Messi y Eto'o golean con Ronaldinho
Los delanteros del Barcelona marcan las diferencias frente a un Deportivo muy f¨ªsico y que funcion¨® como equipo
Juega poco el Bar?a, pero mete goles. Tiene a tres delanteros que no necesitan de centrocampistas ni mucho menos de defensas para marcar las diferencias. Al Deportivo le ocurre justamente lo contrario. Excelente en el juego asociativo, es un equipo sin individualidades. No tiene pegada. As¨ª se explica que el Barcelona ganara el encuentro de ayer en el Camp Nou. Nada nuevo, en cualquier caso, si se atiende a la marcha del curso, escaso de f¨²tbol en el bando barcelonista, confiado al gatillo de Eto'o, Messi y Ronaldinho. Los puntos de referencia son los delanteros. El equipo se bate malamente en la mayor¨ªa de los partidos a la espera de que resuelvan los atacantes. Anoche marcaron Messi y Eto'o despu¨¦s de un par de jugadas de Ronaldinho que valieron por todo el partido o, cuando menos, fueron lo mejor que puso el Bar?a para merecer la victoria ante un adversario muy puesto y especialmente f¨ªsico, superado s¨®lo por la actuaci¨®n solemne de Ronie.
BARCELONA 2 DEPORTIVO 1
Barcelona: Vald¨¦s; Zambrotta, Puyol, Thuram, Gio (Motta, m. 90); Xavi, Edmilson, Iniesta (Oleguer, m. 74); Messi (Giuly, m. 84), Eto'o y Ronaldinho. No utilizados: Jorquera, Belletti, Sylvinho y Gudjohnsen.
Deportivo: Aouate; Coloccini, Lopo, Andrade, Capdevila; De Guzm¨¢n (Sergio, m. 82), Juan Rodr¨ªguez; Estoyanoff, Verd¨², Cristian; y Riki (Adri¨¢n, m. 60). No utilizados: Munia, Manuel Pablo, Barrag¨¢n, Juanma y Filipe.
Goles: 1-0. M. 44. Messi controla una asistencia de Ronaldinho. 2-0. M. 50. Eto'o culmina una jugada de Ronaldinho. 2-1. M. 68. Adri¨¢n aprovecha una mala cesi¨®n de Gio en defensa.
?rbitro: Ayza G¨¢mez. Amonest¨® a Estoyanoff, Capdevila, Ronaldinho, Juan Rodr¨ªguez y Zambrotta.
63.827 espectadores en el Camp Nou.
El brasile?o estuvo inspirado y gener¨® las dos jugadas que acabaron en gol
Acomodado como est¨¢ en la tabla, despreocupado ya por los resultados de cada jornada, al Deportivo le animan especialmente los mano a mano frente a contrarios de la grandeza del Barcelona, que sali¨® como un tiro a la cancha, como si quisiera despachar la contienda con la gorra para acabar con tantas habladur¨ªas y murmuraciones como se cuentan sobre su salud futbol¨ªstica. Los azulgrana propon¨ªan un partido muy abierto, un intercambio de golpes, que los blanquiazules aceptaron encantados. La pelota iba y ven¨ªa de una punta a otra del campo. Ronaldinho ejerc¨ªa de armador del juego del Bar?a y Cristian se distingu¨ªa como pasador de un Deportivo organizado, trabajado t¨¢cticamente, muy valiente. A la que se alcanz¨® el cuarto de hora, los blanquiazules acabaron por meter en serios apuros a los azulgrana. Afilado en la recuperaci¨®n y poderoso en la presi¨®n, el Deportivo quitaba, sal¨ªa y remataba en contraste con la desorientaci¨®n barcelonista.
El campo se le hac¨ªa demasiado largo al Barcelona, de manera que los delanteros quedaron desconectados. La buena marca sobre Messi expresaba la excelente lectura del partido que hab¨ªa hecho Caparr¨®s. Impermeable en la divisoria y tan eficaz en las faltas t¨¢cticas como en la anticipaci¨®n, el Deportivo anud¨® al Bar?a, de nuevo vulgarizado, falto de fluidez, incapaz de abrir el campo, ausente del ¨¢rea rival. Al plantel gallego s¨®lo le falt¨® un delantero para coronar su despliegue. Tan desquiciados andaban los azulgrana que en una misma jugada Ronaldinho carg¨® con una tarjeta y Estoyanoff se desplom¨® ante un cachete de Eto'o. El juego se trab¨®, la bronca fue continua y el partido degener¨® por la pierna fuerte de los blanquiazules y la ?o?er¨ªa azulgrana.
Hasta que en la jugada previa al descanso reapareci¨® Ronaldinho en el momento que Coloccini se hab¨ªa animado como volante y perdi¨® el sitio. El gaucho le pic¨® el desmarque a Xavi, amortigu¨® la pelota, regate¨® con un toque a su marcador, que retroced¨ªa descolocado, y toc¨® para la carrera de Messi. El argentino se col¨® como un ariete, control¨® el bal¨®n con el pecho y la cruz¨® con la zurda a la red. Una jugada preciosa que acab¨® con un gol estupendo.
Al Deportivo se le escapaba el partido por el ¨²nico sitio que no pod¨ªa defender. Ronaldinho se reivindicaba como interior y Messi funcionaba como ariete. El brasile?o repiti¨® al volver del descanso con una acci¨®n de tiral¨ªneas. Ronaldinho se apoy¨® con Iniesta y con Xavi, Andrade meti¨® la pata y Eto'o control¨® el rechace para marcar. La productividad de Ronaldinho fue excelente de punta a punta del partido. Discutido como est¨¢, se?alado como un francotirador que vive de la renta de las faltas y penaltis, el gaucho dignific¨® la zamarra azulgrana con el 10. No fue Pel¨¦ ni Maradona porque le falt¨® el gol. No atin¨® despu¨¦s de un ejercicio muy solidario.
La falta de punter¨ªa de Ronaldinho, y tambi¨¦n de Eto'o, alarg¨® la vida del Deportivo, que se col¨® en el partido con un tanto precioso de Adri¨¢n despu¨¦s de una de las muchas concesiones defensivas azulgrana. El gol gallego atont¨® al Bar?a, falto de jerarqu¨ªa en su ¨¢rea y de mando en la medular por el absentismo del pivote, incapaz de coser al equipo como se mostr¨® Edmilson. Al igual que ya ocurri¨® ante la Real, Vald¨¦s salv¨® los puntos en el ¨²ltimo escorzo. No mejora el juego del Bar?a con el paso del tiempo. Le alcanza, de momento, con los goles de sus delanteros.
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