Muere Kurt Vonnegut, genio de la contracultura
El escritor, fallecido a los 84 a?os en Nueva York, sacudi¨® las conciencias con 'Matadero cinco', su novela sobre el absurdo de la guerra
"Es muy dif¨ªcil recordar lo que no tiene sentido", dijo una vez Kurt Vonnegut. Se refer¨ªa a los casi 25 a?os que le cost¨® escribir Matadero cinco, una novela nacida de su experiencia como prisionero y v¨ªctima del bombardeo de Dresde y que se convirti¨® en una de las m¨¢s sagaces cr¨ªticas de la literatura contra el absurdo de las guerras. Ayer, la vigencia de ese libro y de toda su obra volv¨ªa a ser subrayada con motivo de la muerte de su autor, quien falleci¨® el mi¨¦rcoles en Nueva York a los 84 a?os, a causa de las complicaciones provocadas por una ca¨ªda.
"Vonnegut era muy ingenioso, un estupendo escritor de ciencia-ficci¨®n, por lo que pudo lidiar muy bien con la s¨¢tira, en una ¨¦poca, los a?os cincuenta, en que nadie se atrev¨ªa a hacerlo", recordaba en la radio NPR el tambi¨¦n escritor Gore Vidal, de su misma generaci¨®n.
Su humor negro, su iron¨ªa y su tremenda capacidad inventiva, desplegada a trav¨¦s de la creaci¨®n de razas y personajes ¨²nicos como los transformadorians, a los que situaba en realidades abruptas como las de la guerra o la destrucci¨®n del medio ambiente, le convirtieron en una de las voces m¨¢s personales y cr¨ªticas de la literatura contempor¨¢nea. Adem¨¢s, su tendencia a saltarse las reglas de puntuaci¨®n habituales y las estructuras narrativas cl¨¢sicas en libros como Cuna de gato o Madre noche le convirtieron en centro de atenci¨®n m¨¢s all¨¢ de los contenidos de su obra.
Vonnegut, descendiente de alemanes, naci¨® en Indian¨¢polis en 1922. El suicidio de su madre cuando ¨¦l apenas ten¨ªa 20 a?os dej¨® un halo de pesimismo en su existencia. Asistir al bombardeo de Dresde como prisionero de los nazis en 1945 le marcar¨ªa especialmente. Fue el episodio m¨¢s sangriento de la II Guerra Mundial, en el que murieron 115.000 personas, m¨¢s que en el bombardeo nuclear de Hiroshima y Nagasaki juntos. Vonnegut, que se salv¨® gracias a su trabajo en un s¨®tano, tuvo que apilar, enterrar y cremar cad¨¢veres. Comenz¨® a escribir al finalizar el conflicto, publicando su primera novela, La pianola, en 1952.
Cuando Matadero cinco llegaba a las librer¨ªas, en 1969, describiendo su experiencia b¨¦lica a trav¨¦s del soldado Billy Pilgrim, Estados Unidos estaba en plena guerra de Vietnam y el libro se convirti¨® en un s¨ªmbolo contracultural. "No s¨®lo me liber¨® a m¨ª, sino a otros escritores porque la guerra de Vietnam hizo a nuestros l¨ªderes y nuestros motivos parecer tan cutres y est¨²pidos que pudimos finalmente hablar de las cosas terribles que les hicimos a la peor gente imaginable, los nazis. La verdad puede ser muy poderosa", dijo.
Tras la invasi¨®n estadounidense de Irak, Vonnegut se convirti¨® en uno de sus m¨¢s vocales detractores. Sin embargo, en su ¨²ltimo escrito, una colecci¨®n de ensayos titulada The man without a country, el autor se centr¨® en el poder de la m¨²sica para superar las tragedias. Y all¨ª, pese a su conocido escepticismo religioso, escribi¨®: "Si alguna vez muero, Dios me perdone, dejemos que ¨¦ste sea mi epitafio: 'La ¨²nica prueba que necesit¨® para probar la existencia de Dios fue la m¨²sica".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.