El sur de Europa perder¨¢ cosechas, agua dulce y energ¨ªa hidr¨¢ulica por las olas de calor

Entre 75 y 250 millones de africanos estar¨¢n expuestos a una escasez de agua mayor que ahora. Esto, sumado al aumento de poblaci¨®n, supone un agravamiento dram¨¢tico del problema. Tambi¨¦n el hambre se agudizar¨¢ en un continente ya azotado por las hambrunas y la desnutrici¨®n, ya que se reducir¨¢n las ¨¢reas cultivables y las estaciones apropiadas para la agricultura. En algunas zonas las cosechas pueden reducirse hasta un 50% en 2020.

La pesca en los grandes lagos interiores se reducir¨¢. Extensas zonas habitadas del continente est¨¢n seriamente amenazadas por la subida del nivel del mar y el coste de la adaptaci¨®n puede suponer al menos el 5% o el 10% del producto interior bruto. "Nuevos estudios indican que ?frica es uno de los continentes m¨¢s vulnerables a la variabilidad clim¨¢tica", dice el informe.

El calentamiento y la reducci¨®n de las aguas superficiales inducir¨¢n en el Amazonas oriental el reemplazo de la selva tropical por sabana. La vegetaci¨®n semi¨¢rida del noreste de Brasil y del norte de M¨¦xico ser¨¢ reemplazada por otra de zona ¨¢rida. En la selva tropical se registrar¨¢n extinciones de especies. En las zonas secas del continente, hay riesgo de salinizaci¨®n y desertificaci¨®n de terrenos agr¨ªcolas y todo indica que algunas cosechas importantes decrecer¨¢n, al igual que la producci¨®n ganadera. Adem¨¢s, se desplazar¨¢n algunas reservas pesqueras y los arrecifes coralinos resultar¨¢n da?ados. Todo ello tendr¨¢ un impacto preocupante en la alimentaci¨®n de la poblaci¨®n, que dispondr¨¢ de menos agua dulce. Esto ¨²ltimo afecta a la agricultura y a la producci¨®n de electricidad.

El calentamiento de las cordilleras occidentales causar¨¢ una disminuci¨®n de las nieves, m¨¢s inundaciones en invierno que ahora y menos en verano. Incluso aunque el cambio fuera moderado, aumentar¨¢n algunas cosechas de un 5% a un 20%, pero con grandes diferencias seg¨²n la zona. Las cosechas con mayor riesgo son las que est¨¢n ya cerca de su rango m¨¢ximo de temperatura o dependen mucho del agua.

Los bosques sufrir¨¢n plagas, enfermedades e incendios. Las ciudades con precedentes de olas de calor sufrir¨¢n m¨¢s el fen¨®meno. La creciente poblaci¨®n de edad avanzada corre m¨¢s riesgo, as¨ª como las comunidades costeras, que suman al cambio clim¨¢tico el desarrollo y la contaminaci¨®n. "El nivel de adaptaci¨®n actual es irregular y la preparaci¨®n para el riesgo creciente, baja", especifica el informe.

El mayor impacto del calentamiento ser¨¢ la reducci¨®n del grosor y la extensi¨®n de los glaciares y zonas nevadas, con fuertes impactos en los ecosistemas naturales y efectos negativos en las aves migratorias, mam¨ªferos y predadores. En las regiones ¨¢rticas habr¨¢ impactos a?adidos, como reducci¨®n del permafrost -la capa superficial de hielo que cubre de forma permanente el suelo de las regiones m¨¢s fr¨ªas- y de las aguas marinas congeladas, as¨ª como aumento de la erosi¨®n costera.

Las poblaciones del ?rtico tendr¨¢n sufrir¨¢n impactos negativos y positivos en las infraestructuras y en el transporte, especialmente por las alteraciones en los componentes de la criosfera. En ambos polos, ecosistemas y nichos ecol¨®gicos ser¨¢n especialmente vulnerables ya que se reducir¨¢n las barreras para las especies invasoras.

En el sur y el este de Australia, as¨ª como en algunas zonas de Nueva Zelanda, la escasez de agua ser¨¢ el factor dominante y se intensificar¨¢ en 2030. La consecuencia es que habr¨¢ p¨¦rdidas de biodiversidad en regiones de alto valor ecol¨®gico.

Varias comunidades costeras estar¨¢n en riesgo por la subida del nivel del mar y por las fuertes y frecuentes tormentas. Sin embargo, si la temperatura no sube m¨¢s de dos grados, algunas zonas pueden beneficiarse del calentamiento global, especialmente Nueva Zelanda y partes del Sur de Australia. La raz¨®n es que sus estaciones agr¨ªcolas ser¨¢n m¨¢s largas, sufrir¨¢n menos heladas, habr¨¢ una menor demanda energ¨¦tica en invierno y por tanto aumentar¨¢ el potencial hidroel¨¦ctrico.

La regi¨®n tiene capacidad para adaptarse a los cambios debido a su buena situaci¨®n econ¨®mica y la capacidad cient¨ªfica y t¨¦cnica.

Por su especial vulnerabilidad, el IPCC hace siempre una reflexi¨®n espec¨ªfica sobre las peque?as islas, donde la subida del nivel del mar exacerbar¨¢ las inundaciones, las tormentas, la erosi¨®n y otros da?os. Esto supondr¨¢ una seria amenaza para las infraestructuras y las comunidades que viven en ellas. Los cient¨ªficos est¨¢n seguros de que los recursos h¨ªdricos estar¨¢n muy seriamente amenazados. La subida de las temperaturas provocar¨¢ invasiones de especies no nativas, especialmente en las islas de latitudes medias y altas. Y, sobre todo, el turismo, su base econ¨®mica, se ver¨¢ comprometido por el deterioro de la costa y de los corales.

Los cient¨ªficos est¨¢n pr¨¢cticamente seguros de que el deshielo creciente en el Himalaya va a provocar gigantescas inundaciones y avalanchas de piedra, afectando seriamente a la disponibilidad de agua dulce. Las inundaciones podr¨¢n en grave riesgo extensas zonas costeras, especialmente las densamente pobladas de las regiones de los deltas del sur de Asia.

En el Sur y en Sureste continental, la interacci¨®n del cambio clim¨¢tico con el r¨¢pido crecimiento econ¨®mico y de poblaci¨®n, as¨ª como el aumento de las emigraciones a las ciudades, afectar¨¢n al desarrollo. Pueden verse afectadas 1.000 millones de personas en 2050. Las cosechas podr¨ªan aumentar hasta un 20% en el sureste asi¨¢tico y extremo oriente, mientras que pueden caer hasta un 30% en Asia central y del sur.