Un reconocimiento merecido
La figura de Juan Cris¨®stomo de Arriaga (1806-1826) se est¨¢ reivindicando holgadamente el a?o del segundo centenario de su nacimiento. En Espa?a y en el extranjero. No han pasado dos semanas desde el simposio dedicado al m¨²sico bilba¨ªno en Berl¨ªn, con se?aladas personalidades de la musicolog¨ªa centroeuropea. Ahora, en su villa natal, comparece un int¨¦rprete hist¨®rico como Alan Curtis, al frente del Il Complesso Barocco, con un programa a ¨¦l dedicado, en el que se combinaban desde la Sinfon¨ªa en re mayor o la obertura de Los esclavos felices hasta piezas vocales como Medea o Herminia. Alan Curtis ya hab¨ªa desembarcado en Bilbao hace un a?o con dos ¨®peras como Rodelinda y Lotario, de H?ndel. Pero lo de Arriaga era otra cosa. Y as¨ª se ha percibido.
Il Complesso Barocco
Director: Alan Curtis. Monogr¨¢fico dedicado a Juan Cris¨®stomo de Arriaga. Teatro Arriaga, Bilbao, 16 de mayo.
El programa era espl¨¦ndido por lo representativo de los m¨²sicos, que de alguna forma tienen similitudes con el compositor bilba¨ªno. Adem¨¢s, la sonoridad con instrumentos de ¨¦poca contribu¨ªa al sello de la diferencia. El esp¨ªritu cherubiniano de Arriaga destac¨® en la Obertura, opus 20, el rossiniano en la popular obertura de Los esclavos felices y el m¨¢s puramente mozartiano en la cantata Herminia, con una buena prestaci¨®n de la soprano griega Theodora Baka.
Arriaga era, dig¨¢moslo as¨ª, conocido en casa, y, aun as¨ª, escasamente. El inter¨¦s mostrado ¨²ltimamente por Christophe Rousset, Paul Dombrecht o Alan Curtis, seguramente contribuir¨¢ de una forma decisiva a su expansi¨®n internacional. Es un aspecto verdaderamente importante, en este a?o de celebraciones, la expansi¨®n internacional del compositor. Su m¨²sica lo merece. No es cuesti¨®n a estas alturas de la Historia de un descubrimiento, sino m¨¢s bien de un acto de justicia. Alan Curtis lo vio as¨ª y su concierto fue, sencillamente, espl¨¦ndido desde la sencillez de un trabajo bien concebido y a¨²n mejor realizado. Su orquesta son¨® bien y contribuy¨® decisivamente a la profundizaci¨®n en el conocimiento del autor.
Babelia
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