De la prehistoria al futuro en un abrir y cerrar de ojos
S¨®lo hace falta echar la vista atr¨¢s y adentrarnos en el t¨²nel del tiempo para comprobar c¨®mo ha cambiado todo tanto, en tan poco tiempo... Los avances tecnol¨®gicos en el campo del ocio nos han catapultado de la estable y encorsetada prehistoria anal¨®gica a un competitivo, apasionante y abierto futuro digital, en tan s¨®lo treinta a?os.
El Walkman, inventado por Sony en 1979, revolucion¨® la forma de escuchar m¨²sica. Supli¨® una gran laguna para los que quer¨ªan disfrutar de sus grupos favoritos all¨¢ donde fueran. Y las salas gigantescas de cine, con pausadas carteleras, eran la ¨²nica opci¨®n para ver los estrenos de Hollywood, con unos presupuestos que arrancar¨ªan ahora carcajadas a m¨¢s de uno.
El futuro del cine digital, que ya es una realidad en algunas salas espa?olas (una revoluci¨®n para la distribuci¨®n y costes), apunta, apoyado en la banda ancha, al cine a la carta.
El Walkman, inventado por Sony en 1979, revolucion¨® la forma de escuchar m¨²sica. Supli¨® una gran laguna para los que quer¨ªan disfrutar de sus grupos favoritos all¨¢ donde fueran.
Formatos como el CD y el DVD cambiaron para siempre la industria cinematogr¨¢fica y musical, estableciendo nuevas pautas de consumo en el mundo del entretenimiento. Esas tecnolog¨ªas, junto con los nuevos equipos reproductores, iniciaron el camino hacia la futura recreaci¨®n de una sala de conciertos o de un cine en el propio domicilio.
Los equipos 5.1 han generalizado la tendencia hacia el Cine en Casa. Nos encontramos a principios del siglo XXI, en la sociedad del ocio planificado. Ya no es tan importante la cantidad, como la calidad de los momentos de disfrute que gozamos.
Indudablemente vivimos en una cultura mediterr¨¢nea, en la que relacionarnos con los dem¨¢s y salir (gracias a la bonanza del tiempo a lo largo de casi todo el a?o) son elementos clave. Ir al cine con la familia o los amigos es casi un ritual: escoger la pel¨ªcula, comprar palomitas y refrescos, ver los trailers antes de que empiece el estreno... Pero a veces las condiciones no son las id¨®neas para realizar la peregrinaci¨®n al cine; ni?os peque?os o el cansancio despu¨¦s de una dura jornada laboral nos dejan poco tiempo para los dem¨¢s quehaceres.
En ese momento entran en escena los nuevos sistemas de cine en casa. Porque el consumidor es ante todo exigente y est¨¢ bien informado: no quiere renunciar a la calidad de imagen ni de sonido. Los actuales equipos satisfacen todas las necesidades: desde pantallas LCD de 70 pulgadas, apoyadas por equipos 5.1 por componentes (cuatro altavoces m¨¢s subwoofer, reproductor, decodificador y amplificador) en amplios salones o habitaciones preparadas especialmente para ver pel¨ªculas, hasta sistemas todo en uno con altavoces 2.1 (simulan con dos altavoces y el subwoofer el sonido envolvente 5.1) para facilitar el trabajo al n¨²mero cada vez mayor de espa?oles que habitan en viviendas de entre 40 y 60 metros cuadrados, para los cuales el espacio es un aut¨¦ntico lujo.
En lo referente al consumo musical, los h¨¢bitos se han ramificado en dos direcciones opuestas, pero del todo complementarias.
Por un lado el MP3 se ha adue?ado de la m¨²sica de consumo propio, que te acompa?a all¨¢ donde vayas (apoyado y amplificado por el efecto de las descargas de Internet). Ritmos como el pop, el rock o el hip-hop triunfan en los reproductores de los j¨®venes de todo el planeta... Los reproductores de las diferentes marcas han llegado a tal capacidad (se pueden almacenar m¨¢s de diez mil canciones) que los MP3 se han convertido en aut¨¦nticas discotecas musicales ambulantes.
Paralelamente a este aumento de gigas en los reproductores, los consumidores han demandado dise?os rompedores y atractivos, como reflejo de su personalidad. Equipos de diferentes colores y formas (cil¨ªndricas, redondas, cuadradas, recreando formas de animales, s¨ªmbolos religiosos...) a?aden al reproductor ese plus de accesorio para vestir.
Pero, por otro lado, hay quien disfruta de la m¨²sica de forma m¨¢s pausada, quien escucha piezas de blues, jazz, cl¨¢sica o gospel y se pierde entre matices... Para estos consumidores ha ido como anillo al dedo el Super Audio CD, para recrear de forma fidedigna el sonido 5.1, aplicado al mundo de la m¨²sica. Con esta tecnolog¨ªa, cada susurro de voz, cada agudo o sonido tenue sonar¨¢ como si el grupo musical o el cantante hubieran traspasado los altavoces y estuvieran tocando en directo, en el sal¨®n de casa.
