El mal camino

Gijs de Vries, coordinador antiterrorista en el Consejo de la UE, abandona el cargo tras calificar las prisiones secretas, detenciones extrajudiciales y torturas de estos a?os por parte de EE UU de "no s¨®lo ilegales, sino inmorales". "Guant¨¢namo es una aberraci¨®n", ha dicho, y es dif¨ªcil no estar de acuerdo, si bien ¨¦l lo sab¨ªa desde hace tiempo y deb¨ªa haber actuado en consecuencia mucho antes. Estamos ante hechos muy graves que fomentan la adhesi¨®n al islamismo radical y que, lejos de ayudar, socavan la lucha contra el terrorismo global.

A pesar de sus insuficiencias, el informe del Parlamento Europeo sobre los vuelos secretos de la CIA ha marcado un hito y pone en un brete a Gobiernos e instituciones europeos, incluidos el Consejo y su secretario general y representante de Pol¨ªtica Exterior, Javier Solana, aunque formalmente no tenga competencias en esta materia. John Bellinger, asesor jur¨ªdico de Condoleezza Rice, lo ha se?alado en sus conversaciones con los europeos, seg¨²n ha recogido este peri¨®dico de notas confidenciales: "No capturamos a gente en Europa sin permiso de los Gobiernos". Corresponde pues a estos Gobiernos dar explicaciones.

Aunque la pol¨ªtica pretenda arrastrar los pies, la justicia sigue a paso lento pero seguro. En Italia se abrir¨¢ juicio oral contra antiguos responsables de los servicios secretos italianos y 26 agentes de la CIA acusados por la fiscal¨ªa del secuestro en Mil¨¢n del im¨¢n Abu Omar en febrero de 2003 y posteriormente torturado en Egipto y puesto en libertad hace unos d¨ªas, aunque tiene un sumario abierto en Italia acusado de ser uno de los cabecillas del grupo terrorista Ansar al Islam.

Los europeos ganar¨¢n credibilidad en su defensa de los derechos humanos si arrojan luz sobre todos estos episodios, incluyendo los interrogatorios por parte de polic¨ªas espa?oles a presos en Guant¨¢namo, de los que este peri¨®dico ha venido informado en los ¨²ltimos meses tanto en lo referido al ceut¨ª Hamed Abderraham¨¢n como al marroqu¨ª residente en Espa?a Lahcen Ikassrien, entre otros. Fueron interrogatorios ilegales, y, seg¨²n Ikassrien, el ¨²ltimo despu¨¦s del anuncio de la retirada espa?ola de Irak, mientras que los vuelos de la CIA siguieron pasando por Espa?a hasta noviembre de 2005. El asunto concierne por tanto al actual Gobierno y al anterior. La Audiencia Nacional dio por buenos los informes policiales realizados sin garant¨ªa jur¨ªdica alguna, pero el Tribunal Supremo los desestim¨® como prueba, lo que de paso demuestra la inutilidad de actuar contra derecho.

Demasiadas connivencias, demasiados puntos oscuros. La forma de encarar la guerra de Bush contra el terrorismo ha acabado por contaminar a demasiados responsables europeos, que se han dejado llevar por el mal camino marcado desde Washington.