"Bush y Cheney s¨®lo intentan tener m¨¢s y m¨¢s poder"
Steve Buscemi (Nueva York, 1957) lo advierte enseguida cuando recibe a la prensa muy de ma?ana. No es que est¨¦ dormido, es que ¨¦l no es como la mayor¨ªa de los personajes que ha interpretado, nervioso, movido o intenso. "Es dif¨ªcil saber c¨®mo te ve la gente. A veces se alegran de saber que no soy tan intenso como me ven en el cine". Efectivamente, Buscemi es tranquilo, amable sin excesos, y guarda en sus ojos una fr¨ªa e intensa mirada ir¨®nica. El actor present¨® ayer en San Sebasti¨¢n, en la secci¨®n oficial del festival, la pel¨ªcula Delirious, dirigida por Tom DiCillo, en la que da vida a Les Galantine, un paparazzo fracasado en busca de una gran exclusiva que le lleve a la fama. Galantine se topa con Toby, un joven vagabundo que sue?a con ser actor. La fortuna de Toby va creciendo a medida que la inicial amistad entre ellos se va llenando de amargos resentimientos.
Rostro habitual de grandes t¨ªtulos independientes norteamericanos y actor fetiche de directores como los hermanos Coen (Fargo y El gran Lebowski) o Quentin Tarantino (Reservoir dogs o Pulp Fiction), Buscemi asegura que "el cine independiente sigue resistiendo" a pesar de la cada vez mayor fortaleza de las majors estadounidenses. Su presencia en series de televisi¨®n y en alguna pel¨ªcula comercial le sirve para poder hacer lo que de verdad le gusta, como actor y como director, que es el cine de bajo presupuesto. S¨®lo encuentra una pega a este tipo de filmes y es la rapidez con la que se tiene que trabajar -Delirious se rod¨® en apenas 25 d¨ªas-. "Yo exijo un gui¨®n bien escrito, con muchos personajes y que la historia trate de las relaciones personales. Despu¨¦s de esto, s¨®lo tienes que elegir trabajar con directores interesantes como Jim Jarmusch, Tom DiCillo o los hermanos Coen".
Vive en Nueva York, alejado de la far¨¢ndula que rodea a Hollywood -"no tengo nunca paparazzi a mi alrededor, rara vez me hacen fotos, excepto cuando estoy promocionando alguna pel¨ªcula o asisto a alg¨²n festival"- y califica de reconfortante el hecho de poder dedicarse a la interpretaci¨®n y el cine sin tener que prestar atenci¨®n a la fama. "La fama es un subproducto a?adido a esta profesi¨®n, pero que, afortunadamente, afecta s¨®lo a unos pocos, tipo Brad Pitt o Tom Cruise. La poca celebridad que yo pueda transmitir es lo que menos me gusta de mi trabajo".
Bombero hasta los a?os ochenta, Buscemi perdi¨® en los atentados del 11-S en Nueva York contra las Torres Gemelas a cinco de sus ex colegas. Por eso decidi¨® presentarse como voluntario. "Trabaj¨¦ durante cinco d¨ªas en la zona cero y estaba all¨ª el d¨ªa en que el presidente George Bush visit¨® la zona, pero no tuve ocasi¨®n de verle". "?Que qu¨¦ le dir¨ªa? Bush ha cometido muchos, muchos, muchos errores y contin¨²a cometiendo errores. El pr¨®ximo noviembre, cuando se celebren elecciones legislativas para la C¨¢mara de Representantes y el Senado en mi pa¨ªs, lo ¨²nico que espero es que, independientemente de que ganen los dem¨®cratas o los republicanos, sean personas responsables que busquen cambios. Tenemos un presidente y un vicepresidente que s¨®lo intentan tener m¨¢s y m¨¢s poder, y eso no es bueno. Lamentablemente, van a estar dos a?os m¨¢s", enfatiz¨®.
Su carrera como director (Trees loung, Animal factory) la retomar¨¢ en breve, con Interview, un remake del filme del mismo t¨ªtulo que Theo van Gogh, director holand¨¦s asesinado en noviembre del a?o pasado, realiz¨® en 2003."La fama es un subproducto a?adido a esta profesi¨®n que s¨®lo afecta a unos pocos "
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