Por parejas

Dos im¨¢genes protagonizando los informativos de ayer al mediod¨ªa, las dos con sus parejas. Tele 5 eligi¨® para abrir los suyos la del gordo, con ese ni?o y esa ni?a felices de haber cantado tan pronto el n¨²mero 20.297. Noticias Cuatro, al contrario, abri¨® con la del l¨ªder de la oposici¨®n estrechando secamente la mano de Zapatero. Fuimos informados de que estuvieron hora y media encerrados, lo cual no est¨¢ nada mal para una pareja que si te he visto no me acuerdo. Pero se queda corto en relaci¨®n a lo que han pasado juntas (tres meses y medio eternos) Naiala y Laura, que el jueves por la noche tambi¨¦n largaron lo suyo en la final¨ªsima de Gran Hermano (Tele 5). Ah¨ª cant¨® el premio la m¨¢s delgada, Naiala, dando saltos en el jard¨ªn de la finca de Guadalix y recibiendo una lluvia de confeti que en algunos planos parec¨ªan billetes de curso legal. Del encierro de La Moncloa destaco las ara?as, y no crea el lector que me estoy refiriendo a esos dos barones del PP cuya tela enredadora todos conocemos; en los segundos en que Zapatero y Rajoy posaron para la foto de rigor reluc¨ªan detr¨¢s de ellos, en el vest¨ªbulo del palacio, unas inmensas l¨¢mparas de techo que m¨¢s que adorno navide?o parec¨ªan braseros el¨¦ctricos contra el fr¨ªo ambiente. Con lo astron¨®mica que se ha puesto la luz. Rajoy dijo al salir que se iba "sin certidumbres", pero la vicepresidenta asegur¨® en la rueda de prensa que se le hab¨ªan dado todas las que quer¨ªa y m¨¢s. Estas parejas modernas tan mal avenidas.

?Les dio tiempo a hablar de la memoria hist¨®rica? De lo que no hay duda es del gran fil¨®n que TVE ha sacado en las ¨²ltimas semanas, y ¨¦sta en particular, de su propia memoria. Tres noches seguidas de largos programas y muchas im¨¢genes memorables, encabezadas seg¨²n la votaci¨®n de los espectadores por las del asesinato de Miguel ?ngel Blanco. Me dio un vuelco el coraz¨®n verme en la final dentro de una galer¨ªa de grandes broncas ante la c¨¢mara. Casi me hab¨ªa olvidado, pero ah¨ª estaba el cafre que poco despu¨¦s me abofete¨® en el plat¨® de Drag¨®. El cafre y yo, gracias a Dios, no ¨¦ramos pareja.