La tecnolog¨ªa evoluciona r¨¢pido, a veces demasiado... De un consumidor inexperto, que era arrastrado por los m¨²ltiples cambios tecnol¨®gicos e incesante aparici¨®n de nuevos productos, hemos pasado a un consumidor que sabe lo que quiere y cu¨¢les son sus necesidades. Es un consumidor que pide lo que quiere sin tapujos. Y s¨®lo escuchando atentamente a los compradores sabremos c¨®mo hacer que la tecnolog¨ªa evolucione de forma ¨²til. De esta forma fabricantes y consumidores funcionar¨¢n como dos motores de un t¨¢ndem perfecto: se alimentan el uno al otro, para poder avanzar y funcionar ¨®ptimamente.
Nos encontramos en un momento crucial: los contenidos ocupan cada vez m¨¢s espacio (v¨ªdeos, fotos, archivos, juegos...), la Alta Definici¨®n de 1.080 l¨ªneas ha irrumpido con fuerza y aparecen nuevas prestaciones interactivas; la televisi¨®n anal¨®gica da sus ¨²ltimos coletazos antes de su apag¨®n definitivo... La soluci¨®n a esta nueva situaci¨®n viene de la mano de los sucesores del DVD, como es el caso del Blu-ray Disc. Este nuevo sistema de almacenamiento masivo de disco ¨®ptico tiene una capacidad y calidad cinco veces superior a un DVD convencional.
Un caso paradigm¨¢tico, que refleja este importante momento de evoluci¨®n, es el gran crecimiento que ha tenido el mercado de televisores LCD de grandes pulgadas (40" y superiores). Los televisores Full HD (con dos millones de puntos) son el escaparate perfecto para disfrutar de las grabaciones en alta definici¨®n, que ya es el presente y va a erigirse como el futuro de la imagen.
En el pasado se libraron batallas de formatos, que divid¨ªan al mercado y hac¨ªan que el consumidor tuviera que dar un salto al vac¨ªo sin saber las consecuencias. Actualmente el panorama ha cambiado. Hay un gran n¨²mero de empresas de diversos sectores que apuestan, de forma clara, por la alta definici¨®n y el Blu-ray. Grandes filmes de los ¨²ltimos a?os, como Crash, Syriana, Click o Underworld Evolution, se pueden disfrutar ya en alta definici¨®n y tambi¨¦n los amantes de la m¨²sica podr¨¢n ver a Bruce Springsteen o a Destiny's Child m¨¢s esplendorosos que nunca. Este formato tiene el apoyo de pr¨¢cticamente el 90% de los fabricantes de la electr¨®nica de consumo, y tambi¨¦n del sector inform¨¢tico, los estudios de Hollywood y empresas del mundo de la industria musical, as¨ª como de los videojuegos. Tal cantidad de apoyos permiten que el consumidor disponga de un formato de futuro, con total tranquilidad y sin saltos al vac¨ªo.
Aunque adelantemos las tendencias en un futuro pr¨®ximo, ineludiblemente la rueda del desarrollo tecnol¨®gico no va a dejar de girar una y otra vez. El futuro del cine digital, que ya es una realidad en algunas salas de cine en Espa?a (y que supone una revoluci¨®n a nivel de distribuci¨®n de contenidos, flexibilizando, mejorando y abaratando procesos), apoyado por la banda ancha, apunta al cine a la carta. As¨ª, la industria va a disponer de otra fuente de ingresos en las pel¨ªculas que los usuarios soliciten desde sus casas, como complemento perfecto a las salas de cine y las cadenas de cable, TDT o v¨ªa sat¨¦lite.
El futuro de la m¨²sica pasar¨¢ por sumergirse en la atm¨®sfera de un concierto, pero sentado c¨®modamente en el sof¨¢ de la sala de estar... La industria del cine y de la m¨²sica son un claro exponente de la convergencia y concentraci¨®n de tecnolog¨ªas en el ¨¢mbito dom¨¦stico.
De las ya cl¨¢sicas cadenas musicales por componentes y televisores de tubo cat¨®dico (en los que ambas tecnolog¨ªas iban por separado), hemos pasado a equipos 5.1 de Cine en Casa ayudados por impresionantes pantallas de LCD de 40 y m¨¢s pulgadas en los que ambas tecnolog¨ªas interact¨²an y se combinan para ofrecer al consumidor las ventajas de la Alta Definici¨®n. En esta nueva era, la convergencia de productos permitir¨¢ ofrecer la m¨¢xima calidad. La calidad que demanda el consumidor exigente que vivir¨¢ este apasionante futuro digital.
Pedro V. Navarrete, director general de Sony Espa?a S.A.
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