Le¨®n Arsenal rastrea en su nueva novela el tesoro perdido de los visigodos

"Es un thriller hist¨®rico pero no un thriller de sotana", puntualiza de entrada Le¨®n Arsenal (Madrid, 1960) para diferenciar su nueva novela, El espejo de Salom¨®n (Minotauro), de El C¨®digo Da Vinci y sus clones. "Aqu¨ª no hay una organizaci¨®n tenebrosa de medio curas medio conspiradores", se?ala Arsenal, que bromea: "Dan Brown no existe, es una franquicia de la Iglesia". El legendario tesoro de los visigodos, vinculado precisamente a algunas de las m¨¢s conocidas f¨¢bulas esot¨¦ricas como la del abad Seunieres y Rennes-le-Ch?teau, est¨¢ en el centro de la ¨²ltima ficci¨®n de Arsenal, uno de los autores m¨¢s conocidos del g¨¦nero fant¨¢stico espa?ol. Con esta novela, el polifac¨¦tico escritor, que frecuenta la ciencia-ficci¨®n, la fantas¨ªa (gan¨® el primer Premio Minotauro con M¨¢scaras de matar) y la narrativa hist¨®rica, se acerca ahora al thriller hist¨®rico o arqueol¨®gico.

En El espejo de Salom¨®n, una historiadora espa?ola actual sigue la pista del tesoro de los visigodos, reunido seg¨²n la tradici¨®n por Alarico tras tomar Roma, trasladado a Toledo y perdido despu¨¦s de la conquista ¨¢rabe de la Pen¨ªnsula. Ese tesoro m¨ªtico incluir¨ªa objetos sagrados -entre ellos la Mesa del rey Salom¨®n, en la que se dec¨ªa que estaba trazado el compendio de la sabidur¨ªa universal, y el santo Menorah, el candelabro de los siete brazos-. En la novela juegan un papel fundamental los caballeros de la Orden de Montesa, que sustituyen en un gui?o hist¨®rico de Arsenal a los tan habituales templarios. Laberintos, asesinatos, claves ocultas, ¨®rdenes secretas, un codicilo misterioso... Todos esos elementos aparecen en El espejo de Salom¨®n.

"A los de Montesa no les gusta recordarlo, pero es un hecho que los templarios espa?oles entraron en masa en sus filas tras la debacle de su propia orden", apunta Arsenal, que acaba de publicar el ensayo Una historia de las sociedades secretas espa?olas (Zenith), en colaboraci¨®n con el historiador Hip¨®lito Sanchiz, que es precisamente caballero de Montesa.

El novelista deplora "la moda del clonaje de productos de ¨¦xito". Una moda que, reflexiona, est¨¢ hundiendo g¨¦neros enteros. ?l ha tratado de hacer algo distinto en El espejo de Salom¨®n. "Saco tajada de la historia espa?ola y trato de que el argumento se mueva en nuestras coordenadas". Arsenal recalca que una intriga de las caracter¨ªsticas de la suya ha de ser cre¨ªble, aunque puntualiza que ¨¦l no aspira a desvelar ninguna trama oculta real. No obstante, indica que se encontr¨® con un elemento extra?o al investigar para su libro. "En los a?os cuarenta, las tropas franquistas acordonaron la zona en la que dos arque¨®logos excavaban en el castillo de la sede de la Orden de Montesa, cerca de X¨¤tiva. Un elemento con el que puedes jugar mucho. Nadie sabe qu¨¦ buscaba Franco ah¨ª". Los visigodos tambi¨¦n dan juego. "Son un pueblo curioso y poco tocado literariamente".