"Detesto con toda mi alma el Apocalipsis"
Juan Echanove (Madrid, 1961) se atreve con el teatro como director, y recientemente estren¨® en el Bellas Artes Visitando al se?or Green, de Jeff Baron, una comedia dram¨¢tica que interpretan sus colegas los actores Juan Jos¨¦ Otegui y Pere Ponce, y que tiene el asunto de la homosexualidad y la tolerancia en su ra¨ªz y en su desarrollo. La obra narra el transcurso de una relaci¨®n, hasta el entendimiento, de un anciano jud¨ªo y un joven ejecutivo rico y homosexual. El otro d¨ªa, el actor de cine y de teatro estaba en el C¨ªrculo de Bellas Artes y observ¨® que dos j¨®venes homosexuales hac¨ªan ostentoso su amor ante una pareja heterosexual de personas mayores; ¨¦stos empezaron haciendo muestras de desagrado, pero terminaron, complacidos, haciendo ellos lo mismo. Pues en Visitando al se?or Green, dice Echanove, pasa algo parecido.
"El Echanove director es muy parecido al actor. En todo lo que hago voy a fondo; no hay otra cosa que la funci¨®n, ella es la que me manda"
"En el escenario aparecen seres vivos, y los est¨¢n mirando personas que en un modo u otro sienten cercan¨ªa ante lo que ven"
Pregunta. Pone usted en escena un asunto de mucha actualidad.
Respuesta. El teatro tiene la capacidad de especular, de convertirse en espejo de lo que pasa, m¨¢s que cualquier arte. En el escenario aparecen seres vivos, y los est¨¢n mirando personas que en un modo u otro sienten cercan¨ªa ante lo que ven. Es el pilar maestro del teatro: hacer reflexionar al espectador sobre su existencia.
P. Ahora coexisten en la escena madrile?a muchas historias que responden a lo que usted dice.
R. S¨ª. La extra?a pareja, con Osinaga y Kremel; Almacenados, con Sacrist¨¢n; Charing Cross, con Carmen El¨ªas; Wit, con Rosa Maria Sard¨¤... Ni siquiera son parecidas, pero en todas se huelen trozos de vida. Todas, adem¨¢s, presentan a dos personajes. Por lo que respecta a la que representamos nosotros, lo que m¨¢s me sorprendi¨® fue su capacidad de decirnos c¨®mo somos con toneladas de sentido del humor. Una funci¨®n escrita por un hombre muy optimista. Cuando la le¨ª me di cuenta de que me ayudaba a reconciliarme con el ser humano: cosas que antes pensaba que eran terribles, el se?or Green me ayudaba a comprenderlas, se me abr¨ªa la sonrisa y pensaba que hab¨ªa soluciones.
P. ?Para todo?
R. Para todo. Vivimos un tiempo de transici¨®n, en medio del griter¨ªo y la zozobra, y, de repente, me monto en la chalupa del se?or Green y me digo: "Tranquilo, se puede llegar a puerto".
P. ?Qu¨¦ es lo que m¨¢s zozobra le produce?
R. Detesto que se segregue por la condici¨®n sexual, detesto que se congregue a la gente por su condici¨®n racial, detesto que la gente use sus creencias religiosas como justificaci¨®n de su intolerancia, detesto que no exista lugar para el romanticismo, detesto el "tanto tienes, tanto vales", detesto con toda mi alma el Apocalipsis, y si me monto en la barca del se?or Green, ese mundo en blanco y negro, pat¨¦tico y vulgar, se me empieza a iluminar y veo que la mejor condici¨®n del hombre es su sentido del humor.
P. ?No lo hay?
R. Me falta desde que me levanto hasta que me acuesto. Vivimos en una competici¨®n ol¨ªmpica que, adem¨¢s, no va a tener pistoletazo de salida. En el camino, ego¨ªsmo, s¨¢lvese quien pueda, y un sentimiento fatalista: est¨¢ todo escrito, hagas lo que hagas, tus movimientos no sirven para nada.
P. Habla usted del Apocalipsis. ?Lo ha visto?
R. Nos lo anuncian cada rato; son fuegos de artificio, una lamentable puesta en escena del p¨¢nico.
P. ?A qu¨¦ se refiere?
R. A que se nos dec¨ªa hace dos a?os que este pa¨ªs se iba al carajo, y las tropas dejaron Irak, los gays se pueden casar, el Estatuto est¨¢ en v¨ªas de soluci¨®n...; falta resolver la cuesti¨®n vasca. Si esto es el Apocalipsis, que venga Dios y lo vea. Voy m¨¢s a la izquierda que el PSOE, mi manera de pensar est¨¢ m¨¢s con el 5%, pero la cintura de este Gobierno hace que me sienta c¨®modo yo tambi¨¦n. Y ante el Apocalipsis, yo pongo a estos dos personajes que interpretan mi obra: terminan entendi¨¦ndose.
