"M¨¦xico corr¨ªa el riesgo de ser dominado por el crimen"
Dos meses despu¨¦s de su toma de posesi¨®n, y en v¨ªsperas de su primer viaje a Europa, Espa?a incluida, el nuevo presidente de M¨¦xico, en una entrevista con EL PA?S, hace balance de su gesti¨®n y de sus proyectos, que incluyen la lucha contra el narcotr¨¢fico. Y como prueba de ello, ayer M¨¦xico extradit¨® a EE UU a 11 importantes capos de la droga.
"M¨¦xico no puede dar solo la batalla contra el narcotr¨¢fico. Necesitamos colaboraci¨®n de Estados Unidos porque es corresponsable"
"Queremos hablar con el Gobierno de Zapatero de la importancia de actuar de manera coordinada en Iberoam¨¦rica"
"Las cifras de ejecuciones del crimen organizado en M¨¦xico estaban superando las alcanzadas por Colombia en un momento cr¨ªtico"
"Si la corrupci¨®n permea la autoridad y, en parte, los cuerpos policiales locales, muy poco podemos hacer"
"Los monopolios, p¨²blicos o privados, son siempre frenos a la competencia y al bienestar de consumidores y productores"
"La vuelta a reg¨ªmenes autoritarios o a presidentes vitalicios debe preocupar a todo el mundo democr¨¢tico"
Felipe Calder¨®n Hinojosa inicia esta semana su primer viaje a Europa como presidente de M¨¦xico. La gira incluye Alemania, Suiza (Davos, sede del Foro Econ¨®mico Mundial), Reino Unido y Espa?a, adonde llegar¨¢ el pr¨®ximo 29 de enero. En la primera entrevista que concede a un medio espa?ol desde su toma de posesi¨®n el 1 de diciembre, Calder¨®n, de 44 a?os, abogado y miembro del conservador Partido de Acci¨®n Nacional (PAN), est¨¢ m¨¢s relajado despu¨¦s de un turbulento y prolongado proceso electoral, del que sali¨® victorioso por un estrecho margen de votos frente al candidato de la izquierda, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. "Ha quedado demostrada la solidez de las instituciones democr¨¢ticas de M¨¦xico", afirma en su despacho de la residencia presidencial de Los Pinos.
Pregunta. Los nuevos presidentes buscan dar alg¨²n golpe de efecto en los primeros compases de su Gobierno. ?El suyo ha sido la ofensiva contra el crimen organizado y el narcotr¨¢fico?
Respuesta. La delincuencia organizada estaba quedando fuera de control y generaba una aut¨¦ntica zozobra en algunas regiones del pa¨ªs, como en Michoac¨¢n. Hemos puesto manos a la obra para recuperar el control territorial y tener una presencia muy cercana a la poblaci¨®n. La gente en esos lugares lo ha recibido bien.
P. Usted habla de recuperaci¨®n territorial, pero muchos mexicanos temen que dure mientras los efectivos militares y policiales permanezcan en las zonas conflictivas. Habitantes de Michoac¨¢n y Tijuana se quejan de que los jefes de las bandas criminales se escaparon antes de la llegada de las fuerzas de seguridad.
R. En general, tienen una gran movilidad. Estamos dise?ando esquemas que nos permiten reorganizar las polic¨ªas locales. ?ste es el objetivo, obtener la colaboraci¨®n de los gobiernos locales y municipales para que hagan su parte; y su parte implica que polic¨ªas renovadas o con una mayor supervisi¨®n y entrenamiento en el ¨¢mbito local sean las que tomen el control de cada lugar. Los operativos tienen una fase muy intensa dedicada a erradicar plantaciones de droga: m¨¢s de 3.000 de marihuana y amapola destruidas en Michoac¨¢n. Lo mismo hacemos en Guerrero, en una cantidad muy superior.
P. ?Corre el riesgo M¨¦xico de convertirse en una nueva Colombia, por el enorme poder de los carteles de narcotraficantes?
