Parcerisas retrata el desasosiego actual en 'Dos dies m¨¦s de sud'
Francesc Parcerisas (Begues, Baix Llobregat, 1944) no concibi¨® su nuevo poemario, titulado Dos dies m¨¦s de sud (Quaderns Crema), como una obra unitaria. Sin embargo, la repetici¨®n de algunas im¨¢genes aporta cierta trabaz¨®n a sus versos, tal como explic¨® ayer el mismo autor en la presentaci¨®n de este libro, en el que ha reunido 50 poemas, varios de ellos ya publicados o le¨ªdos en recitales literarios. Entre otros elementos recurrentes, cit¨® a modo de an¨¦cdota la presencia de dos animales: la rata, "que sobrevive a los hombres cuando hay un desastre", y la foca, "que causa sorpresa y puede ser signo de renacimiento".
Pero hay m¨¢s junturas. "Muchas de estas im¨¢genes son propias del paso del siglo XX al XXI, de la crisis de nuestra generaci¨®n. Hay muchas preguntas sin respuesta que la poes¨ªa se puede hacer, porque es fuente de conocimiento", apunt¨® Parcerisas, y a?adi¨®: "Este libro habla del mundo contempor¨¢neo, un mundo lleno de cambios violentos, desasosegante por su individualismo, que no sabe ad¨®nde va". No obstante, el poeta quiso esquivar el catastrofismo. "Dentro del pesimismo debe haber optimismo, y viceversa", se?al¨®. Eso s¨ª, existen situaciones que lamenta profundamente, como la, a su juicio, "p¨¦rdida" del catal¨¢n: "Creo que vivimos hoy los ¨²ltimos momentos de una cultura y una lengua, la catalana".
Oratorios y Rilke
El poemario se divide en cuatro partes: Rimbaud a Harar, Els oratoris (la central y m¨¢s extensa de todas), Platja de Portobello y Venus i Adonis. El t¨ªtulo de la obra lo tom¨® Parcerisas de un poema de Rainer Maria Rilke en traducci¨®n de Joan Vinyoli, Dia de tardor, que sirve de pr¨®logo a sus versos. El autor admira su tono de imprecaci¨®n y la reflexi¨®n que contiene -ajena a toda nostalgia- sobre el ciclo inexorable de las estaciones. As¨ª, en el tr¨¢nsito natural del verano al oto?o, Rainer Maria Rilke celebra la cercana plenitud de los frutos.
No es el ¨²nico homenaje que contiene el volumen. La menci¨®n a Rimbaud abre, por ejemplo, una serie de poemas sobre "la utop¨ªa y el desencanto". Parcerisas dedica, adem¨¢s, una glosa al tambi¨¦n poeta ?ngel Gonz¨¢lez, quien ya consagr¨® un ejercicio literario similar a Claudio Rodr¨ªguez. "Creo en la tradici¨®n de nuestra cultura, que incluye desde Carles Riba a Gabriel Ferrater". A pesar de su af¨¢n laico, en Dos dies m¨¦s de sud se multiplican las referencias a la mitolog¨ªa cristiana. "Aparecen motivos como el perd¨®n, la culpa, las oraciones... Son elementos po¨¦ticos que, a la vez, deber¨ªan tener resonancias simb¨®licas en la imaginaci¨®n de la gente. La mitolog¨ªa cl¨¢sica queda muy lejos del lector actual". Si bien Parcerisas se felicita del legado cultural que hemos recibido, tambi¨¦n opina que sobran las razones para la autocr¨ªtica: "Somos producto de la historia con sus campos de concentraci¨®n incluidos. Somos Walter Benjamin y sus verdugos".
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