Un ministro inspirado por la ¨¦tica 'hacker'

Cumpli¨® 64 a?os el pasaso 26 de junio. Lo celebr¨® cantando When I'm sixty-four, de los Beatles, sobre el escenario del Barbican de Londres. "Est¨¢ bien envejecer. Y hacerlo con salud es una bendici¨®n", afirma. "El arte de vivir es como el arte de componer. Es estar preparado para la muerte".

"Los 'hackers' son una extensi¨®n actual de la contracultura de hace cuarenta a?os"

El presidente brasile?o Lula da Silva fue elegido en las urnas para un segundo mandato y Gilberto Passos Gil Moreira repite como ministro de Cultura. Hoy presenta en Barcelona (Palau de la M¨²sica) -el domingo actu¨® en Tenerife y ayer en Vitoria- su ¨²nico disco de voz y guitarra. Se titula Gil Luminoso y, aunque acaba de salir al mercado, lo grab¨® en 1999 y se inclu¨ªa entonces con un hermoso libro del artista pl¨¢stico Ben¨º Fonteles sobre Gilberto Gil. "Decidi¨® poner el foco en aquellas canciones m¨ªas que tienen una caracter¨ªstica m¨¢s espiritual, filos¨®fica, religiosa. Me propuso una lista de 40 canciones que ilustraran el disco y eleg¨ª las 15 grabadas", explica por tel¨¦fono desde su casa en Salvador de Bah¨ªa. Fue dando forma a las versiones por las noches: cuando todo el mundo se hab¨ªa ido a dormir agarraba la guitarra y se pon¨ªa a ello.

En estos cuatro a?os se ha permitido bastantes conciertos durante sus periodos vacacionales, aunque tan s¨®lo ha escrito una canci¨®n: Bal¨¦ de Berlim, para la selecci¨®n de f¨²tbol en el Mundial de Alemania. Afirma que su misi¨®n en la m¨²sica est¨¢ cumplida y que sus d¨ªas como compositor pr¨¢cticamente terminaron. "Cualquier cosa que pueda hacer ahora es complementar un trabajo ya hecho. No tengo nuevas ambiciones. La m¨²sica para m¨ª es algo visceral. Creci¨® conmigo desde la infancia y se va a morir conmigo. No la encaro como una herramienta de trabajo, sino como un medio de expresi¨®n. Las personas asocian el trabajo del cantautor a esa capacidad renovada de inventar canciones nuevas, pero a m¨ª me gusta cantar las viejas canciones, recrearlas".

Al aceptar el cargo de minsitro, Gilberto Gil condicion¨® su presencia a que la cultura recibiese un tratamiento acorde con su relevancia (en Brasil es responsable del 5% del PIB): disponer de un 0,5% de los recursos del presupuesto. "Ya estamos en torno al 0,6%. Ahora necesitamos llegar al 1%", comenta.

"Queremos profundizar en ese papel de estimular la discusi¨®n y la cr¨ªtica cultural". Cuando habla de sus tareas ministeriales, el discurso es pol¨ªticamente correcto, pero cuando se refiere a asuntos m¨¢s creativos su voz se anima. Impactaron sus palabras en el Internet Global Congress del a?o pasado en Barcelona: "Trabajo inspirado por la ¨¦tica hacker". "Una ¨¦tica de donaci¨®n permanente de tu capacidad y tu trabajo para el di¨¢logo enriquecedor con todas las otras formas de lenguajes. Una ¨¦tica de creaci¨®n colectiva, de solidaridad". Renace la rebeld¨ªa de quien desafi¨® al sistema con el movimiento tropicalista y tiene que lidiar de nuevo con los conservadores: "Los hackers son una extensi¨®n contempor¨¢nea de la contracultura de hace 40 a?os. No son delincuentes como a veces aparece en los medios".

Le preocupa el dif¨ªcil equilibrio entre una defensa razonable del derecho del autor sobre su obra y el acceso libre a esa misma obra. "Un desaf¨ªo que tenemos desde que se invent¨® el derecho de autor en Inglaterra y sus posteriores desarrollos en Estados Unidos. Thomas Jefferson dec¨ªa claramente que el desaf¨ªo de la gesti¨®n del derecho autoral es garantizar la remuneraci¨®n de los autores y al mismo tiempo el acceso del p¨²blico. En los ¨²ltimos tiempos hubo una tendencia a privilegiar la remuneraci¨®n de los autores para convertir el derecho de autor casi en un producto. Adem¨¢s, los derechos autorales fueron gradualmente transferidos de los autores a sus representantes corporativos".

El propio Gil tuvo que luchar durante siete a?os en los tribunales para recuperar la gesti¨®n de los derechos de todas sus canciones. Recuerda que cuando Edison registr¨® las patentes del invento del cine en la costa Este de Estados Unidos, los creadores que quer¨ªan escapar al monopolio tuvieron que emigrar a California y que fueron aquellos piratas los fundadores de Hollywood. Apoya decididamente el software libre

[poder copiar, modificar y distribuir sin restricciones]. "Los Puntos de Cultura [300 oficinas de Internet y nuevas tecnolog¨ªas en comunidades desfavorecidas y lugares remotos de Brasil] utilizan el software libre como instrumento".

Gilberto Gil cree que la m¨²sica, "hoy uno de los grandes mercados mundiales", seguir¨¢ siendo un lenguaje de la espiritualidad. Suele referirse a Bob Marley y John Lennon como sus hermanos: "Les un¨ªa el deseo irrenunciable de una sociedad humana m¨¢s arm¨®nica. Ese deseo de libertad, igualdad y fraternidad, de los principios de la Revoluci¨®n Francesa, de Jean-Jacques Rousseau y los grandes enciclopedistas. Fueron grandes baluartes de las versiones contempor¨¢neas, modernas y posmodernas de esa doctrina".