistral el quinto taller de sonido y m¨²sica para cine que organiza la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) en Madrid.

"En las pel¨ªculas suele haber algo que falla; lo primero que hago es fijarme en el corte de las secuencias y busco las debilidades o virtudes de la interpretaci¨®n, para construir una imagen con la que trabajo", explic¨® Doyle, t¨¢ndem con Kenneth Branagh en casi todos sus largos (Mucho ruido y pocas nueces o Hamlet). "En su ¨²ltimo filme, Como gust¨¦is, Kenneth ha contado con un reparto tan maravilloso que me sent¨ª como un intruso ante las palabras de Shakespeare".

Doyle tard¨® 14 meses en prepararse para la "gran tormenta" del rodaje de la cuarta parte de Harry Potter, sabedor de lo que se jugaban. "Mike [Newell, el director] dice que me eligi¨® por mi condici¨®n de actor, por haber compuesto con elementos m¨¢gicos antes y por ser divertido, esencial cuando se est¨¢ en la trinchera". "De joven yo tocaba instrumentos de viento y por eso, para expresar la soledad en la adolescencia de Harry, decid¨ª usar trompetas de tonos bajos", desvel¨®. Y para retratar al malvado Voldemort, que saca y mete la lengua como las serpientes, opt¨® por el cuerno que "emite un sonido que entra y sale".

"Los directores te piden que suene como Titanic o El se?or de los anillos, y la inspiraci¨®n se va reduciendo, cuando lo que hay que buscar es la singularidad", lament¨® Warbeck. Un riesgo, el de innovar, permitido en producciones peque?as -para Quills construy¨® instrumentos nuevos- pero no en las grandes como La mandolina del capit¨¢n Corelli.

Warbeck confes¨® haber compuesto la partitura de Billy Elliot una vez rodada la cinta: "Me volv¨ª loco para encajar con la m¨²sica los pasos de baile y a veces unas manos tocando el piano". Warbeck acaba de poner m¨²sica a La fiesta del chivo, dirigida por Luis Llosa, y Doyle se postula para trabajar con Gerardo Herrero, un "gentleman" con el que trabaj¨® en El misterio Gal¨ªndez.