Garay, el 'negro de hielo'
El central argentino del Racing, una de las revelaciones del curso, que comenz¨® su carrera como ariete, es el defensa m¨¢s goleador de la Liga
"Mi madre es inquieta, el¨¦ctrica", dice Ezequiel Garay; "yo, gracias a Dios, sal¨ª a mi padre. Soy m¨¢s de mirar, de pensar, y despu¨¦s decir las cosas".
Garay, alias El Negro, es un central argentino de 20 a?os. Sus rasgos orientales y una piel cetrina confirman el mote que le han puesto sus compa?eros. Pero tambi¨¦n podr¨ªan llamarle: El Negro de Hielo. Ma?ana, en El Sardinero, los delanteros del Madrid no lo encontrar¨¢n descolocado f¨¢cilmente. Tampoco le pondr¨¢n nervioso cuando le encaren.
Garay es uno de los jugadores que m¨¢s ha crecido en el ¨²ltimo a?o. Lo normal en estos casos es la autopromoci¨®n, la manifestaci¨®n esperanzada de alcanzar un gran club. "Yo me quiero quedar en el Racing tres a?os m¨¢s", dice ¨¦l. "Soy muy joven y necesito hacerme con una base de experiencia. Ahora estoy pasando por un buen momento, pero nada m¨¢s".
Es tan pac¨ªfico que enga?a. Cuando lleg¨® al Racing, en el verano pasado, el nuevo t¨¦cnico, Miguel ?ngel Portugal, lo vio tan apagado, tan poco comunicativo, tan irrelevante, que no se atrevi¨® a contar con ¨¦l. As¨ª pasaron tres jornadas. Tres derrotas. Al cuarto partido de Liga, cuando Portugal se jugaba el cargo, Garay fue titular en el centro de la zaga. "Era joven y no me hab¨ªan visto mucho", recuerda el jugador.
A Garay le gusta saltar al campo con los nervios a flor de piel. "Disfruto con ese cosquilleo", dice. "Me divierto much¨ªsimo". Los ambientes cargados, como el de Pamplona, le recuerdan al campeonato argentino. La tarde de su debut, en un clima hostil, se sinti¨® como en Arroyito. Fue la primera victoria del Racing, el mejopr equipo de la segunda vuelta, esta temporada. Desde entonces, Garay ha marcado siete goles y el defensa m¨¢s goleador del campeonato. Hoy es el segundo m¨¢ximo goleador del Racing, despu¨¦s de Zigic. Sus t¨¦cnicos descubrieron que ten¨ªa el car¨¢cter ideal para lanzar faltas y penaltis. Como dijo el preparador f¨ªsico del Racing, Javier Mi?ano: "No siente la presi¨®n. Es fr¨ªo. No se inmuta y cuando golpea el bal¨®n es elegante".
Igual que Messi, con quien coincidi¨® en el Newell's, Garay se cri¨® en un barrio pobre de Rosario. All¨ª aprendi¨® a sobrevivir en cualquier parte del campo. "En el potrero jugaba donde quer¨ªa", dice. "Por eso en las inferiores de Newell's pude rendir en cualquier lado. Si el t¨¦cnico me pon¨ªa de carrilero, lo pod¨ªa hacer bien. Si me pon¨ªa de central, tambi¨¦n. Pero yo empec¨¦ de delantero centro".
"Hasta los catorce a?os, en el barrio, jugaba de nueve", advierte. "Era un delantero normalito. S¨®lo me distingu¨ªa por ser alto. Me tiraban todos los balones por arriba, como a Zigic y yo los bajaba y hac¨ªa lo que pod¨ªa. No gambeteaba. Era de recibir de espaldas, me giraba y le pegaba al arco. Hasta que me fui a probar a Newell's Old Boys. Como en la lista hab¨ªa muchos delanteros me puse de medio centro. Pens¨¦: 'En el medio, como no hay muchos, voy a tener m¨¢s posibilidades. Despu¨¦s termin¨¦ m¨¢s atr¨¢s".
En el partido de ida, en el Bernab¨¦u, Garay marc¨® el gol del Racing de falta directa. Pero perdi¨® (3-1). Ma?ana cree que cambiar¨¢ su suerte. "Estamos confiad¨ªsimos de que los tres puntos se van a quedar en casa", dice. "No les tenemos que dejar jugar. En cada pelota que reciban tiene que haber dos o tres nuestros. Los tenemos que comer en todos los rincones del campo. En todo momento. Al Madrid esto no le gusta y El Sardinero lo va a sentir".
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