Jap¨®n pide perd¨®n a las esclavas sexuales

El primer ministro japon¨¦s, Shinzo Abe, criticado internacionalmente en las ¨²ltimas semanas por negar que el Gobierno y el Ej¨¦rcito japoneses estuvieran involucrados en forzar a mujeres a trabajar como esclavas sexuales en burdeles improvisados para los soldados durante la II Guerra Mundial, pidi¨® finalmente perd¨®n ayer. Abe, a una pregunta de un parlamentario de la oposici¨®n, dijo ante un comit¨¦ parlamentario que se disculpaba "aqu¨ª y ahora como primer ministro".

"Como suelo decir, siento empat¨ªa por la gente que ha pasado por momentos duros y pido disculpas por el hecho de que tuvieran que vivir esa situaci¨®n", afirm¨® Abe ante el comit¨¦.

Sin embargo, el primer ministro no se retract¨® de sus declaraciones a comienzos de este mes sobre que no hab¨ªa pruebas de que el Gobierno y el Ej¨¦rcito del Jap¨®n imperialista hubieran raptado a mujeres para convertirlas en mujeres de consuelo, eufemismo con el que se denomina en Jap¨®n a las esclavizadas sexualmente antes y durante la II Guerra Mundial.

Esta postura es coincidente con la de los pol¨ªticos y la ¨¦lite conservadora japonesa, que aseveran que esas mujeres, casi todas asi¨¢ticas -principalmente chinas y coreanas-, eran prostitutas voluntarias, que percibieron honorarios por sus servicios sexuales. Por el contrario, las damnificadas, cuyo n¨²mero se eleva a casi 200.000, aunque la mayor¨ªa ya ha fallecido, aseguran que fueron obligadas a prostituirse en burdeles abiertos en las l¨ªneas de combate.

S¨®lo en 1993, el entonces ministro de la Presidencia, Yohei Kono, reconoci¨® la participaci¨®n de las autoridades japonesas en la creaci¨®n de prost¨ªbulos, en la llamada declaraci¨®n de Kono.

El primer ministro afirm¨® que no ofrecer¨ªa m¨¢s disculpas, aunque una comisi¨®n de la C¨¢mara de Representantes de EE UU acabe aprobando, como est¨¢ sopesando hacer, una resoluci¨®n no vinculante en la que insta a las autoridades japonesas a que reconozcan el sufrimiento de las esclavas sexuales y presenten una disculpa sin fisuras. La resoluci¨®n, que Shinzo Abe asegura que est¨¢ llena de errores, podr¨ªa ser votada el pr¨®ximo mayo, posiblemente despu¨¦s de que Abe efect¨²e una visita oficial a EE UU, en la que tiene previsto entrevistarse con su presidente, George W. Bush.

Todas las alusiones del primer ministro a las esclavas sexuales han sido muy criticadas tanto por China y Corea del Sur como por EE UU, su primer aliado en la escena internacional. Precisamente, el primer ministro chino, Wen Jiabao, ha acortado su visita oficial a Jap¨®n en abril de los cinco d¨ªas previstos en un principio a tan s¨®lo tres, lo que se ha interpretado como una reacci¨®n a la postura de Abe sobre las esclavas sexuales.

El Fondo de Mujeres Asi¨¢ticas, creado en 1995 y del que uno de sus fundadores es el propio Gobierno japon¨¦s, ha indemnizado a las mujeres de consuelo con dos millones de yenes (12.741 euros) a algunas de ellas -las que se han avenido a aceptar ese dinero-, como compensaci¨®n y apoyo m¨¦dico, todo ello acompa?ado de un escrito de disculpa firmado por anteriores primeros ministros. Las mujeres que la rechazan lo justifican diciendo que tiene que ser el propio Gobierno el que d¨¦ esa compensaci¨®n como gesto de que asume su responsabilidad.