Las bolsas de sangre son de Ullrich

La prueba del ADN ha despejado cualquier duda: la sangre confiscada en Espa?a por la Guardia Civil en la Operaci¨®n Puerto y contenida en las bolsas se?aladas con el n¨²mero 1, Jan y Rudicio pertenecen "sin ninguna duda" al ciclista alem¨¢n Jan Ullrich, seg¨²n afirm¨® ayer el fiscal de Bonn (Alemania) Friedrich Apostel. Aunque el juez instructor de la Operaci¨®n Puerto (la mayor trama mundial de dopaje en el ciclismo) ha archivado este caso al entender que el dopaje no estaba penalizado en Espa?a, la investigaci¨®n judicial abierta en Alemania desmiente a Ullrich y lo deja contra las cuerdas. Y, a la vez, demuestra que buena parte de las 200 bolsas de sangre requisadas por la Guardia Civil ten¨ªan nombre y apellidos, la mayor¨ªa de ciclistas.

Acosado por la opini¨®n p¨²blica, el ganador del Tour de 1997 dio una muestra de su saliva

Uno de esos nombres es el de Ullrich, campe¨®n del Tour en 1997 y segundo en la ronda francesa en cinco ocasiones. Tras aflorar la Operaci¨®n Puerto, Alemania abri¨® diligencias a Ullrich por presunto fraude, dado que ten¨ªa firmado con su anterior equipo, el T-Mobile, un contrato multimillonario en el que se compromet¨ªa a no doparse y a potenciar el deporte sano.

Desde el principio, Ullrich neg¨® ser cliente del m¨¦dico deportivo espa?ol Eufemiano Fuentes (considerado el cabecilla de la trama del dopaje) y ser uno de los 58 ciclistas implicados en la Operaci¨®n Puerto, destapada por EL PA?S en junio del a?o pasado.

Pero, a la vez que negaba su implicaci¨®n, el ciclista alem¨¢n daba ¨®rdenes a sus abogados para que obstaculizaran por todos los medios que su ADN fuese cotejado con el de las bolsas de sangre. Sus desmentidos se contradec¨ªan curiosamente con las actuaciones de sus abogados, que han usado todos los recursos judiciales posibles para evitar que el ADN de Ullrich se cotejara con el de la sangre decomisada en Espa?a por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Aunque es alem¨¢n, Ullrich vive en Suiza. Tras su expulsi¨®n del Tour por dopaje, los fiscales de sus pa¨ªs le animaron a que demostrara su inocencia dando el ADN. Pero ¨¦l siempre se mostr¨® esquivo. Ante ello, los fiscales lograron la cooperaci¨®n de la justicia helv¨¦tica para realizar un registro en casa de Ullrich tendente a buscar una muestra del ADN del ciclista. Se consiguieron varias, pero un recurso ante la justicia suiza de Ullrich bloque¨® la entrega de las mismas. La fiscal¨ªa de Bonn denunci¨® el obstruccionismo de UIlrich y ¨¦ste, muy presionadado por la opini¨®n p¨²blica de su pa¨ªs, decidi¨® finalmente entregar una muestra de saliva. Semanas despu¨¦s, en febrero, anunci¨® su retirada del ciclismo como un presagio de que era inexorable que la prueba se realizar¨ªa finalmente y ¨¦l quedar¨ªa en mal lugar.

Pero, al tiempo que daba saliva, Ullrich tambi¨¦n daba instrucciones a sus abogados en Espa?a para que paralizasen como fuera el env¨ªo a Alemania de una muestra de las bolsas de sangre. La justicia espa?ola, a petici¨®n de la alemana, accedi¨® a enviar muestras de nueve bolsas de sangre que se le atribu¨ªan. En casi todas, el resultado ha sido positivo. En otras no porque, aunque en ellas figura el nombre de Jan, cabe la posibilidad de que la sangre pertenezca a un familiar. Pero la mayor¨ªa de las bolsas, vinculadas a Hijo de Rudicio, s¨ª eran de Ullrich, lo que demuestra que Ullrich era cliente de Fuentes y que, adem¨¢s, se dopaba.

Las pesquisas por fraude de la fiscal¨ªa de Bonn tambi¨¦n est¨¢n dirigidas contra el ex entrenador de Ullrich, Rudy [Rudicio] Pevenage (de ah¨ª lo de Hijo de Rudicio) y contra el ciclista espa?ol ?scar Sevilla, compa?ero de Ullrich en el T Mobile. Los investigadores tambi¨¦n hallaron bolsas de sangre pertenecientes supuestamente al italiano Ivan Basso, ¨²ltimo ganador del Giro.