Un protocolo muy televisivo
La Reina estuvo muy activa, y la UEFA no reconoci¨® a las autoridades catalanas
La UEFA no contempla la existencia de la Generalitat en su libro de estilo, por lo que el protocolo que deb¨ªa ordenar las autoridades en la tribuna promet¨ªa l¨ªo. Por lo visto, la cosa perdi¨® tensi¨®n gracias a la participaci¨®n del Bar?a y de la Casa Real. El Bar?a asumi¨® como invitados personales suyos a diversos miembros del Gobierno catal¨¢n y del Parlament, que no asistieron como miembros de un Gobierno o de un Parlamento, sino como invitados del club. Fueron ubicados en dos tribunas que flanqueaban la tribuna central.
La Casa Real particip¨® en la organizaci¨®n de la tribuna central, situando al presidente Maragall con un criterio televisivo del protocolo. No estaba en la primera fila, pero estaba justo detr¨¢s de las principales autoridades, con lo que saldr¨ªa en el principal encuadre televisivo. Otras personalidades ubicadas por protocolo en la primera fila, como el alcalde de Barcelona, quedaron en las quimbambas de una c¨¢mara. Tambi¨¦n se situ¨® en esta tribuna, tan extra?a como la periferia del f¨²tbol -en la tribuna coexist¨ªan desde Platini hasta Alberto de M¨®naco, el director general del ramo, la ministra del ramo, que curiosamente es Educaci¨®n, y altos cargos de La Moncloa-, a la segunda autoridad catalana, el presidente del Parlament. Curiosamente no hubo, o nadie las vio, autoridades brit¨¢nicas. En lo que es una ilustraci¨®n de la singularidad y la utilizaci¨®n del f¨²tbol en cada cultura pol¨ªtica, no fueron a Par¨ªs ni el alcalde de Londres, ni el primer ministro, ni la reina.
Las tribunas laterales sufrieron un protocolo muy laxo, desordenado y natural, que permiti¨® a todo el mundo no someterse a las formas. All¨ª se mordieron las u?as el presidente de Esquerra Republicana, Josep Llu¨ªs Carod Rovira, y el de Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU), Artur Mas; Xavier Trias, candidato a la alcald¨ªa de Barcelona por CiU; los consejeros Joan Saura, Francesc Baltasar y Jordi W. Carnes, y el ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol. En un arrebato, incluso se vio celebrando un gol con un fundido abrazo al consejero Baltasar, de Iniciativa per Catalunya, con Joan Gaspart. En la tribuna central, los telespectadores pudieron ver que Laporta, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y, detr¨¢s de ellos, Pasqual Maragall fueron los que m¨¢s vivieron el partido, el primero del Bar?a presenciado por Rodr¨ªguez Zapatero como presidente, que nunca ha acudido al Camp Nou.
La Reina, seg¨²n uno de los asistentes a la tribuna, fue la m¨¢s activa socialmente en esta zona. Dio conversaci¨®n a todo el mundo. Al finalizar el acto, algunas autoridades bajaron al c¨¦sped. Xavi, ante la sorpresa de do?a Sof¨ªa, la abraz¨®. Don Juan Carlos, a su vez, bes¨® la copa que le ofreci¨® Jordi Pujol. Los primeros en retirarse del estadio fueron Rodr¨ªguez Zapatero y el rey. Maragall y el alcalde de Barcelona, Joan Clos, fueron los ¨²nicos pol¨ªticos que entraron en el vestuario, donde se les roci¨® con cava.
Si la televisi¨®n es el criterio de orden del protocolo, el protocolo fue consumido por el 60,8% de los telespectadores del Estado y por el 70,7% de los espectadores catalanes.
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