Acerca de la historia

Hace d¨ªas finaliz¨® uno de los pocos programas que justifican los impuestos con que sostenemos TVE. Se trata de El laberinto espa?ol. Ahora que tanto se habla de legislar la "memoria hist¨®rica", un programa relegado a un horario imposible del fin de semana hac¨ªa mucho m¨¢s por la recuperaci¨®n del conocimiento de nuestro pasado, por las diferentes formas de acercarnos a ¨¦l y de entenderlo, por la discusi¨®n argumentada, m¨¢s all¨¢ de las consignas emitidas en 59 segundos, tan simplificadoras, que poco a?aden al debate razonado y s¨ª que fomentan en cambio el sectarismo vocinglero. Yo comprendo que escuchar resta el precioso tiempo de que disponemos para reafirmarnos en nuestras ideas previas -como el pretendido olvido de la revisi¨®n historiogr¨¢fica de la Segunda Rep¨²blica, la Guerra Civil y el franquismo al que alud¨ªa Santos Juli¨¢ este domingo pasado en su peri¨®dico-.

Sin embargo, tanto los documentales como los debates de historiadores armados de un bagaje intelectual y acad¨¦mico importante son los instrumentos id¨®neos para comprender nuestro pasado. Probablemente nadie har¨¢ caso de esta carta y el deseo que expreso en ella, pero tal vez sea posible repetir dicha serie en La 2 a esas horas de la tarde en que La Primera y las privadas se concitan para que cada d¨ªa nos entontezcamos un poco m¨¢s y algunos nos preguntemos por qu¨¦ para ver un programa decente hemos de restar horas al sue?o cuando pagamos como todos; por qu¨¦ no puedo decir a mis alumnos que utilicen esos documentales y debates como una base de reflexi¨®n acerca de la historia de su pa¨ªs.