"El turismo de borrachera no nos interesa"
Jordi Hereu (Barcelona, 1965) alcalde de su ciudad natal, ocup¨® ayer su nuevo despacho por primer vez. No hab¨ªa un solo detalle personal. Por falta de tiempo. Tampoco tendr¨¢ mucho para darse a conocer: le quedan nueve meses hasta las elecciones municipales. Dice que quiere acabar bien el mandato. Uno de sus primeros actos oficiales fue visitar al presidente de la Generalitat y ex alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall. Su receta para la ciudad es una combinaci¨®n de desarrollo econ¨®mico y urbanismo humano. El turismo vale, pero no todo. El que vive en la calle es mejor que no venga.
Pregunta. Su discurso y el de la oposici¨®n fueron casi iguales que los de la toma de posesi¨®n de Joan Clos hace nueve a?os. ?C¨®mo les va a creer la gente?
"Los instrumentos legales para combatir el ruido nocturno son fuente de frustraci¨®n. Te vienen ganas de que alg¨²n juez viva al lado de una sala"
"Renovar¨ªamos el tripartito municipal incluso si tuvi¨¦ramos una mayor¨ªa suficiente. En la Generalitat la f¨®rmula ha sido muy buena"
"Barcelona tampoco se ha hecho s¨®lo a base de grandes acontecimientos. Disiento de esa contraposici¨®n entre lo global y lo local"
Respuesta. Yo reclamo el beneficio de la duda. He expresado unos objetivos. A corto plazo, acabar el mandato con el programa en marcha, y esbozar los retos pendientes. En cuanto al estilo, eso se demuestra andando.
P. ?En qu¨¦ se notar¨¢?
R. Las l¨ªneas b¨¢sicas est¨¢n marcadas: el desarrollo de la ciudad y avanzar en cohesi¨®n social. Esto tiene que ver con otras administraciones. Hemos firmado la creaci¨®n de 50 equipamientos con el Gobierno catal¨¢n. Para mayores, para personas discapacitadas. Tambi¨¦n un nuevo mapa escolar. Se notar¨¢ dentro de un tiempo. En limpieza, hemos hecho un esfuerzo, pero reconozco que no es suficiente. Pero mejorar implica dos cosas: servicio p¨²blico y una cultura c¨ªvica compartida. No puede ser que vayas siempre limpiando, como si se tratara de un ni?o mimado que va ensuciando.
P. ?C¨®mo conectar¨¢ con la gente?
R. Los mecanismos de di¨¢logo est¨¢n, pero el di¨¢logo no impide la confrontaci¨®n de ideas. No somos d¨¦spotas ilustrados que impongan sus ideas. Tampoco queremos el extremo contrario de ir con un papel en blanco a ver qu¨¦ piden.
P. Ponga ejemplos.
R. Lesseps. Hubo una idea, di¨¢logo, intercambio de informaci¨®n y modificaciones a partir de las aportaciones de los vecinos. Ocurre as¨ª en muchos proyectos urban¨ªsticos. Eso no evita que alguien no est¨¦ de acuerdo. Tenemos la obligaci¨®n de dedicar tiempo a intercambiar informaci¨®n con los vecinos. El desarrollo de los cuarteles de Sant Andreu. Hab¨ªa que dise?ar presente y futuro. Part¨ªamos de posiciones muy distintas y el resultado final satisface a la mayor¨ªa. Se han pactado los equipamientos y las peticiones, es verdad, eran razonables. Y luego en vivienda. Hab¨ªa quien la quer¨ªa el ciento por ciento protegida y quien no quer¨ªa apenas vivienda protegida. Al final es el 50% y el resultado es bueno.
P. ?Seguir¨¢ con el 22@?
R. Es una apuesta estrat¨¦gica acertada.
P. Ten¨ªa que ser nueva industria, pero hay mucha oficina.
R. Cuesta, cuesta. Pero tenemos que ofrecer las condiciones a los operadores internacionales. Tenemos potencial de desarrollo. Y tenemos que seguir presentes en el mercado internacional para que las empresas elijan Barcelona. Hay cosas en las que estamos muy bien: cultura, estructura urbana, clima. Tenemos d¨¦ficit de grandes infraestructuras. Un aeropuerto competitivo que enlace con el mundo, no s¨®lo con Europa, es un objetivo. Una log¨ªstica desarrollada tambi¨¦n es importante y, en ese sentido, la ampliaci¨®n del puerto es tambi¨¦n crucial. Y luego la red telem¨¢tica.
P. Eso influye en la gente por el empleo, pero ?qu¨¦ hay del metro, los autobuses, los cercan¨ªas?
R. Se ha construido un continuo urbano m¨¢s o menos compacto. En el municipio de Barcelona tenemos una red, en proceso de ampliaci¨®n, que no est¨¢ mal como oferta de transporte colectivo. Donde estamos lejos es en que el de Cercan¨ªas sea un metro de verdad.
P. Los accesos se colapsan.
R. Son un term¨®metro que indica la necesidad de cambio. Ha habido pasos adelante: la integraci¨®n tarifaria, los ¨²ltimos contratos programa, pero pagamos 20 a?os de atraso en los que ha avanzado m¨¢s la urbanizaci¨®n que la dotaci¨®n de transporte.
P. ?De qui¨¦n es la culpa?
R. Un poco de todos, pero b¨¢sicamente de un Gobierno [el de la Generalitat de CiU] que no fue capaz de planificar y que hizo desaparecer la corporaci¨®n metropolitana.
P. Ahora no se ha repuesto.
R. Ha dado pasos en ese sentido. Pero es verdad, sigue siendo un reto pendiente y un objetivo para m¨ª. Queremos un gobierno metropolitano.