P. ?A qu¨¦ le ha obligado asumir el puesto de director?
R. A asumir que el director hace un trabajo bello, pero tiene que parecer que no existe. Son los actores los que hacen la funci¨®n, y adem¨¢s, si no les escuchas, te ir¨¢ fatal. El teatro es un trabajo de equipo.
P. Isabel Coixet (Charing Cross) tambi¨¦n hablaba de la humildad de este trabajo.
R. Es que no puede ser otra la actitud. Una obra se te va formando en la cabeza, como un sue?o; pero si te empe?as en tu propio sue?o, si no escuchas a los que tienes alrededor, vas dado. Otegui me lo dec¨ªa: los montajes salen como quiere la compa?¨ªa. Y el director colabora. Como uno m¨¢s.
P. ?Dirigir ense?a a obedecer?
R. A no ordenar. El dictador que todos tenemos dentro nunca debe salir a flote. Este trabajo me ha ense?ado tambi¨¦n que, cuando sea actor de nuevo, debo estar al cien por cien al servicio del director. ?C¨®mo entiendo ahora a Llu¨ªs Pasqual, a Jorge Eines, a Taco Larreta, a Adolfo Marsillach, a Jos¨¦ Luis Castro, a Jos¨¦ Carlos Plaza, a Miguel Narros..., que han sido mis directores!
P. Ninguna mujer.
R. Me encantar¨ªa que me dirigiera una mujer. Me gusta mucho Carme Portacelli..., y estuve a punto de trabajar con Pilar Mir¨®. Cuando me ve¨ªa, siempre me dec¨ªa: "Te me est¨¢s resistiendo". Y cuando se muri¨®, me dije: "Me cago en la leche, te me has ido antes de tiempo".
P. ?Y est¨¢ preparado para fracasar?
R. Estoy preparado para fracasar; de hecho, convivimos con el fracaso, sabemos que puede venir. El Echanove director es muy parecido al Echanove actor. En todo lo que hago voy a fondo; no hay otra cosa que la funci¨®n, ella es la que me manda. Y si fracaso, me quedar¨¦ deprimido y triste, pero al d¨ªa siguiente ir¨¦ a trabajar otra vez. Tengo 44 a?os, he hecho muchas pel¨ªculas, he hecho televisi¨®n, y teatro, no estoy inmunizado contra las tropel¨ªas que se han cometido y se seguir¨¢n cometiendo con lo que uno hace. A veces veo c¨®mo me tratan y me pregunto: "Si esto me lo hacen a m¨ª, ?qu¨¦ no le har¨¢n al pobre que empieza?". Si no tuviera la experiencia que tengo, s¨®lo o¨ªr la palabra fracaso me har¨ªa vomitar.
P. Ha hecho de todo. ?Qu¨¦ le ha dado esa combinaci¨®n de disciplinas?
R. Muchos amigos me han llamado para trabajar en cosas que no hago habitualmente y que, en efecto, tienen que ver con las m¨¢s diversas disciplinas: he recitado tres poemas en la presentaci¨®n de un libro, he ilustrado discos... Eso ha ampliado mis miras y ha contribuido a quitarme ese traje de la vanidad, como si me despojara de la bata amarilla con la que muri¨® Moli¨¨re... Cuando un actor se mira al espejo, se cree el Rey Sol. Cuando eso ocurre, se est¨¢ muriendo el actor.
P. Tambi¨¦n le permitir¨¢ tener una idea global de c¨®mo va la cultura.
R. Pues va mal, porque no se promueve desde la escuela. Por ejemplo, ?c¨®mo es posible que en los colegios no se forme a los ni?os en las artes esc¨¦nicas? El teatro nos da much¨ªsimas ocasiones para vivir y sentirnos en otros, para analizar la sociedad desde el juego... Creo que el teatro dar¨ªa m¨¢s a la personalidad de los chicos que la educaci¨®n f¨ªsica. ?sta es una carencia cultural importante. Si no se elimina, no conseguiremos transmitir que la cultura m¨¢s la calidad de vida es juego, no es esfuerzo, te hace cada d¨ªa mejor, m¨¢s completo. Todo eso requiere un compromiso institucional que va m¨¢s all¨¢ de lo que digan los ministerios.
P. Tendr¨ªa que ser un compromiso del Gobierno.
R. Del presidente del Gobierno, y no lo ha habido nunca. El d¨ªa que veamos que el presidente del Gobierno es aficionado al teatro pensar¨¦ que nos ha tocado la loter¨ªa primitiva con bote.
P. ?C¨®mo le han recibido como director el teatro, los medios?
R. El medio teatral me ha recibido con inter¨¦s y cari?o. ?Los medios? A veces me piden que haga puenting, que juegue al tenis o que cocine huevos fritos en el plat¨® para hacerme perdonar que diga dos l¨ªneas de la obra en una entrevista.
P. ?Tan mal ve el periodismo?
R. Un tipo de periodismo s¨ª que lo veo muy mal.
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