Una mirada a los cl¨¢sicos

EL FESTIVAL de Alicante apuesta este a?o por la novedad absoluta y hace un repaso a lo que llamar¨ªamos el estado de la cuesti¨®n, m¨¢s all¨¢ -aunque incluya a algunos- de lo que nuestros grandes nombres j¨®venes o dejando de serlo -Rueda, Del Puerto, S¨¢nchez Verd¨², Casablancas, Torres, Sotelo, Posadas o Jos¨¦ Luis Turina, entre ellos- van construyendo de forma tan implacable como aleccionadora. Como el tiempo pasa y los siglos se suceden, en lo moderno ya hay cl¨¢sicos que no dejan de sorprender y que han sentado las bases de un hoy que sigue bebiendo de ellos como lo har¨¢ el ma?ana. No hay muchos esta vez en Alicante, es verdad, pero all¨ª estar¨¢ la fundacional Segunda Escuela de Viena con las Tres piezas de la 'Suite' l¨ªrica de Alban Berg por la Camerata de Madrid, que tambi¨¦n dar¨¢ una obra -la Obertura para cuerdas- de otra figura decisiva y con influencia m¨¢s que clara en la m¨²sica espa?ola: el polaco Witold Lutoslawski.

Se rendir¨¢ tributo al gran Gy?rgy Ligeti -el d¨ªa 28-, que se muri¨® hace poco, con su Concierto para piano en el que, bajo la direcci¨®n de Fabi¨¢n Panisello -de quien escucharemos una muestra de su excelente clase compositiva con su Concierto para viol¨ªn con Ema Alexeeva-, ser¨¢ solista Alberto Rosado. Buen momento para recordar que se trata de un pianista sensacional al que parece que s¨®lo le faltara ser de otro sitio para triunfar en toda la l¨ªnea y en todas partes. Cerrar¨¢ sesi¨®n ese mismo d¨ªa el precioso Concierto para oboe n? 1 de David del Puerto, con V¨ªctor Anchel como solista. No est¨¢ mal.