Los obispos dicen que la Ley de Reproducci¨®n Asistida no respeta la vida
La Conferencia Episcopal estudia esta semana c¨®mo hacer frente a esa iniciativa legislativa
Ciencia e Iglesia cat¨®lica tienden a chocar, y los obispos lo advierten con frecuencia con reiterados esfuerzos para advertir a la sociedad de que no se oponen por norma a los avances cient¨ªficos o tecnol¨®gicos. Ayer, en la Conferencia Episcopal, hubo ocasi¨®n de escuchar esas condenas y justificaciones, en boca de su presidente, el obispo de Bilbao, Ricardo Bl¨¢zquez, sobre
el proyecto de ley de T¨¦cnicas de Reproducci¨®n Humana Asistida que promueve el Gobierno socialista. Esta norma permitir¨¢, entre otras cosas, la selecci¨®n gen¨¦tica de hijos para curar a hermanos enfermos, lo que, seg¨²n Bl¨¢zquez, no muestra "el respeto debido a la vida de una persona en sus primeras fases". Dijo: "Un embri¨®n no es un amasijo ni un c¨²mulo indiferenciado de c¨¦lulas, no es un objeto a nuestra disposici¨®n. Es un sujeto, una nueva individualidad, alguien, no simplemente algo, en los inicios de su ciclo vital".
La tesis episcopal es que "desde la formaci¨®n del cigoto acontece un constante y gradual desarrollo de un nuevo organismo humano que evolucionar¨¢ siguiendo una orientaci¨®n precisa". La Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal, la segunda presidida por el obispo de Bilbao, Ricardo Bl¨¢zquez, estudiar¨¢ esta semana el pol¨¦mico proyecto de ley.
Iglesia y ciencia
Dijo Bl¨¢zquez, en un largo apartado de su discurso de apertura: "El magisterio de la Iglesia ha sostenido y defendido constantemente el car¨¢cter sagrado e inviolable de la vida humana, desde la concepci¨®n hasta la muerte. Pues bien, afirmamos con palabras del Papa Benedicto XVI: Este juicio moral es v¨¢lido ya desde los inicios de la vida de un embri¨®n, incluso antes de que sea implantado en el seno materno, que le custodiar¨¢ y alimentar¨¢ hasta el momento del nacimiento. Cuando el gameto masculino se une con el femenino surge un ser vivo distinto del padre y de la madre. Es un ser vivo que, sin soluci¨®n de continuidad si no es interceptado en el camino, podr¨¢n recibir sus padres con el gozo de haberles nacido un hijo. 'El amor de Dios no hace diferencias entre el reci¨¦n concebido, a¨²n en el vientre de su madre, y el ni?o, el joven, el hombre maduro o el anciano' [la cita es de Benedicto XVI]. No siempre, por desgracia, manifiesta nuestra sociedad el respeto debido a la vida de una persona en sus primeras fases, que, como dec¨ªa Juli¨¢n Mar¨ªas, recientemente fallecido, es siempre una realidad viniente. Por aquellas fases iniciales todos nosotros hemos pasado. Las fuentes de la vida humana son sagradas; manipularlas es una aventura, adem¨¢s de inmoral, inmensamente arriesgada".
Bl¨¢zquez afirm¨® que "la Iglesia se alegra del progreso de la ciencia y de la t¨¦cnica, que debe servir al desarrollo de la humanidad". Pero a?adi¨®: "Pedimos que al poder de la ciencia se una la conciencia moral y el respeto a la dignidad de la persona en todo el recorrido de su existencia y en todas las circunstancias de la vida. La mirada de la fe potencia la luz de la raz¨®n para ver una persona, m¨¢s a¨²n al mismo Jes¨²s, en todos los momentos de su formaci¨®n y en todos los rostros, por m¨¢s desfigurados que est¨¦n".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.