El 'annus horribilis' de FGV
Una cadena de adversidades asedia a Ferrocarrils de la Generalitat desde la tragedia de julio, que se cobr¨® 43 vidas
Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) realiza este a?o el peor de sus trayectos desde su constituci¨®n como empresa p¨²blica en el a?o 1986, tras la culminaci¨®n del proceso de transferencias a la Comunidad Valenciana de los servicios explotados por Ferrocarriles de V¨ªa Estrecha del Estado (Feve) en su territorio. Una serie de acontecimientos, alguno de ellos con consecuencias tr¨¢gicas, han quebrado su rutina.
La m¨¢s reciente tuvo lugar el pasado domingo en Valencia, cuando la ca¨ªda de un enganche de la catenaria de la futura l¨ªnea del tranv¨ªa T-2 provoc¨® el desplome de 800 metros de cable sobre el trazado de las v¨ªas, desde el inicio de la avenida Alfahuir con Duque de Mandas hasta el cruce con la avenida San Vicente de Pa¨²l, junto al estadio del Levante UD.
La linea 1 de metro ha sufrido m¨¢s de diez aver¨ªas despu¨¦s del accidente
Por suerte, el desplome de la catenaria, que todav¨ªa no transportaba corriente el¨¦ctrica, no provoc¨® da?os personales, aunque aboll¨® los coches de numerosos veh¨ªculos estacionados por la zona que transcurre la l¨ªnea T-2, cuya inauguraci¨®n est¨¢ prevista para el primer semestre de 2007, en plena campa?a electoral. Seg¨²n indic¨® uno de los responsables de la UTE que gestiona la obra, la rotura del enganche pudo tener su origen en una "insuficiente sujeci¨®n" de la catenaria. Ayer, el portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Socialista, Andr¨¦s Perell¨®, asegur¨® sin embargo que esta "nueva aver¨ªa", es "una muestra m¨¢s del mal estado en el que se encuentra el transporte p¨²blico en Valencia" como consecuencia "de la mala gesti¨®n de FGV".
El episodio del domingo se produjo apenas una semana despu¨¦s de que un autob¨²s de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) y un tranv¨ªa hubiesen colisionado en la calle Florista, donde s¨®lo est¨¢ permitida la circulaci¨®n de transporte p¨²blico y en la que el tranv¨ªa y el autob¨²s comparten espacio. El siniestro se produjo alrededor de la cuatro de la tarde, cuando el tranv¨ªa de la l¨ªnea 4 colision¨® por detr¨¢s con el autob¨²s de la l¨ªnea 28 de la EMT y lo empuj¨® unos 40 metros hacia delante. El accidente se sald¨® con 23 heridos leves. El concejal socialista del Ayuntamiento de Valencia Mat¨ªas Alonso hab¨ªa interpuesto dos a?os antes una moci¨®n en la que denunciaba que era un peligro que el autob¨²s y el tranv¨ªa compartieran la plataforma. El concejal de Circulaci¨®n y Transportes, Alfonso Novo, del PP, apunt¨® como posible causa "la diferencia en el tiempo de frenada de los dos veh¨ªculos".
La investigaci¨®n que FGV abri¨® a ra¨ªz del accidente descart¨® el exceso de velocidad y el fallo en el sistema de frenos del tranv¨ªa como posibles causas del siniestro, se?alando hacia el error humano como desencadenante del choque. La lectura de la caja negra desvel¨® que el tranv¨ªa circulaba a una velocidad de 25 kil¨®metros por hora cuando colision¨®. Seg¨²n la investigaci¨®n, el tranv¨ªa fren¨® cuando estaba a siete metros del autob¨²s "que redujo o mantuvo una velocidad inferior a la prevista por el maquinista".
Pese a ser un accidente con da?os personales leves, el p¨¢nico cundi¨® de nuevo entre los usuarios de las l¨ªneas de FGV. Los ecos de la tragedia desencadenada en el accidente de la l¨ªnea 1 del metro el 3 de julio eran muy recientes. En aquel siniestro, considerado el accidente de metro m¨¢s grave ocurrido en Espa?a, murieron 43 pasajeros como consecuencia del descarrilamiento del convoy en una curva entre las paradas de Plaza de Espa?a y la de Jes¨²s. El tren, que ten¨ªa 18 a?os de antig¨¹edad, hab¨ªa salido de la estaci¨®n de Plaza de Espa?a 34 segundos antes y, en ese tiempo, el acelerador estuvo activado al m¨¢ximo. Lleg¨® a la curva a 80 por hora, el doble de lo permitido en esa zona en la que no exist¨ªa un mecanismo de seguridad para frenar el tren. El conductor s¨®lo accion¨® el freno despu¨¦s del accidente. El Gobierno valenciano insisti¨® en que el siniestro fue consecuencia de "un error humano" del maquinista originado por "razones inexplicables", lo que hizo que el tren circulara a 80 kil¨®metros por hora, cuando el m¨¢ximo es 40.
Un maquinista hab¨ªa denunciado en diciembre de 2003 por escrito ante la Generalitat el elevado riesgo existente en el tramo entre las estaciones Plaza de Espa?a y Jes¨²s en caso de "velocidad excesiva". FGV se limit¨® entonces a colocar en el lugar una se?al que proh¨ªbe circular a m¨¢s de 40 kil¨®metros por hora.
Seg¨²n el portavoz del Consell, Vicente Rambla, se trat¨® de "un error como los que se producen todos los d¨ªas en las carreteras". Sin embargo, en una encuesta del Instituto Opina para EL PA?S publicada el pasado octubre, el 58,4% de los consultados consider¨® que este accidente era evitable, una opini¨®n mayoritaria incluso entre los votantes del PP, que en un 45,9% manten¨ªa que se habr¨ªa podido evitar.
Desde aquel fat¨ªdico siniestro, las aver¨ªas registradas en la l¨ªnea 1 han pasado de la decena, lo que ha llevado a los alcaldes socialistas de los pueblos por los que transcurre la l¨ªnea a efectuar varias protestas. El pasado 3 de diciembre, cinco meses despu¨¦s del accidente, familiares, heridos y usuarios del metro de Valencia se manifestaron en Torrent para exigir que el Consell y la empresa p¨²blica FGV "den la cara" y asuman responsabilidades por el descarrilamiento del convoy de la l¨ªnea 1. Asimismo, los tres centenares de participantes en la protesta exigieron "el cese inmediato" del consejero de Infraestructuras, Jos¨¦ Ram¨®n Garc¨ªa Ant¨®n, y de la gerente de FGV, Marisa Gracia.
CATENARIA AL SUELO
Unos 800 metros de cable de la futura l¨ªnea de tranv¨ªa T-2 se desplomaron el domingo por la tarde sobre dos calles al soltarse un enganche de la catenaria.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.