Viaje truncado

Apuesta de riesgo en la apertura del Festival de ?pera de Bolsillo y Nuevas Creaciones. El estreno de una ¨®pera sobre los atentados terroristas de Madrid del 11 de marzo de 2004, del compositor dan¨¦s Lars Graugaard, gener¨® una mezcla de expectaci¨®n, inquietud y temor por lo delicado del tema. El libreto, obra de Toni Montesinos, intenta plasmar la angustia y el desconcierto de una v¨ªctima del 11-M que no sabe que ha muerto y que, a lo largo de 60 minutos, cobra conciencia de su estado y finalmente reclama a los vivos que expliquen lo que pas¨® por encima de la manipulaci¨®n pol¨ªtica y la intoxicaci¨®n informativa. No es, desde luego, un tema f¨¢cil de llevar a escena. Y, en el intento, fracasan los autores de la obra, aunque los int¨¦rpretes hagan todo lo humanamente posible por defenderla.

La idea, de Graugaard y el compositor y cineasta Claudio Zuli¨¢n, abre muchas posibilidades, pero no cuaja en un flojo libreto de Toni Montesinos. El tr¨¢nsito de un pasajero fallecido, desde la soledad del desconcierto a la asunci¨®n de su propia muerte, se convierte en un mon¨®tono desfile de voces y personajes -un pol¨ªtico del PP que justifica la ocultaci¨®n de informaci¨®n, un terrorista del 11-M, una v¨ªctima iraqu¨ª de la invasi¨®n americana, y hasta George Bush justificando las invasiones de Afganist¨¢n e Irak- que pone el acento en la denuncia de la manipulaci¨®n pol¨ªtica.

La electr¨®nica ofrece m¨²ltiples registros para explorar nuevos caminos expresivos en el tratamiento de la voz y Graugaard, que se lanza al empe?o con buenas intenciones, logra algunos contrastes sonoros de poderoso efecto, pero se queda en el mucho m¨¢s fr¨ªo terreno de la experimentaci¨®n, m¨¢s cerca de la ambientaci¨®n sonora que de un discurso musical capaz de comunicar emociones.

El trabajo del contratenor Oriol Ros¨¦s es, en cambio, para quitarse el sombrero: como cantante y actor, se deja la piel en el escenario. Muy digna la factura teatral del montaje de Rafel Duran.