El poeta pide...

LOS CR?TICOS coinciden, m¨¢s all¨¢ de adhesiones masivas o reticencias soterradas, en subrayar la intensidad de la mirada de Bola?o, tan notable sobre todo en las prosas o esbozos de cuentos donde vuelve una y otra vez sobre paisajes obsesivos: el mastod¨®ntico M¨¦xico DF o la desolada melancol¨ªa de extrarradio de Casteldefells. Y uno evocado, m¨¢s moral que f¨ªsico: Chile. Del talento para la descripci¨®n, el expresivo lirismo y la atenta percepci¨®n de su propio devenir literario hay muestras muy interesantes en La Universidad Desconocida, que re¨²ne sus poemas publicados, los in¨¦ditos, los textos que formaban la novela Amberes y muchas prosas de circunstancias. No se trata de un libro unitario, sino de la reuni¨®n de las distintas escrituras que conten¨ªa el segundo estilo de Bola?o, el de la literatura r¨ªo. El primer estilo, del que La literatura nazi en Am¨¦rica es una muestra cabal, posiblemente no le ofreciese la suficiente cercan¨ªa o ductilidad respecto de su imagen, que aqu¨ª parece imponerse por sobre cualquier fragmento escogido. De all¨ª la reveladora cualidad intimista de pasajes como ¨¦ste: "Es as¨ª de simple: un poeta pide a los libros que am¨® y que le inquietaron protecci¨®n para su hijo en los a?os venideros. En el otro poema, por el contrario, el poeta pide a su hijo que cuide de los libros en el futuro. Es decir, que los lea".