100.000 personas desfilan en Estambul para despedir al periodista turco-armenio asesinado

M¨¢s de 100.000 personas marcharon ayer en silencio por las calles de Estambul para despedir al periodista turco-armenio Hrant Dink, asesinado a tiros a las puertas del semanario biling¨¹e que dirig¨ªa en Estambul por un joven ultranacionalista. El cortejo se form¨® a primera hora de la ma?ana frente a la redacci¨®n de la revista Agos. En un clima de reconciliaci¨®n, turcos musulmanes y armenios cristianos desfilaron bajo el sonido de marchas f¨²nebres tras el f¨¦retro de Dink cubierto de flores, seguido por su viuda Rakel y sus tres hijos, con pancartas en las que se le¨ªa: "Todos somos armenios".

En medio de un gran despliegue de las fuerzas de seguridad y mientras eran soltadas al aire decenas de palomas blancas, el masivo cortejo f¨²nebre, en el que tambi¨¦n participaron representantes de las minor¨ªas kurda y ¨¢rabe de Turqu¨ªa, recorri¨® las principales avenidas de la parte europea de Estambul, cerradas al tr¨¢fico para la ocasi¨®n, hasta la sede del patriarcado armenio, en el distrito de Kumkapi, situado en la orilla opuesta del Cuerno de Oro, en el centro hist¨®rico de la ciudad.

Dos ministros turcos asistieron al funeral, en el que representantes del Gobierno de Ankara coincidieron por primera vez con diplom¨¢ticos de Armenia tras la ruptura de relaciones de 1993. Decenas de representantes de la di¨¢spora armenia se desplazaron tambi¨¦n ayer hasta Estambul. "Los turcos deben aceptar que los armenios son tambi¨¦n ciudadanos turcos que han vivido en esta tierra durante miles de a?os, y no son ni extranjeros ni enemigos potenciales. Hay que empezar por reformar los libros de historia en las escuelas", dijo el patriarca armenio, Mesrob II, durante la ceremonia

El desfile f¨²nebre prosigui¨® despu¨¦s su camino hasta el cementerio armenio de Balikli, situado a unos ocho kil¨®metros del centro de Estambul.

Ogun Samast, de 17 a?os, ha confesado ser el autor del asesinato de Dink, al que acus¨® de haber "insultado" a los turcos. El periodista fue uno de los primeros en romper el tab¨² existente en Turqu¨ªa sobre el genocidio armenio: la muerte de 1,5 millones de civiles de esa comunidad cristiana a manos del Imperio Otomano durante la I Guerra Mundial.

Al igual que otros muchos intelectuales -como el premio Nobel de Literatura Orhan Pamuk-, Dink fue procesado por sus opiniones acusado de atentar contra "la identidad nacional turca", un delito recogido en el art¨ªculo 301 del C¨®digo Penal turco y que ha sido utilizado por los grupos de ultraderecha para acosar a periodistas y escritores. "Le han matado por sus opiniones los mismos que le hab¨ªan convertido en un objetivo de ataque", ha asegurado Pamuk. "Lo que Dink no pudo conseguir en vida, lo ha logrado con su muerte: la unidad entre los turcos y armenios", dijo una joven estudiante armenia tras el sepelio del periodista asesinado. "Este crimen se ha debido a la atm¨®sfera nacionalista envenenada que se vive en Turqu¨ªa", dijo uno de los turcos asistentes al funeral.