Una marea de furor ¨¦tico
El viernes por la noche, satisfechos por el desarrollo de un Tour que, aparentemente, recuper¨® los sabores del viejo, del bueno, ciclismo, los m¨¢nagers de los equipos del Tour se reunieron animados por lo que les ha dado llamar el esp¨ªritu de Estrasburgo, la asamblea en la que decidieron la aplicaci¨®n estricta del c¨®digo ¨¦tico. Una especie de doble ley antidopaje que regula dentro del ProTour las relaciones de los equipos entre s¨ª y con los corredores, lo que supuso, de entrada, que el Tour se quedara sin sus grandes favoritos -Ullrich, Basso, Mancebo- y sin el equipo Astana, de Vinok¨²rov, al completo.
"Gracias a aquello, hemos tenido el Tour que hemos tenido", exclamaban en la reuni¨®n los m¨¢s exaltados de entre los m¨¢nagers, los defensores de la l¨ªnea dura. "Ha sido una limpieza que nos ha hecho recuperar imagen ante la sociedad, que ha provocado un Tour competido, con desfallecimientos humanos y tremendas resurrecciones. Y ahora tenemos que seguir as¨ª. Tenemos que seguir el ejemplo del T-Mobile, que ha expulsado a Ullrich y Sevilla del equipo. Los dem¨¢s conjuntos con corredores implicados en la lista de Eufemiano deber¨ªan dar el mismo paso. Tenemos que comprometernos entre nosotros para que ninguno de ellos vuelva a correr...".
En medio de tal ambiente, que alg¨²n asistente ha comparado al de una ceremonia de linchamiento o de caza de brujas, las llamadas a la coherencia y al sentido com¨²n fueron escasas y despreciadas. Hubo quien record¨® que mientras no haya sanci¨®n deportiva, o un positivo, o una confesi¨®n de dopaje, o una decisi¨®n judicial, no se pueden rescindir contratos; hay quien dijo que los abogados de los corredores se est¨¢n frotando las manos pensando en las reclamaciones millonarias que pod¨ªan llevar a cabo; hubo quien trat¨® de explicar que los enemigos en la lucha contra el dopaje no son los deportistas que hacen trampas, sino el sistema, el montaje que vive de las trampas de los atletas, y que, por lo tanto, ser¨ªa verdaderamente ir¨®nico, y triste, un escenario, muy probable, en el que el equipo de Eufemiano saliera libre en el proceso penal en que est¨¢ inmerso, y en el que decenas de ciclistas, cada uno con un grado de implicaci¨®n distinto, algunos inocentes, terminaran condenados antes de tiempo. Nadie quiso o¨ªr las voces que no iban con la mayor¨ªa.
Tambi¨¦n quisieron o¨ªr, algunos con aprensi¨®n, los rumores que hablan de nuevas listas de corredores implicados, temor desmentido por el letargo que vive el proceso judicial, afectado por la temporada vacacional de jueces, fiscales y polic¨ªas. Mientras tanto, las federaciones espa?ola, francesa e italiana se alinearon ayer con los organizadores de la Vuelta, el Tour y el Giro, y en contra de la Uni¨®n Ciclista Internacional, pidiendo el desmantelamiento del Pro Tour. Ello no significa que las tres grandes est¨¦n libres de la marea de furor ¨¦tico que barre el ciclismo y quieran abolir un c¨®digo ¨¦tico que termina funcionando como una ley de cartel, todo lo contrario. La Vuelta, que comienza el ¨²ltimo s¨¢bado de agosto, tiene, por otra parte, un mes para manejar la patata caliente que tiene encima de la mesa, la participaci¨®n del equipo Astana, de quien a¨²n la comisi¨®n de licencias del ProTour no ha decidido nada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.