Segundos tiempos
Obsesiona el prime time, pero de cuando en cuando conviene preocuparse por esas horas bajas o secundarias de la televisi¨®n: el tiempo del relleno, de la estolidez y el descenso del pico elevado. Entre la sobremesa culebrista y la parrillada nocturna, TVE-1 ofrece un programa que, en su incongruencia, alcanza a veces una gracia esot¨¦rica, Espa?a directo (ya el t¨ªtulo se las trae). El jueves ofreci¨® un reportaje de ¨ªndole social sobre el efecto de la llegada de 100 rumanos a un pueblecito de Zamora habitado por 200 personas; a muchos del pueblo no les gustan los extranjeros, no s¨®lo por los robos ocasionales que se han producido, sino por lo amontonados que viven, como si eso fuera un capricho residencial y no una triste necesidad. Las c¨¢maras entraron en una de las modestas viviendas de los emigrantes, que negaron la cifra de 40 personas en cada casa; s¨®lo hab¨ªa cuatro mujeres y un ni?o por habitaci¨®n. Que despu¨¦s de ese reportaje se ense?ase a cocinar una sopa de carne y c¨®mo hacer para quitar el barro de los felpudos, ?era humor negro o una simple muestra de insensibilidad?
En Diario de la noche (Telemadrid), S¨¢nchez Drag¨®, como es propio de todo buen entrevistador, le busc¨® las vueltas a Rafael Simancas, pero el candidato a la presidencia de la Comunidad madrile?a, anta?o un poco moroso y desva¨ªdo, ahora est¨¢ en su prime: suelto, incisivo, rotundo, humor¨ªstico. Drag¨® le quer¨ªa tomar el pelo a Simancas (v¨ªa Miguel Sebasti¨¢n), y al final fue el presidenciable quien le ense?¨® lo que vale un peine. Drag¨® ha incorporado un espacio final de Defensa del Espectador donde se deja zaherir con buen humor; un alivio en lugar de las filosof¨ªas cajoneras de su colaborador fijo Alejandro Jodorowsky. Pero no nos libramos del psicomago chileno (psicopompo, dir¨ªa yo). Jodorowsky ten¨ªa cita en Noche Hache (Cuatro), y hasta all¨ª llev¨® sus consejos y m¨¢ximas; sus paridas. P¨¦simo cineasta, p¨¦simo dramaturgo, p¨¦simo escritor, el hombre debe tener sin duda alguna gracia que yo no le veo. ?La del charlat¨¢n? ?La del psico-pompier?
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