"?Pero hombre, no corras tanto!"

El ex internacional alem¨¢n hoy seleccionador de Bahrein, Hans-Peter Briegel, desminti¨® a medias en el Tagesspiegel de Berl¨ªn sus declaraciones en las que reconoc¨ªa el tongo en el partido Alemania-Austria del Mundial de Espa?a 82. Un ex internacional austriaco que jug¨® aquel partido, el extremo Walter Schachner, ahora entrenador del equipo alem¨¢n de Segunda Divisi¨®n M¨²nich 1860, reconoci¨® en el Diario S¨¹ddeutsche Zeitung que en el descanso hubo un acuerdo entre los jugadores para terminar el partido con el 1-0 a favor de Alemania que clasificaba a los dos equipos y dejaba fuera a Argelia.

Asustado de su propio coraje y del esc¨¢ndalo provocado por sus declaraciones, Briegel asegura que no dijo que hubiese acuerdo previo en el partido que ha pasado a la historia del f¨²tbol alem¨¢n como "la verg¨¹enza de Gij¨®n". Precisa ahora Briegel: "Cuando el partido estaba 1-0

[a los 11 minutos de partido] hubo una especie de pacto de no agresi¨®n porque los dos equipos sab¨ªan que estaban clasificados. Fue como un acuerdo t¨¢cito en un momento. Una constelaci¨®n as¨ª se produce en muchos deportes. De acuerdos hablados no s¨¦ nada".

Las declaraciones de Briegel desencadenaron lo que el sensacionalista Bild Zeitung calific¨® en un titular de "gigantesca tormenta en Alemania por la verg¨¹enza de Gij¨®n". Varios peri¨®dicos realizaron encuestas entre los futbolistas alemanes que jugaron aquel simulacro de partido. El portero Toni Schumacher, uno de los que m¨¢s se distingui¨® por su conducta al despedirse con un tremendo corte de mangas del p¨²blico que abucheaba y lanzar luego agua desde el balc¨®n del hotel sobre los argelinos indignados, atac¨® a Briegel: "No s¨¦ qu¨¦ le puede haber pasado. Quiz¨¢s tom¨® alguna copa de m¨¢s". El ex madridista Paul Breitner no quiere ni o¨ªr hablar del tema: "Ya no me interesa".

El tongo lo ha confirmado el austriaco Schachner, que jug¨® 64 partidos con la selecci¨®n de su pa¨ªs en los que marc¨® 23 goles. Schachner entrena al M¨²nich 1860 y declar¨® al S¨¹ddeutsche Zeitung que ¨¦l no se enter¨® en el descanso del pacto para mantener el 1-0: "Yo fui el ¨²nico que no se enter¨®. En el descanso hubo entre los jugadores el acuerdo de mantener el 1-0, pero de alguna forma yo no me enter¨¦". Por eso Schachner declara que en el segundo tiempo no entend¨ªa lo que ocurr¨ªa sobre todo cuando el delantero Hans Krankl, que hab¨ªa jugado en el Barcelona, "en vez de en punta, se coloc¨® de l¨ªbero". A Schachner le marcaba precisamente Briegel. Relata ahora Schachner que Briegel le dec¨ªa: "Pero hombre, no corras tanto". A?ade Schachner que, al ver que ¨¦l no estaba por la labor, sus compa?eros optaron por no pasarle m¨¢s el bal¨®n "y yo estaba desesperado".

Las declaraciones de Briegel han reavivado un tema de hace casi 25 a?os. Los peri¨®dicos reviven los calificativos de entonces. Para Bild, se trata de "la victoria m¨¢s vergonzosa del f¨²tbol alem¨¢n" y "con acuerdo o sin ¨¦l aquel partido quedar¨¢ para siempre como una verg¨¹enza".