R. Ten¨ªamos un enorme riesgo de presencia intolerable del crimen organizado. Las cifras de ejecuciones estaban superando las alcanzadas por Colombia en un momento cr¨ªtico. Tenemos mucho que hacer. Afortunadamente, en el caso de Michoac¨¢n, los asesinatos con violencia vinculados al narcotr¨¢fico se han reducido casi en un 40% en comparaci¨®n con los seis meses anteriores a nuestra presencia all¨ª, y casi en un 70% en relaci¨®n con el ¨²ltimo mes, que fue verdaderamente cr¨ªtico. Hab¨ªa un riesgo de que M¨¦xico se convirtiera, en Am¨¦rica Latina, en un pa¨ªs dominado por la inseguridad y la violencia derivada de la actuaci¨®n de los grupos criminales.
P. El Ej¨¦rcito mexicano est¨¢ directamente implicado en la lucha contra el narcotr¨¢fico. Si la corrupci¨®n del crimen organizado penetra en las filas militares, como ha ocurrido en buena parte de los cuerpos de seguridad, habr¨¢ alcanzado el ¨²ltimo eslab¨®n de la defensa y seguridad del Estado. ?Asume este riesgo?
R. Tiene sus riesgos, y por eso la presencia del Ej¨¦rcito est¨¢ dise?ada para ser transitoria y pr¨¢cticamente orientada a la erradicaci¨®n de plantaciones ilegales. Nuestro esfuerzo en la fase final de los operativos es delegar de nuevo el control de la situaci¨®n en las autoridades locales, pero con una presencia renovada y un cuerpo policial fortalecido, supervisado desde la Secretar¨ªa de Seguridad P¨²blica.
P. Hay casos, como el del alcalde de Tijuana, en que se sospecha de v¨ªnculos con el narcotr¨¢fico de las autoridades locales.
R. La verdad es que no se podr¨¢n resolver los problemas de seguridad si no hay una colaboraci¨®n m¨ªnima y un compromiso claro en materia de seguridad. Si la corrupci¨®n permea la autoridad misma y, en parte, los cuerpos policiales locales, muy poco podemos hacer. Por eso hemos sido dr¨¢sticos incluso en levantar todos los archivos, requisar todas las armas de la polic¨ªa local y hacer un registro de bal¨ªstica, que nos permitir¨¢ perfeccionar la labor de inteligencia y de investigaci¨®n criminal.
P. ?Hace falta una mayor colaboraci¨®n de Estados Unidos en el combate contra el narcotr¨¢fico en M¨¦xico?
R. En una ecuaci¨®n muy elemental, no se puede lograr una reducci¨®n significativa en la oferta de droga si no hay una reducci¨®n significativa en la demanda. La sociedad de los Estados Unidos, por desgracia, es la mayor consumidora de droga en el mundo. Eso genera en M¨¦xico este fen¨®meno de tr¨¢fico de drogas tan intenso. Es un tema muy delicado y muy sensible, pero es una batalla que no puede ni debe darla M¨¦xico solo, y que requiere colaboraci¨®n y corresponsabilidad de EE UU. [Ayer, el Gobierno mexicano extradit¨® a Estados Unidos a 11 importantes capos del narcotr¨¢fico, buscados por la justicia estadounidense, entre ellos Osiel C¨¢rdenas, jefe del cartel del Golfo, y H¨¦ctor El G¨¹ero, del cartel de Sinaloa. El embajador de EE UU en M¨¦xico, Antonio Garza, calific¨® la medida como "suceso monumental e hist¨®rico en la batalla de nuestras naciones contra narcotraficantes y criminales"].
P. ?C¨®mo ve la relaci¨®n con Estados Unidos en otras esferas, como la migraci¨®n y la construcci¨®n del muro a lo largo de la frontera?
R. Tenemos mucho que avanzar. La nueva configuraci¨®n del Congreso estadounidense puede abrir una puerta para abordar el tema migratorio, que ha sido manejado con una animadversi¨®n social y pol¨ªtica indebida. Me preocupar¨ªa mucho que la sociedad norteamericana terminara odiando o se?alando a los mexicanos como enemigos. La migraci¨®n es un fen¨®meno social inevitable que requiere ser regulado. La ¨²nica soluci¨®n es que M¨¦xico se desarrolle en condiciones de crecimiento, y que en vez de que la mano de obra se marche a EE UU en busca de capital, venga la inversi¨®n a M¨¦xico.