P. Hoy los cambios en una poblaci¨®n afectan a la de al lado. Por ejemplo, los cambios de la Gran Via en L'Hospitalet afectan a Barcelona.
R. La l¨ªnea 9 mejorar¨¢ la conexi¨®n.
P. Pero tardar¨¢ a?os y la gente ya est¨¢ all¨ª.
R. Es verdad, pero apreciemos la transformaci¨®n. Se ha pasado de la Gran Via de las chatarrer¨ªas a un entorno urbano normalizado. Es una evoluci¨®n muy positiva.
P. ?Seguir¨¢ impulsando edificios singulares?
R. La ciudad necesita de todo. Tambi¨¦n elementos simb¨®licos. Estamos en un momento de cambio. Llega la inmigraci¨®n, hay gente que envejece, con o sin autonom¨ªa. Esto exige que estemos cerca de lo que ocurre para que la realidad no estalle en forma de crisis. Significa servicios en cada lugar, pero no debe ser incompatible con elementos simb¨®licos en ciertos lugares.
P. ?Habr¨¢ tasa tur¨ªstica?
R. En este mandato no se plantear¨¢. En el futuro, se ver¨¢. El turismo es el 15% de nuestra riqueza. Y sigue subiendo. Este a?o, el 18%. Queremos un turismo urbano y cultural. El turismo de borrachera no nos interesa. Hay libertad para anunciar en Inglaterra el turismo de borrachera, pero hay que afrontarlo porque no es positivo para la ciudad. Este verano ha sido mejor.
P. ?Para el turismo o para la ciudad?
R. Sobre todo, para la ciudad. Eso de que el turista puede ir, no ya a Barcelona, sino a cualquier parte a hacer algo que no hace en su casa me repugna. Es un turismo minoritario, pero es molesto.
P. ?Qu¨¦ trazos tendr¨¢ la pol¨ªtica cultural?
R. Ahora hay que coordinar las redes de equipamientos en un acuerdo de capitalidad entre la ciudad y la Generalitat. Barcelona a veces hab¨ªa sustituido a la Generalitat.
P. ?Sustitu¨ªa o compet¨ªa?
R. Yo creo que sustitu¨ªa. Puede que en casos compitiera, pero Barcelona no quer¨ªa hacerlo. Nosotros hemos de crear las condiciones para fomentar la creaci¨®n de expresiones culturales.
P. Los Juegos, el F¨®rum. ?Barcelona necesita m¨¢s acontecimientos?
R. No estoy pensando en ninguno. No los sacralizo, pero no se puede caer en el polo opuesto. Valoro cuando se ha tenido un acontecimiento, pero Barcelona tampoco se ha hecho s¨®lo a base de grandes acontecimientos. Disiento de esa contraposici¨®n de lo global y lo local. Yo inaugur¨¦ con Clos en 2004 una biblioteca, una guarder¨ªa y un centro c¨ªvico en Bon Pastor. "Todo para el F¨®rum", dec¨ªan algunos. Pues no. No veo tesis y ant¨ªtesis. Se puede compatibilizar lo cotidiano con los saltos.
P. ?Habr¨ªa hecho el F¨®rum?
R. El F¨®rum, en infraestructuras y transformaci¨®n urbana, ha sido un paso muy importante.
P. Hay quien habla de especulaci¨®n.
R. No estoy de acuerdo. Que le pregunten al alcalde de Sant Adri¨¤ c¨®mo considera esa transformaci¨®n. Hemos acabado el litoral, todo el frente mar¨ªtimo y lo hemos hecho bien.
P. Un total de 63 locales cerrados por ruido, ?por qu¨¦ se ha tardado tanto?
R. Las batallas e instrumentos legales son los que son y generan cierta frustraci¨®n. Te vienen ganas de que alg¨²n juez viva al lado de alguna sala. Necesitamos instrumentos jur¨ªdicos para aumentar la eficacia.
P. Cite alguna mejora que el ciudadano aprecie en breve.
R. Aumentar la frecuencia de paso del metro.
P. Eso ya estaba decidido antes de su nombramiento. ?Otros ejemplos?
R. En los nueve meses tenemos que cumplir los objetivos, y hacerlo bien. Un alcalde no es un gestor, pero es una condici¨®n necesaria que haya una parte de gesti¨®n, que las filosof¨ªas se traduzcan en cosas muy tangibles y concretas.
P. Hay quien sostiene que entre los socialistas hay dos partidos, los de ESADE, que s¨®lo creen en la gesti¨®n, y los que tienen m¨¢s sensibilidad social.
R. No hay dos partidos socialistas. El d¨ªa que sea as¨ª ser¨¢ un drama.
P. ?C¨®mo ser¨¢n las relaciones con los socios de gobierno? No estaban demasiado bien...
R. Bueno, damos valor a algunas cosas, como el hecho de reafirmar un acuerdo a nueve meses de las municipales y a dos de las auton¨®micas. Tengo que agradecer las ganas de continuidad y de gobernabilidad. Estoy muy contento de renovar.
P. ?Es partidario de renovar el tripartito?
R. S¨ª. Incluso si tuvi¨¦ramos una mayor¨ªa suficiente, aunque sobre bases diferentes.
P. Y en la Generalitat, ?tambi¨¦n apuesta por el tripartito?
R. S¨ª, ha sido muy bueno. Es evidente que no todo lo que quer¨ªamos ha sido satisfecho, pero si miras lo que est¨¢ encarrilado y lo comparas con los 20 a?os anteriores...
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