C¨®digo de barras gen¨¦tico

El primer an¨¢lisis gen¨¦tico sistem¨¢tico de p¨¢jaros de Am¨¦rica del Norte muestra que puede haber 15 nuevas especies, entre ellas algunas de cuervos y de b¨²hos, tan parecidas a otras que han sido clasificadas como la misma desde hace siglos, a pesar de que no se cruzan desde hace millones de a?os. Si esta misma tendencia, extra¨ªda de los an¨¢lisis gen¨¦ticos que se realizan por primera vez en estas poblaciones, se confirma en el resto del mundo se podr¨ªa a?adir un millar de especies a las 10.000 de p¨¢jaros identificadas hasta ahora, explican los cient¨ªficos, de las universidades de Guelph (Canad¨¢) y Rockefeller (EE UU) y de otras instituciones de ambos pa¨ªses.

Un estudio paralelo de murci¨¦lagos de la Guayana tambi¨¦n ha descubierto seis nuevas especies entre las 87 estudiadas, lo que indica, seg¨²n los autores del estudio, que la definici¨®n de especie ha sido hasta ahora demasiado superficial.

Los autores han hecho el estudio como una prueba, que consideran casi definitiva, de que se pueden identificar as¨ª todas las formas de vida y piensan en automatizar el proceso. El objetivo no es s¨®lo clasificar las especies sino tambi¨¦n tener mecanismos simples de identificaci¨®n para cualquier muestra biol¨®gica, desde un pelo a una u?a. Las aplicaciones van desde las forenses en el caso del ADN humano a la represi¨®n del tr¨¢fico de especies amenazadas o el aumento de la seguridad a¨¦rea por la identificaci¨®n de las aves que se estrellan en los aviones.

"?ste es el primer paso de un proceso que llevar¨¢ al registro gen¨¦tico de la vida en el planeta", ha se?alado Paul Hebert, del Instituto para la Biodiversidad de Ontario, coautor del informe publicado en Molecular Ecology Notes. "No se puede proteger la biodiversidad si no se conoce".

Los cient¨ªficos encontraron 15 posibles nuevas especies entre las 643 p¨¢jaros estudiados desde el ?rtico a Florida. En total se conocen 690 especies de p¨¢jaros que cr¨ªan en Am¨¦rica del Norte. "Los p¨¢jaros de Norteam¨¦rica est¨¢n entre los mejor estudiados del mundo", ha dicho Mark Stoeckle, de la Universidad Rockefeller, coautor del trabajo. "Incluso en un grupo en el que se ha trabajado con tanto cuidado hay diferentes formas gen¨¦ticas que parecen ser nuevas especies".

Las pruebas gen¨¦ticas, efectuadas, por ejemplo, sobre una muestra de pluma, dan como resultado un c¨®digo de barras similar a los que llevan los productos en el supermercado. Cuando la secuencia de bases del ADN es distinta en al menos un 2,5%, se puede definir una especie a pesar de que sea id¨¦ntica en las plumas, el canto o la morfolog¨ªa. Una diferencia de un 1% indica que ha pasado un mill¨®n de a?os desde la ¨²ltima vez que se cruzaron ambas especies.

Por el contrario, el estudio tambi¨¦n hall¨® 14 pares de p¨¢jaros considerados especies diferentes que son casi gemelos gen¨¦ticos, dos tr¨ªos de p¨¢jaros con las mismas caracter¨ªsticas y ocho especies de gaviotas pr¨¢cticamente id¨¦nticas gen¨¦ticamente.

"Algunas de estas aves, si se miran de cerca, deben de ser consideradas mejor como una ¨²nica especie", ha explicado Stoeckle. "Otras son probablemente especies muy j¨®venes que est¨¢n en la frontera". Dos especies de ganso, por ejemplo, comparten el 99,8% del ADN, lo mismo que dos de gaviota, y otras dos de urraca el 99,6%.

Los investigadores del estudio han recordado que no existe una clara definici¨®n de lo que es una especie, aunque se suele recurrir a la imposibilidad de que se crucen los individuos. "Eso es dif¨ªcil de comprobar, porque no vemos a los murci¨¦lagos tener relaciones sexuales en las cuevas y tampoco observamos las formas diminutas de vida", ha dicho Hebert. En el caso de los murci¨¦lagos, representan nada menos que 1.100 de las 5.500 especies conocidas de mam¨ªferos (el 20%). Hallar seis nuevas entre 87 resulta notable por lo que indica. "Los murci¨¦lagos de la Guayana han sido objeto de un intenso trabajo taxon¨®mico y a pesar de ello pudimos reconocer el 100% de las especies ya aceptadas y a?adir otras nuevas", se?ala Hebert. En el caso de los murci¨¦lagos que se estrellan en las turbinas e¨®licas, miles al a?o, un simple pelo permitir¨ªa identificarlos, a?adi¨®.

Los cient¨ªficos esperan obtener 76 millones de euros para ampliar el c¨®digo de barras gen¨¦tico a toda la vida sobre la Tierra, unos 10 millones de registros de ADN de unas 500.000 especies para el a?o 2014.