P. La lucha contra la pobreza fue otra promesa en su primer discurso como presidente. Y resulta que en las primeras semanas de su Gobierno ha subido el precio de la tortilla de ma¨ªz, elemento b¨¢sico de la dieta alimenticia de los sectores populares.
R. La complejidad de este asunto va mucho m¨¢s all¨¢ de lo que pueda disponer el Gobierno mexicano y me atrever¨ªa a decir que cualquier Gobierno. En el mundo ha habido un aumento significativo de varios productos agr¨ªcolas. El ma¨ªz ha pasado en el mercado internacional de 81 d¨®lares la tonelada a casi 160 en un par de meses. Vamos a ampliar las importaciones, queremos inundar el mercado mexicano de ma¨ªz para evitar la especulaci¨®n. Seremos severos, en¨¦rgicos e implacables en los casos de abuso especulativo.
P. Le quiero preguntar qui¨¦n paga impuestos en M¨¦xico. ?Pagan las grandes fortunas, los consorcios locales, los monopolios?
R. Pagan impuestos, aunque la base fiscal de M¨¦xico es incre¨ªblemente reducida. En realidad, seguimos con un problema de recaudaci¨®n a cargo de pocos contribuyentes, y necesitamos una reforma fiscal que ampl¨ªe la base de recaudaci¨®n y nos permita aumentar el ingreso de las arcas p¨²blicas. En el caso de algunas grandes corporaciones que no pagaban impuestos o pagaban muy pocos, en el paquete fiscal que hemos aprobado en el Congreso se establecieron medidas que permiten terminar con ciertos mecanismos de elusi¨®n fiscal, o cortar ciertos procesos que permit¨ªan ingenier¨ªas fiscales de grandes corporaciones para evitar el pago de impuestos.
P. Un ministro del anterior Gobierno dijo: "Si forzamos una verdadera reforma fiscal, los ricos nos tumban el Gobierno". ?Qu¨¦ opini¨®n le merece la frase?
R. Creo que el Gobierno no est¨¢ al vaiv¨¦n de lo que digan uno o muchos empresarios o grupos econ¨®micos. En segundo lugar, una reforma fiscal en M¨¦xico tendr¨ªa muchas aristas: desde luego, aumentar la responsabilidad recaudatoria de quienes tienen m¨¢s ingresos, pero tambi¨¦n ampliar la base fiscal y evitar una serie de excepciones que en M¨¦xico se han venido acumulando durante d¨¦cadas. No s¨®lo de grupos econ¨®micamente fuertes, sino de sectores con intereses pol¨ªticos muy poderosos, que siguen representados en el Congreso y que quiz¨¢ est¨¢n en la ra¨ªz que ha impedido que M¨¦xico haya hecho una reforma fiscal verdadera.
P. ?El enorme peso de los monopolios, p¨²blicos y privados, es un freno a la competencia y al crecimiento de la econom¨ªa?
R. S¨ª. Los monopolios p¨²blicos o privados son siempre frenos a la competencia, a la competitividad de los pa¨ªses y al bienestar de consumidores y productores. Hay que fortalecer las medidas de competencia, de apertura y de mercados que tiene un pa¨ªs, y fortalecer los ¨®rganos reguladores internos.
P. ?Tiene el Gobierno mexicano la fuerza y capacidad suficientes para meter en vereda a estos monopolios tan poderosos?
R. Hay instrumentos que tienen los poderes p¨²blicos, no s¨®lo el presidente, sino el Congreso y el poder judicial. La clave es utilizarlos de una manera legal y sensata, que permita fortalecer la competitividad.
P. Usted prometi¨® tras la toma de posesi¨®n una rebaja de los sueldos de los pol¨ªticos y del presidente. ?Se ha cumplido la promesa?
