Mi profe es una marioneta

Max es un reputado pedagogo, tiene una larga experiencia animando grupos de estudiantes y tambi¨¦n de profesores. Su especialidad es crear una buena din¨¢mica de grupo y ha logrado que todos le adoren. Max tiene apenas cuatro a?os y en su vida anterior ha sido un calcet¨ªn. Samuel J. Cromb¨¦, psic¨®logo infantil y pedagogo, supo intuir en aquel calcet¨ªn caqui un talento escondido para la ense?anza y le dio vida como "marioneta drag¨®n, porque Max y sus compa?eros se sienten heridos si se les llama marioneta calcet¨ªn".

Max forma parte de un grupo de marionetas pedagogas pioneras en Espa?a, pero que de la mano de Samuel J. Cromb¨¦ ya han recorrido otros pa¨ªses formando a profesores que despu¨¦s las utilizan con sus propios alumnos. Ahora, junto a un grupo de pedagogos y creadores, est¨¢ formando a docentes espa?oles. Se trata de una nueva forma de entender la ense?anza cuyo objetivo es que el alumno asuma la responsabilidad de su formaci¨®n.

"En Francia es habitual su empleo y en Jap¨®n las marionetas est¨¢n integradas en la ense?anza de lenguas", dice Cromb¨¦. Su aplicaci¨®n fundamental ha sido en las clases de idiomas, pero se est¨¢n introduciendo en otras asignaturas e incluso se puede emplear para romper una din¨¢mica negativa dentro de una clase. El pedagogo asegura que en su experiencia "cuando un personaje ya conocido por los alumnos aparece en la clase se crea una corriente emocional que est¨¢ m¨¢s all¨¢ de todos los problemas de autoridad y de respeto. El ambiente cambia inmediatamente". La voz de estos curiosos personajes les permite manifestar aquello que nunca dir¨ªan de su propia boca. "El profesor las puede utilizar con estudiantes conflictivos para canalizar la oposici¨®n o la violencia", explica Cromb¨¦. Los alumnos no se resisten a la fascinaci¨®n de una marioneta: "En cuanto la tienen en la mano se ponen a hablar espont¨¢neamente, incluso cambiando la voz".

Max es muy cari?oso y le fascina cantar. De hecho, cuando hay ejercicios tediosos se encarga de aligerar el ambiente haciendo alguno de sus famosos espect¨¢culos. Pero cuando las cosas se complican y surgen preguntas complejas o temas particularmente dif¨ªciles, es Merl¨ªn quien se ocupa de resolver la situaci¨®n. Merl¨ªn es un sabio, un mago que lo sabe todo, que tiene todas las respuestas y que siempre est¨¢ dispuesto a ayudar. "Al no ser el profesor el que resuelve las dudas, los estudiantes se sienten m¨¢s libres y se atreven a preguntar m¨¢s cosas". La ¨²nica condici¨®n es tomar el tiempo necesario para familiarizarse con la marioneta y establecer un lazo con ella, "despu¨¦s, los l¨ªmites de su aplicaci¨®n est¨¢n en los de la propia imaginaci¨®n".

La formaci¨®n de profesores espa?oles de primaria y secundaria en el empleo de marionetas ha comenzado recientemente, de modo que todav¨ªa no se dispone de una evaluaci¨®n sobre su uso, pero la metodolog¨ªa forma parte de todo un movimiento europeo. "Se est¨¢ dando una gran transformaci¨®n y su objetivo es que el estudiante se autoeval¨²e y se automotive y los m¨¦todos art¨ªsticos o teatrales son herramientas de esta nueva forma de ense?anza. Poner la marioneta en la mano del estudiante es como pasarle el testigo de la responsabilidad de su aprendizaje".