Ni el clamor popular frena a Klinsmann

El seleccionador alem¨¢n, Jurgen Klisnmann, de 41 a?os, no renovar¨¢ su contrato con la Federaci¨®n Alemana de F¨²tbol (DFB) por motivos familiares y sentirse fatigado tras dos a?os en el cargo. Su ayudante durante el Mundial Joachim L?w, de 46 a?os, le sucede y promete continuar con la filosof¨ªa futbol¨ªstica que Klinsmann aplic¨®.

Ni el clamor popular de los cientos de miles de aficionados que ped¨ªan que siguiera al frente de la selecci¨®n, ni los llamamientos de los pol¨ªticos, ni los de los seleccionados, ni las campa?as de los medios de comunicaci¨®n m¨¢s poderosos, ni siquiera la concesi¨®n de la cruz del m¨¦rito federal. Klinsmann tiene merecida fama de cabeza dura. Nada ni nadie fue capaz de hacerle retroceder en su decisi¨®n de dejar la selecci¨®n tras dos a?os de trabajo coronado por el ¨¦xito de un tercer puesto en el Mundial que pocos esperaban conseguir.

Klinsmann ha sufrido muchas penalidades los ¨²ltimos dos a?os. Los mismos que ahora le aclaman, ped¨ªan no hace mucho su cabeza. Para imponer su concepci¨®n del f¨²tbol en las anquilosadas estructuras de la DFB, Klinsmann ha mantenido una batalla permanente que sin duda le ha dejado exhausto. A esto se a?ade su deseo de mantener su vida familiar en la playa de California donde reside.

La lista de conflictos y desencuentros es larga: acusaciones por residir en California, burlas de sus m¨¦todos de trabajo, negativa de la DFB a concederle el director deportivo solicitado, reticiencias ante su equipo de preparadores procedentes de Estados Unidos y de su ojeador suizo. Todo esto ha pesado en la decisi¨®n de Klinsmann de tirar la toalla. Bastar¨ªa un mal resultado en la fase de clasificaci¨®n de la Eurocopa 2008 para que la discusi¨®n empezase de nuevo y Klisnamnn no est¨¢ dispuesto a soportarlo.

La DFB ha optado por una soluci¨®n continuista y ha designado para sucesor a L?w, en lo que parece un reconocimiento a la labor del seleccionador saliente. Tambi¨¦n encaja de lleno en la tradici¨®n del f¨²tbol alem¨¢n. El segundo del legendario Sepp Herberger, Helmut Sch?n, lo sucedi¨® y ocup¨® muchos a?os el cargo. Lo mismo ocurri¨® con Jupp Derwall, segundo y sucesor de Sch?n. Ahora L?w deber¨¢ continuar la tarea de Klinsmann, aunque existen las dudas l¨®gicas de si podr¨¢ llevar adelante la misi¨®n con los mismos resultados.

Klinsmann declar¨® ayer: "Ped¨ª que a la filosof¨ªa de juego que hemos creado se le alargue la vida. Estoy muy feliz de que la DFB lo vea tambi¨¦n as¨ª y me parece l¨®gica la elecci¨®n de L?w como mi sucesor".