R. Se baj¨® el sueldo de todos los empleados federales, empezando por el presidente, secretarios [ministros], subsecretarios, jefes de unidad, directores generales; con lo cual, el sueldo del presidente es m¨¢s bajo que el de muchos servidores p¨²blicos.
P. ?Cu¨¢nto gana el presidente de la Rep¨²blica?
R. Yo cobr¨¦ el mes de diciembre 139.000 pesos . Esperemos que en el Congreso, el poder judicial y en los poderes estatales y municipales se pueda seguir por la misma v¨ªa. Muchos lo ofrecieron y no lo han cumplido. Tenemos listo un proyecto de ley de reformas constitucionales para regular los sueldos de los servidores p¨²blicos, a fin de que est¨¦n sujetos a un solo tabulador nacional, y a una comisi¨®n nombrada por el Congreso que permita que, desde un alcalde hasta el presidente de la Rep¨²blica, tengan un ingreso justo, en la honrada median¨ªa que dec¨ªa Benito Ju¨¢rez, y evite abusos como los que se cometen.
P. Como candidato prometi¨® un Gobierno de unidad, y el Gabinete que usted preside es monocolor del Partido de Acci¨®n Nacional (PAN), lo que gener¨® cr¨ªticas que se?alaron que cedi¨® a las presiones de los sectores m¨¢s conservadores de su partido.
R. La invitaci¨®n se formul¨® con toda honestidad y de hecho sigue abierta. Lo que ocurre es que mis interlocutores pol¨ªticos, la oposici¨®n concretamente, lo ha rechazado. El PRD desde luego, casi por premisa, la ha rechazado, y el PRI curiosamente tampoco la ha aceptado.
P. Mirando al conjunto de Am¨¦rica Latina, ?se siente c¨®modo en un escenario donde la mayor¨ªa de Gobiernos son de centro-izquierda o de izquierda, de signo pol¨ªtico opuesto al suyo?
R. No tengo problemas con el vecindario. M¨¦xico tiene una posici¨®n muy importante en los ¨¢mbitos regionales, un liderazgo que ejercer, y lo vamos a hacer cabalmente. No me preocupan los signos ideol¨®gicos de uno u otro Gobierno. Pueden ser de izquierda, de derecha o de centro. Me preocupa el grado de avance o deterioro de las condiciones democr¨¢ticas. La vuelta a reg¨ªmenes autoritarios o a presidentes vitalicios debe preocupar a todo el mundo democr¨¢tico.
P. ?En qui¨¦n est¨¢ pensando, presidente?
R. Me parece que... Si se confirma... la vuelta a un Gobierno vitalicio, por ejemplo, en Venezuela o en cualquier parte de Am¨¦rica Latina, o del mundo, es un motivo de preocupaci¨®n. Es un tema que compete a los venezolanos, pero debemos hacer una reflexi¨®n mucho mayor en el mundo democr¨¢tico de la que ha suscitado hasta ahora.
P. ?Qu¨¦ espera de su primer viaje a Espa?a como presidente de M¨¦xico?
R. Presentar un panorama m¨¢s objetivo y mejor informado de lo que est¨¢ ocurriendo en M¨¦xico. Quiero transmitir que en los temas que preocupan a inversores y a turistas, como la seguridad, hemos tomado cartas en el asunto y hemos asumido con fuerza el control del Estado. Queremos que M¨¦xico sea reconocido como uno de los destinos de inversi¨®n del mundo. M¨¦xico puede ser una de las cinco econom¨ªas m¨¢s grandes del mundo hacia el a?o 2050 si tomamos las decisiones correctas. Paralelamente, queremos reforzar todos los mecanismos de cooperaci¨®n entre Espa?a y M¨¦xico, y hablar con el Gobierno de Rodr¨ªguez Zapatero de la importancia de que M¨¦xico y Espa?a act¨²en de manera coordinada en Iberoam¨¦rica. Espa?a ha tenido un papel de liderazgo muy importante y debe seguir jug¨¢ndolo.
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