Angola
Con profunda sorpresa e indignaci¨®n, la Embajada de la Rep¨²blica de Angola en el Reino de Espa?a tom¨® conocimiento del art¨ªculo titulado Suiza devuelve fondos robados por los tiranos, publicado el pasado d¨ªa 19 de octubre, en el cual el presidente de Angola es tratado de forma difamatoria y ultrajante, al ser su nombre incluido en una lista de "d¨¦spotas" que tendr¨ªan dinero depositado en bancos suizos.
Los responsables de la Direcci¨®n de Desarrollo y Cooperaci¨®n de la Confederaci¨®n Helv¨¦tica, por su lado, manifestaron su sorpresa por la alusi¨®n hecha al presidente de la Rep¨²blica de Angola, Jos¨¦ Eduardo dos Santos. Angola ni siquiera fue objeto de discusi¨®n en la reuni¨®n mantenida en Lausana entre los representantes de entidades financieras y los pa¨ªses perjudicados, que motiv¨® la noticia en el peri¨®dico suizo Le Temps el 11 de octubre.
La Embajada de Angola reafirma, contundentemente, que el presidente de la Rep¨²blica no tiene ni nunca tuvo dinero depositado en bancos suizos, ni cualquier otro patrimonio en Suiza. Esta Embajada recuerda que el presidente de Angola no fue citado en ning¨²n momento en la investigaci¨®n judicial instaurada por las autoridades judiciales suizas como titular de cuentas en bancos helv¨¦ticos. El Gobierno de Angola declar¨® que los recursos financieros retenidos en bancos suizos eran propiedad del Estado soberano de Angola.
Tampoco es cierto que el dinero perteneciente a la Rep¨²blica de Angola sea de un importe de 100 millones de d¨®lares.
La medida adoptada por el Estado angole?o result¨® de la legitimidad que le fue conferida por el derecho internacional, incluyendo resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que atribuyeron al Gobierno de Angola 1a capacidad de ejercer el derecho de defender por todos los medios a su alcance la soberan¨ªa y la integridad territorial del pa¨ªs.
Es una paradoja establecer comparaci¨®n entre un d¨¦spota y un estadista como el presidente de Angola que, habiendo restablecido la paz, la reconciliaci¨®n nacional y la estabilidad en el pa¨ªs, realiz¨® elecciones multipartidistas y que dirige un Estado donde los poderes legislativo, judicial y ejecutivo funcionan dentro de las normas de un Estado democr¨¢tico de derecho.
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