El PP, contra Ord¨®?ez
Todos los organismos reguladores deben ser preservados del riesgo de politizaci¨®n. El Banco de Espa?a con mayor raz¨®n, puesto que la solvencia de las entidades financieras afecta indirecta, pero intensamente, al resto de las actividades econ¨®micas espa?olas. En contra de esta prudente apreciaci¨®n, el PP mantiene una oposici¨®n pertinaz -casi hostilidad- al nombramiento de Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez como gobernador del Banco de Espa?a -en sustituci¨®n de Jaime Caruana, cuyo mandato expira a mediados de julio- y, al mismo tiempo, propone como subgobernador a uno de los actuales consejeros del banco, Jos¨¦ Mar¨ªa Mar¨ªn Quemada, en uso de la supuesta pr¨¢ctica de consenso seg¨²n la cual el Gobierno propone el nombre del gobernador y la oposici¨®n contribuye a la formaci¨®n del equipo de direcci¨®n con el nombre de un subgobernador.
La respuesta del vicepresidente Pedro Solbes, que ayer confirm¨® el nombramiento de Fern¨¢ndez Ord¨®?ez en el Congreso, fue contundente: el subgobernador propuesto por el PP ni siquiera se considerar¨¢ mientras la oposici¨®n no acepte la designaci¨®n del gobernador. El PP rechaza a Fern¨¢ndez Ord¨®?ez porque tiene carn¨¦ del PSOE y ha sido secretario de Estado de Hacienda con Pedro Solbes. Tambi¨¦n fue secretario de Estado de Econom¨ªa y de Comercio con otros Gobiernos socialistas, presidente del Tribunal de Defensa de la Competencia y de la Comisi¨®n Nacional del Sistema El¨¦ctrico. El PP hace abstracci¨®n de los m¨¦ritos del candidato del Gobierno para centrarse exclusivamente en la supuesta falta de independencia del nuevo gobernador.
Si la objeci¨®n se fundamenta en el carn¨¦ del PSOE del candidato Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, ya deber¨ªa saber Mariano Rajoy que existen abundantes casos de profesionales con carn¨¦ pol¨ªtico que desempe?aron sus responsabilidades con feroz independencia frente al poder; y, por el contrario, est¨¢n registrados ejemplos numerosos de gestores sin carn¨¦ que ejercieron sus funciones con sumisi¨®n a los ministros de turno. Bien lo sabe el PP, porque durante sus Gobiernos se recuerdan reguladores presuntamente independientes que en todo momento actuaron a las ¨®rdenes del Ejecutivo.
La oposici¨®n del PP s¨®lo puede explicarse como un deseo de obstaculizar la sustituci¨®n normal del gobernador actual. Refuerza la tesis obstruccionista el hecho de que el PP se niegue a entender que el consenso para el nombramiento de gobernador y subgobernador exige que ambos sean aceptados por el PSOE y el PP; en ning¨²n caso cabe que la oposici¨®n acepte a uno y rechace al otro. Por tanto, hace bien el vicepresidente Solbes en advertir de que, si no hay acuerdo sobre Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, el nuevo gobernador nombrar¨¢ al pr¨®ximo subgobernador sin atender sugerencias. El cambio resultar¨¢ mejor a¨²n si el subgobernador surge de entre los competentes directores generales del banco. As¨ª no se politizar¨¢ la instituci¨®n, como desinteresadamente desea Rajoy.
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