"La mitad de lo que dec¨ªan era mentira"

Dos testigos cuestionaron ayer las informaciones de El Mundo sobre sus declaraciones. El m¨¢s contundente fue el testigo protegido T-74, que amenaz¨® a dos cargos del diario con denunciarles por un motivo: "Porque la mitad de las cosas que dec¨ªan en el peri¨®dico que yo hab¨ªa contado eran mentira". El testigo asegur¨® que se sinti¨® "perseguido" y "presionado" por los periodistas, que le insist¨ªan sobre "los v¨ªnculos de ETA y el 11-M".

Los cargos, seg¨²n el testigo eran el vicedirector del diario Casimiro Garc¨ªa Abadillo y Antonio Rubio, que lo persiguieron "durante muchos d¨ªas" y que le mostraban las declaraciones que el testigo hab¨ªa prestado ante la Unidad Central de Informaci¨®n Exterior. La fiscal le pregunt¨® por qu¨¦ no denunci¨® la persecuci¨®n. "Si ten¨ªan mis declaraciones, ?de qui¨¦n me pod¨ªa fiar?", dijo.

Lo que cont¨® fue que Rubio y Garc¨ªa Abadillo le insist¨ªan "en los v¨ªnculos de ETA con el 11-M. Ellos ya sab¨ªan qu¨¦ preguntar porque insist¨ªan mucho en eso". El testigo asegur¨® que no dio ninguna entrevista, sino que dijo algunas cosas "para salir del paso". Cuando vio sus declaraciones en El Mundo, contact¨® con los periodistas para decirles "que les iba a denunciar porque la mitad de las cosas que dec¨ªa el peri¨®dico no eran verdad".

El testigo relat¨® en el sumario que los familiares de El Chino le contaron que estuvo en la c¨¢rcel "con un hombre de ETA" que le habr¨ªa ense?ado a montar un explosivo en una bombilla. Ocurri¨® en 1994; desde entonces, no volvi¨® "a o¨ªr hablar de las relaciones de El Chino y ETA".

El otro testigo que cuestion¨® a El Mundo, aunque de forma indirecta, fue el portero de la avenida de Bruselas, en Madrid, ante cuya finca estuvo el famoso Skoda Fabia. El portero nada dijo de que hubiera informado a la polic¨ªa o el CNI sobre supuestos movimientos sospechosos en ese coche.