Haniya ofrece su dimisi¨®n si se pone fin al bloqueo econ¨®mico
Ham¨¢s insiste en que no reconocer¨¢ a Israel como le exige EE UU
Ismail Haniya comienza a preparar a sus fieles de Ham¨¢s para lo que parece inevitable: el colapso de su Gobierno. Ayer dijo que no ser¨ªa un obst¨¢culo para el levantamiento del embargo que padece la Autoridad Palestina desde marzo. "El asedio continuar¨¢ mientras no se cambie al primer ministro. Cuando se trata de elegir entre un primer ministro y el fin del bloqueo y del sufrimiento, prefiero que se termine el embargo", declar¨®.
El problema no es Haniya. El embrollo es c¨®mo lograr un Ejecutivo de unidad nacional que sea digerible para la comunidad internacional. Ham¨¢s repite que no reconocer¨¢ Israel, con lo que se presenta muy complicado que ese Gobierno sea aceptado por los donantes, especialmente por Estados Unidos y la Uni¨®n Europea. Un dirigente islamista se?al¨® que se han presentado al presidente, Mahmud Abbas, los nombres de cuatro personas para reemplazar a Haniya, todos ellos residentes en la franja de Gaza.
Han sido continuas desde hace meses las afirmaciones de dirigentes pol¨ªticos de Ham¨¢s y Fatah dando por hecho el Gobierno de unidad. Nunca se ha concretado. Haniya destac¨® ayer que en tres semanas estar¨¢ concluido el acuerdo. Ahora, la presi¨®n sobre la empobrecida poblaci¨®n palestina es insostenible. Y otro detalle abona la percepci¨®n de que el pacto no tardar¨¢ o se ir¨¢ definitivamente al traste: Jaled Meshal, l¨ªder pol¨ªtico de Ham¨¢s en el exilio de Damasco, convers¨® por tel¨¦fono con Abbas para fijar una cita en Egipto. La discusi¨®n se ha situado al m¨¢ximo nivel. Con todo, no puede descartarse que resten semanas para la aprobaci¨®n del nuevo Gobierno, porque Ham¨¢s insiste en que antes deben ser liberados los m¨¢s de veinte ministros y diputados islamistas encarcelados en Israel. Y eso depende a su vez de la negociaci¨®n para liberar al soldado jud¨ªo en manos de Ham¨¢s desde junio.
Por si faltaran obst¨¢culos, la precariedad econ¨®mica, las redadas diarias -muchas decenas de hombres de una tacada- y los controles militares sit¨²an a la poblaci¨®n al borde de lo soportable. La matanza de 19 miembros de una familia en Beit Hanun (Gaza), el mi¨¦rcoles, colea. Ayer muri¨® otro hombre v¨ªctima de las heridas mientras las manifestaciones se extendieron, tras el rezo de los viernes en las mezquitas, a numerosas ciudades de los territorios ocupados y a las habitadas por ¨¢rabes en Israel. Tambi¨¦n en Egipto y Jordania protestaron miles de personas. La agencia de la ONU para los refugiados comenz¨® a repartir alimentos en Beit Hanun, cuyas infraestructuras han sido arrasadas por los soldados hebreos.
"La explicaci¨®n por parte de las autoridades israel¨ªes de que ese acto criminal gratuito fue un error es inaceptable", declar¨® el relator de Naciones Unidas sobre el derecho a la vivienda digna, Millon Kothary. "El bombardeo de viviendas y el consiguiente asesinato de civiles fueron una t¨¢ctica militar premeditada para imponer un castigo colectivo a la poblaci¨®n palestina", a?adi¨®.
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